Pasos se escuchaban desde la entrada incluso antes de cruzar por esa puerta, aunque ligeros y casi silenciosos, la sola aura de aquella persona hacía que se sientan pesados al oírlos. Lentamente avanzó, con una tranquilidad abrumadora abrió la puerta, y continuó su camino hasta llegar a estar frente al escritorio de quien es su jefe.
— Hay algo nuevo para ti, Jeon.
Una sonrisa adornó su rostro y asintió, se preguntaba sin curiosidad verdadera qué podría tocarle para ese día, a quién debía ponerle fin. Bueno o malo le daba igual, él solo quería disfrutar de uno de los placeres que se le fue otorgado por la vida, y es precisamente quitársela a otros.
— ¿Es todo?
El superior sólo asintió, dandole pase a retirarse.
Decir que no le agradaba su trabajo sería mentir, pese a que tal vez haya gente que mata por dinero, a Jeon solo le interesaba el sanguinario arte que dominaba. Podía matar no solo con armamento, sus desnudas manos eran instrumentos esplendidos, todo dependía de su misión y hasta humor.
Abandonó el edificio con una mirada triunfal, la carpeta que llevaba en sus manos la leería en casa con calma, quería ver con suma atención el rostro de su nueva víctima.
Subió a su coche y con la irritante mañana tan sofocante, debido al tráfico, se dedicó a disfrutar del dulce chillido de las bocinas de los coches y las escandalosas —y malhumoradas— voces de los conductores insultándose unos a otros, hacían de la estadía en la carretera, una delicia.
No había nada mejor que saber que, debido a todo ese furor mal encaminado, seguramente al menos una de esas almas morirá, y si él tenía suerte, hasta podría ser testigo.
Fue una hermosa mañana, llena de gente mortal como a Jungkook le gusta.
Se abrió paso a su departamento y tarareando una canción de IU fue a su habitación. Su mente a veces divagaba en quien sabe dónde, no le es muy relevante recordar. Aunque si tuviera víctimas de las cuales no recuerda el rostro de terror que le mostraron antes de morir, eso sí que podría estresarle, después de todo Jeon ama su arte. Las células de su cuerpo sienten excitación de solo pensar que muy pronto sus manos ya estarían arrebatando la efímera y valiosa vida de alguien más, y no es que las considere valiosas por quien sea que sean sus víctimas, más bien es el dulce sentir de las corrientes de dopamina recorriéndole el cuerpo, lo que lo hace apreciar la vida, esa vida que tanto disfruta ver escurriéndose en lo que vendrían a ser sus resbaladizas y letales manos.
Se acomodó apoyándose en el respaldar de la cama y prosiguió a por fin abrir la carpeta, quería saber; ya que estaba en la comodidad de su hogar; quién sería el afortunado o afortunada.
En la primera hoja podía observar la información irrelevante de su nueva víctima.
— Un actorcito, uh.
Ni lento ni perezoso se dedicó a seguir llenando su memoria personal de lo que haga falta saber del sujeto. En las siguientes hojas debería haber fotos del actor, sin embargo, no halló más que solo más información de la persona, esto desequilibró un poco a Jungkook. ¿Es un juego dónde tendría que jugar al detective? saber únicamente el apodo o nombre artístico no le hubiera causado problemas si se tratara de averiguar quien diablos era, pero había un detalle más. En aquel papel le estaban dejando las instrucciones de cómo querían muerto al actor, el cuándo y dónde no fueron la excepción.
— ¿Quién sería tan salvaje de ordenar una muerte así? —habló con aparente indignación—. Afortunadamente seré yo quien le de paz a su alma.
La estruendosa risa de nuestro asesino llenó la habitación —y hasta podría decirse que el departamento completo fue inundado por esta— bueno, tampoco es que hayan ordenado una muerte macabra, pero por lo general se le daba libre albedrío para asesinar, y no seguía estúpidas reglas que algún idiota quisiera poner como condición. ¿No era mejor dejarle a él decidir? Le quitan la diversión, sin embargo, matar es matar y sigue amando su arte.
Okuduğunuz için teşekkürler!
Ziyaretçilerimize Reklamlar göstererek Inkspired’ı ücretsiz tutabiliriz. Lütfen AdBlocker’ı beyaz listeye ekleyerek veya devre dışı bırakarak bizi destekleyin.
Bunu yaptıktan sonra, Inkspired’i normal şekilde kullanmaya devam etmek için lütfen web sitesini yeniden yükleyin..