shoyobear Max .

Nuestros protagonistas son Kouta y Shun dos mejores amigos que tal vez no sean mejores amigos... ¿Novios? Algo así. Los acompañaremos en la idiota forma que tienen de amarse • Historia original


LGBT+ 13 yaşın altındaki çocuklar için değil.

#lgbt #gay #boyslove
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Idiotas Inteligentes

Por mala o buena suerte los chicos mantenían todo en secreto por el simple problema de ser "gays", sus familias eran de lo mejor, no lo duden, pero no saben si los van a aceptar, hay mucho en juego


El cuerpo escuálido y pequeño es propiedad de Kouta, nuestro chico de 17 años recién cumplidos tiene una personalidad... Especial, para no criticarle. Es bastante tierno y se la pasa llorando normalmente por cualquier estúpidez, nunca nadie le entiende, a no ser que sea Shun, que lo conoce de una manera subnormal, aún así él es gracioso y medio vulgar cuando está solo, pero siendo tonto se comporta como una madre de vez en cuando, puede hacerte sentir bien con cualquier frase y los niños lo aman, eso da un poco de miedo


Shun, quién es más alto y fornido, nunca se entendió esto por que no hace ejercicio, (a lo contrario de Kouta quien hace voleyball) tampoco se mueve mucho por que no tiene ganas de nada, claro, no tiene músculos, solo es un poco más grande en cuanto a cuerpo, comparándolo con Kouta obviamente. Tiene una personalidad media seria, según intimida a alguna de las chicas en la preparatoria ¡Algunas han dicho que no entienden como alguien tan serio puede ser el mejor amigo de alguien tan adorable como Kouta!


Además de ser serio, si tiene la confianza suficiente es muy gracioso, a su manera, obviamente. Tiene 16 años que cumplió hace unos meses, situándose menor que Kouta, quien realmente quedó medio perdido ante eso, cumpliría los 17 en noviembre de este año (todos en shock)


Luego de haber presentado a los chicos que nos acompañaran en esta historia, ¡pasemos a ellos mismos!


Nuestros protagonistas están viendo televisión, aburrimiento total


— Ah... — se quejó vagamente de no encontrar nada


— Oh, porno — saltó el más alto al escuchar el ruido emitido por la boca del pequeño — Habíamos comentado que no llegaríamos a eso hasta los 18— negó seriamente


— C-Cállate inútil — su búsqueda paró en cuanto llegó al canal Discovery Kids actualmente estaban pasando una película de My Little Pony: Equestria Girls — Oh, oh, puedo dejar esto ¿verdad?— atacó con sus lindos ojos de perrito, que se supone nunca fallaban


— B-Bien, no entiendo como te gusta esto — se sentó a su lado y acarició su cabeza, tenía planeado dormir mientras el otro miraba Mai litul poni o por lo menos se pronunciaba así


— Cállate, es totalmente épico-o — se formó una clara o en su boca mientras escuchaba como iban a cantar una canción, para ser claros, cuando todas cantan y les ponen colas, orejas y no sé que más


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— Hey amor — susurró intentando despertar al chico que se había dormido en su estomago — Te re cuesta, levántate idiota — le pegó en la cabeza


— ¿Me dijiste amor? — ilusionado por haber escuchado ese apodo, el cual nunca salía de la boca de su novio se quedó paralitico por unos segundos hasta que el golpe lo trajo a la realidad


— Solo, levántate — el enano de 1.60 ni siquiera se dió cuenta de haber dicho esa palabra y su cara se tornó en cada uno de los colores que existen hasta quedar en rojo


— Aww que lindo — le dió un beso y se dispuso a levantarse para ir al baño


Kouta se levantó a los escasos segundos


— Me and you girlfriend — comenzó a tararear una canción al azar mientras ordenaba todo, su madre llegaría en una hora del trabajo — Playing dress-up in my house — la canción era... extraña, pero bastante buena la verdad


— Amor — él si lo llamaba así —¿Entonces la tarea era para mañana?— los dos quedaron quietos, uno queriendo morir y el otro no entendía nada


— Agarrá las cuadernolas, ahora — y los dos pasaron la última hora a solas haciendo una tarea de biología, bastante fácil a decir verdad, son idiotas pero idiotas inteligentes


— Kouta — se sintió un grito desde abajo, obviamente era la voz de su madre — Llegué —


"No me dí cuenta" pensó el pequeño


— Estamos arriba — dijo esperando una respuesta que fue un simple "Ok"


Los dos al minuto bajaron para saludar a la señora y para que el más grande se vaya, fue un día productivo, lo fue


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— Muy bien — se levantó de la mesa y lavó los platos que habían usado en su desayuno, era lo mínimo que podía hacer para que su madre esté menos atareada, podía limpiar de todo, pero no pidas que cocine, además de que no llega a los estantes, no sabe mucho sobre cocinar, apenas hace una salsa de tomate con fideos


— Gracias hijo — le dió un pequeño beso en la mejilla, hoy era el día libre de ella ya que no tenía que trabajar y su hijo le ayudaba en todo, lo único que haría en el día era cocinar, perfecto


— No hay de qué madre — le sonrió de una forma en la cual todo el mundo pensaría "quiero que sea mi hijo" — Yo ya me voy, procura descansar — tomó su mochila y se fue dejando a su madre totalmente orgullosa de tener un hijo así


Al llegar, su novio (es hermoso referirse con esa palabra a ese hombre) lo estaba esperando en la entrada — Hola — sonrió felizmente y entraron


— Hola chicos — se acercó la chica que actualmente era mejor amiga del pequeño, era linda y para suerte de Kouta, era más pequeña que él


— Tsukihi ¿cómo estás? — le dedicó una sonrisa para entrar en la clase


— Bastante bien la verdad, ¿hiciste la tarea? — era como esa amiga que siempre te recriminaba todo, y para ser su mejor amiga desde pequeña, lo conocía bastante bien


— Sí, lo hice — se sentó en su banca con pesadez — ¿Verdad? Shun — para ser críticos, en la escuela mostraban afecto pero no tanto como en su casa


— Oh si — dijo emocionado, era ya la quinta tarea que no se olvidaba de entregar ¡Y consecutivamente! Eso era un logro


— Muy bien chicos, abran sus cuadernos en la página 36



Era hora del almuerzo, el lugar no era como las escuelas normales que tienen que asistir con sus bentos, todos debían de almorzar juntos y el propio lugar ofrecía la comida


Por razones obvias nuestros protas se sentaban juntos, Tsukihi iba con unas amigas que tenía así que bueno, estaban solos en una mesa para 5 por que... Quién sabe por que, consiguieron una mesa para ellos solos, cosa que difícilmente se consigue


— ¿No crees que comes poco? — dijo el alto al dar un gran bocado a la comida


— ¿No crees que comes mucho? — respondió con otra pregunta mientrasagarraba un poquito de comida y la masticaba como 10 veces, no era un ghoul, tranquilos, solo que siempre comió como pajarito (para usar la frase que dice su madre)


— En fin, ¿que haremos hoy? — en cuanto a eso, solo se refería a que casa irían, todos los días estan viviendo la vida (jugando Minecraft) en alguna casa, todo dependía en cuan solos iban a estar


— Mi madre va... a estar... todo el día — comentó mientras se servía agua, lamento decir, que asco, esa agua estaba caliente, pero el pobre tenía que tomar algo por que se atragantó con un arroz y no dejaba de toser. Cada "..." se refiere a su tos


— En mi casa... — dejó un momento para pensar — Solo mi hermana — quien no se acercaba a su cuarto por que "era de chicos" y si un chico estuvo ahí eran gérmenes sin cesar, un poco irritante la verdad


— Bien, supongo que tu casa — ¿hoy harían cosas cochinas? Sí, comer papas fritas con los pies ¡Está todo preparado! ¿Esperaban sexo gay? Sigan esperando


— Toma — le pasó comida de su plato, un poco antihigiénco pero no importaba mucho la verdad — Intenta comer un poco más — lo miró preocupado, lo que al pequeño le pareció un gesto de bondad total


— ¿Eres una princesa de Disney?


— No, soy tu novio y me preocupo — habló seriamente, a veces le daban ataques de sinceridad, o algo así


— ¿Por que eres tan... — se quedó pensando en la palabra correcta — apachuchable? — le apretó las mejillas terminando con un beso tierno


— Lo mismo digo — sonrió satisfecho al ver el leve sonrojo del otro, en cuanto a cumplidos el pequeño era bastante sensible con exactamente todo, él podía decir cualquier cosa avergonzante para el otro sin miedo, pero si se lo decían a él explotaba en vergüenza


— Realmente no quiero comer — le abrazó intentando que el otro ceda a su puchero anterior


— Oye enserio, dos cucharadas más — alzó dos dedos, eso siempre funcionaba cuando los pequeños no querían comer y Kouta... Es como un niño


— Ok — entusiasta comió 2 cucharadas más y casi se ahoga con un arroz devuelta pero este pudo pasar sin problemas — Lissssto — se levantó y llevó el plato a donde se juntaban


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Ya en la casa del más alto, obviamente con un aviso a la madre de Kouta para que esta no se asuste, están viendo una película, su hermana está en un tipo de videollamada con su amiga, ignorandolos completamente, así era su vida de adolescente reciente, la cual recién estaba en sus 13 años


Obviamente para nuestros protagonistas la película realmente no existía para nada


— Uh, esto es tan cliché que da miedo — comentó al recobrar el aire


— Es cierto, siempre hacen esto cuando son pareja o se gustan mutuamente — habló mientras seguía jugueteando con la espalda de Kouta


— ¿Es obvio que llegamos a la conclusión de que soy el bottom? — pasó sus brazos por el cuello del más alto


— Bueno... — miró de arriba a abajo el cuerpo que tenía enfrente — Sí, totalmente — y volvió a atacar sus labios


No llegaban a mucho, solo eran besos que para nada eran inocentes e infantiles, pero prometieron ser tan excitantes hasta ese momento, no llegarían a tener relaciones solo por que son menores


— Mgh — soltó altamente el ojiazul dejando paralítico al más alto


— Bien... Wow — todavía no podía articular palabras, el shock lo dejó en una forma de repasar toda su vida y existencia en el planeta tierra, Kouta siempre se aguantaba cualquier sonido que pudiera dejarlo como un actual bottom


— Pensé que no iba a hacer tanto efecto — se removió en su lugar — Me desconocí por un momento — sonrió mordiéndose el labio inferior


Aún no se sabe como actualmente con un año y medio de relación ellos siguen con su promesa de no llegar a eso


— Esta imagen es muy... erótica — el escuálido cuerpo debajo suyo soltó una pequeña risa y lo volvió a acercar — Intenta no guardar eso la próxima vez —


— ¿Quien dijo que habría próxima vez?


— ¿Ahora mismo? Yo — fue acercándose poco a poco a los labios que lo correspondían completamente


— Shun, llegó la pizza — se sintió la voz de una chica, exactamente su hermana menor


Pequeña explicación¡! Sus padres se fueron por 1 semana por temas de trabajo así que no había nada para comer y si lo había, obviamente iban a pedir pizza


— Ah vamos — se quejó acomodando la remera del cuerpo que tenía debajo (¿Cabe recalcar que era suya? Supongo que no) — Está bien, ya bajamos — habló a lo alto para que le escuchara


Los dos se acomodaron rápidamente y bajaron, imaginen la confianza que hay en esa casa, o por lo menos entre hermanos (Kouta formaba parte por que la chica lo dijo) que el pelimarrón salió con la remera de Shun sin problema


Era cómodo llevar algo que te quede como vestido ¡y le quedaba muy bien! Traía un aura adorable y no dudaba en usarla para cualquier momento


— Kouta — le sonrió la pequeña, aún que sea un poco irritante sigue siendo una niña, de vez en cuando es graciosa y claramente ya los había descubierto hace unos meses, no es inútil — Saben que los acepto pero por favor, esto es demasiado cursi —


— Te refieres a... — habló Shun quien estaba buscando vasos para tomar la bebida, Coca-Cola, algo obvio e insignificante


— Ya sabes... eso — señaló a Kouta, este saludó con una sonrisa y siguió con su misión: robar el último pedazo de fainá


— A sí, su camisa era de la prepa y no la iba a ensuciar — habló despreocupado y le pasó un vaso a cada uno


Realmente no mentía, si llegaba a ensuciar algo su madre lo regañaría por no cuidar las cosas, en eso, es un poco seria


— Ah claro, no escuché nada igualmente — todos sabían a que se refería, hasta los lectores de esta historia lo saben


— Sí... Lamentamos eso... — dijo Kouta después de haberse ahogado con la efervescencia de la Coca-Cola por la vergüenza


— Realmente yo no.


Y volvió a ahogarse nuestro enano de 1.60, alto para nadie, siquiera era más alto que Sophia, así se llama la hermana de Shun, ella medía 1.56 y seguía creciendo


— Emh... Yo... Ustedes, ¿cuando vuelven sus padres? — cambió de tema luego de recuperarse gracias a que Shun le dió un pequeño golpesito en la espalda


— Domingo — hablaron los dos al mismo tiempo, intentaban decirlo primero pero les salió al mismo tiempo, una pelea entre hermanos de quién era más rápido, normal


— Es martes — se quedó mirando a la pared mientras pensaba, el gigante de 1.83 miró a la pared pensando que había un bicho — ¿Y si mañana me quedo? — ayudó a la chica que estaba peleando con el queso de la pizza


— ¿Por que no hoy? — le abrazó por detrás de una forma demasiado tierna para la chica, quién se lamentaba por no tener un novio


— Sí, es cierto, ¿por que? — continuó Sophia después de agradecerle por la ayuda con la muzzarella rebelde


— Por que, voy a pasar tiempo con mi madre — puso sus manos sobre las de Shun y se acurrucó en su brazo — Tal vez y hasta le gane en la lotería — dijo un poco molesto, nunca le ganaba, no entendía su mala suerte ¿Eran los cartones? ¿Su madre hacía trampa? Todavía no entendía


— Oh, entiendo— comentó agarrando su celular y levantándose


— ¿Sophi te vas? — la llamó con un apodo que dejó a la chica flotando, tener un hermano tan tierno y que no sea tu hermano de sangre es lindo pero a la vez quieres romper todo, Shun es bastante seco (para ella)


— Ah.. — se quedó mirando a la pareja seriamente — Son tan gays — murmuró en forma de burla — Voy a mi cuarto — sonrió


— Uy — dijo el menor cuando Sophia se fue — Salí de acá que me vas a pegar lo lgbt — se volteó a ver a Shun


— Mira quien lo dice... — se juntaron en un estúpido beso mientras se reían


— Disculpen, ¿saben dónde quedó la coca...?


— E-En la nevera — señaló y se escabulló hacia el cuarto del más grande, había visto en el reloj de pared que eran casi las 18 y tenía que volver a su casa (por suerte a unas dos cuadras de la del mayor)


— ¿Ya te tienes que ir? — comentó apoyado en el marco de la puerta


— Pervertido de mierda — le tiró la remera a la cara y se puso la camisa — Sip — se acercó y le dió un beso en mejilla, el cual le costó un montón porsu altura


— ¿Quieres que te acompañe? — aunque estaba cerca no iba a dudar en que le podrían hacer a Kouta si iba solo


— Tranquilo está bien — le abrazó y se fue en búsqueda de Sophia para despedirse, cuando lo logró se fue a su casa


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— Por favor, eso es obviamente trampa — comentó mientras sentía la risa de su madre


— Tienes que aprender a perder — comentó mientras recogía todo — No sé tu pero yo estoy un poco cansada — dijo cuando terminó con su bostezo.


— Ah si, antes de que te vayas — su madre le prestó atención — ¿Puedo por favor quedarme con Shun a dormir mañana? — marcó el porfavor haciendo un pucherito tierno


— Está bien, pero no hagan mucho desorden, estoy a cargo de ustedes tres — la madre de Shun y la de Kouta son bastante amigas, llevando a que a veces cuando alguna necesite ayuda con su hijo/a la otra siempre esté dispuesta


— Muchas gracias, te amo, te amo, te amo — le dió un beso en la mejilla y subió hacia arriba, amaba a su madre demasiado


Y ella también, ¿creen que después de 1 año y medio que tiene de relación con Shun no se dió cuenta?


Pues no lo hizo.


El chico preparó todo para el día siguiente con ilusión, ¿hace cuanto no se quedaba en la casa de algún amigo? Había perdido la cuenta, casi nunca se quedaba con Shun por que sentía que debía pasar tiempo con su madre pero ahora estaba bien, su madre era feliz


En poco tiempo, varias horas que pasaron rápidamente, sonó la alarma para ir a estudiar, quién alguien como Kouta nunca ignora, todavía no entiende esas personas que ponen un montón de alarmas para poder levantarse y cuando llegan a despertarse están totalmente dormidos


Él se despertaba a la primera y sin chistar, sobre todo, se levantaba sin ningún rastro de sueño ya que no lo tenía, recuperaba todas las energías


— Agh, ¿por qué era que lloraba? — susurró mirando la almohada, se había dormido hace horas pero recordaba haber llorado por algo que realmente le interesaba poco, pero lo había hecho llorar de alguna forma u otra


Chasqueó los dedos — Muy bien Kouta, es miércoles con M de...— achinó los ojos queriendo ver los horarios y esperando que haya una asignatura que empiece con esa letra — Matemáticas — habló con entusiasmo


Se levantó de un salto (cosa que le hizo mal), tomó una ducha, se lavó los dientes y al ponerse el uniforme se quedó un tiempo mirando cada parte de su cuerpo, con detenimiento en esas partes que dudaba en si eran lindas


— Nah, estoy re lindo — se separó del espejo y puso una pose de modelo, tenía buen culo, seguro las chicas lo envidiaban (aunque no tanto cómo él creía)


Bajó y desayunó con su madre como normalmente lo hacía, se despidió y fue felizmente a la preparatoria


—————■————♡————■————


— ¿De dónde sacas una pregunta tan estúpida? — ese era Shun con algunos de sus amigos, 3 en total, 4 con él


— ¡Solo responde!


— Hm... — actualmente la pregunta era: ¿Que prefieres, tetas o culos? Un poco vulgar, no quería responder pero ya estaban molestándolo — Supongo que... ¿Culos? — todavía le parecía vulgar y estúpido pero lo respondió


— Teniendo a Kouta — murmuró uno de sus amigos, él solo lo miró mal


— Oh, tienes razón — otro le dió la razón, también lo miró mal


— Bueno... — fue a hablar el último pero le dedicó la misma mirada — Nada.


— Shun — hablando del rey de roma — Mira esto — con un sapito de papel en la mano se sentó en las piernas del nombrado mirándolo cara a cara


Los otros chicos solo le levantaron los dedos pulgares y voltearon a hablar... ¿de fútbol?


— ¿No es lindo? Tsukihi me enseñó a hacerlo... — para Shun alguien como él era un angel bajado del cielo, era tierno pero a la vez un idiota de mucho cuidado, lo amaba sin dudas — Bueno... Esta patita me salió mal — frunció el ceño e hizo un mohín de forma diabética


— Te quedó muy lindo — se dedicó a acariciar el cabello del chico que estaba concentrado en la patita rebelde


— Ah, mi madre me dejó ir a tu casa — habló concentrado y al terminar de hacer la patita, (esta vez si le salió) se levantó rápidamente — Mira, sí me salió — sacó la lengua, seguro hacia Tsukihi


— Bro... — se volteó uno de los chicos mordiéndose el labio inferior intentando hacer la cara de fuck boy que todo el mundo hace... ¿siempre?


Inconscientemente él también hizo la cara llevándose la mano a su barbilla — Dime bro —


— Te sacaste la lotería... bruh — le dió un golpe suave en el hombro


— ¿Podemos parar con esto? — una pausa — Bro.


— Seh, sería lo mejor — todos entraron en un mood normal — No pero enserio, tienes suerte — lo dijo de forma amigable así que no se llevó una mala mirada por parte de Shun


— Supongo.. — levemente la cara se le pintó de un rosa y desvió la mirada — Aunque me interesa mucho, no estamos aquí para hablar de Kouta — era su hora libre y hasta ahora hablaron de culos, tetas y Kouta, no le interesaba ninguno de esos primeros dos temas


— Shun — saltó el enano y se aguantó un "Voy papi" — Sophi me llamó, dice que va a invitar a una amiga a casa, más tarde — le mostró el teléfono y no dijo más por que sabía que ella estaba pidiendo permiso


— Hola — saludó la voz a través del teléfono — ¿Me dejas? —


— Ah sí, está bien — el entraba a Kouta casi siempre ¿Por qué ella no podía?


— Gracia‐ — alargó la "a" y Kouta le colgó


— Agudo — revolvió su cabeza negando e intentando quitar el pitido que tenía en el oído — Falta media hora para que se acabe el tiempo libre.. — eso significaba "Por favor Shun, ven a pasar tiempo conmigo"


— Bien, bien — negó con una sonrisa estúpida en los labios ¿Desde hace cuanto está sonriendo así? — Me voy — dió un pequeño saludo con su mano y se fué detrás de Kouta quien lo tomó por la mano que tenía libre


¿A dónde lo llevaba? Normalmente van a la terraza y miran el cielo mientras se dan mimitos, pero estaba muy frío para subir allí y Kouta lo sabía


— ¿A dónde vamos? — preguntó finalmente y el pequeño le sonrió con un dedo en su boca


— Shhh, es sorpresa — "dime" — Si te digo la sorpresa ya no es sorpresa — rió un poco ante haber dicho "sorpresa" tantas veces


— Bien.. — la curiosidad lo estaba carcomiendo pero no aportó nada más a la conversación


Los dos pararon frente a unas puertas gigantes y allí entendió donde estaban


— ¿Biblioteca? — se desinfló en su lugar, esperaba algo romántico


— Si pero, recuerda que nos dan — movió sus manos intentando pensar la palabra — Una parte de la biblioteca — no logró decir la palabra pero Shun entendió sus intenciones


— Mh, está bien — era un poco... tierno lo que quería su novio, carraspeó intentando disimular su nerviosismo


— Vamos ¿Sí? — le sonrió por última vez antes de adentrarse en la habitación frente a ellos — Hola... — susurró vagamente al entrar, la señora que siempre dice "shhht" los recibió


Mientras hablaban ellos dos, él solo bajaba y subía sus talones o jugaba con sus manos


La señora les entregó la llave y un libro medio infantil para ellos pero solo era para pasar el tiempo así que entendió y los dejó tranquilos


Ambos entraron en el pequeño cubículo y cuando cerraron bien la puerta se quedaron quietos mirándose a los ojos


— Bien.. — se acercó el pequeño cuerpo hacia él — Sabes, no tenía un plan bien definido... Solo quería comer frituras mientras leía sentado en tu regazo — golpeó sus mejillas al sentirlas calientes y sacó unas papitas fritas que tenía escondidas debajo de su buzo, holgado, por suerte


— Eres tan tierno — sollozó en su lugar mientras se aguantaba las ganas de abrazarlo pero Kouta terminó haciéndolo por él en un intento de tapar su sonrojo que iba creciendo poco a poco — Ah dios — se sentía demasiado feliz a su lado, ganas de apretarlo en sus brazos no le faltaban


— Te quiero... Mucho — murmuró mientras se refregaba en el pecho del otro


— Ya, lo siento — y cumplió con su fantasía actual, lo subió en brazos y lo apoyó en una pared para sostenerlo mejor, el otro solo lo miró con la cara roja y quedó paralítico, mientras su cara se tornaba en un rojo notable — Yo te amo... Y mucho — le dió besitos en cada parte de su cara, cuando sintió que no había más nada que besar lo miró con una sonrisa


— T-Tonto... ¿Que... fue eso? — apenas podía mirarlo a los ojos — ¿Me puedes bajar? — por gracias a dios no titubeó al hablar


— Oh, claro que no — el otro abrió la boca para quejarse pero el usó esa oportunidad y lo besó, para usar lo que dijo Willyrex hace unos años "Aprovechó el bug"


Aunque el chico quería decir "No era mi plan, bajame y vayamos a leer" aceptó gustoso la omisión del alto


Cuando el otro lo bajó solo tomó sus mejillas y exigió seguir con ese beso, pasados los minutos sus pulmones pedían aire


— Sufi.. — no logró terminar


Las manos del mayor (en altura, claramente) bajaron lenta y precisamente, como si buscaran bajar solo por deseo


Sonrió un poco mientras era llevado nuevamente contra la pared, tomó las manos que yacían en su parte... ¿Trasera? (O cualquier sinónimo para esa parte) y las subió hacia su espalda, "venganza" si pudiera hablar, lo hubiera dicho


En un momento Shun se alejó por simplemente ganas y él tomó una gran bocanada de aire — Por qué... Te ves... así... — aún estaba sin aire


— ¿Así cómo?


— Tus pulmones, amigo, eso es inhumano — habló cuando recuperó oxígeno, el pobre chico era lo contrario al Amazonas


— ¿Amigo? — eso sonó bastante intimidante para el más abajo, que al dar un paso hacia atrás se chocó con la pared — Y... No lo sé, tengo aguante, supongo — se sentó en la silla que estaba allí y palmeó sus muslos en un ritmo para nada coordinado


— ¿Ya vamos a leer? — mitad triste mitad feliz se acercó al mayor


— Si quieres..


— Sí quiero — tomó el libro que yacía en el suelo, tal vez se había caído mientras... bueno ¿Ya saben no? O por lo menos eso esperaba él ¿Y si fue un fantasma y no lo vieron? Nah, eso es imposible


El más alto lo agarró por la cintura y lo sentó en su regazo asustándolo — ¿De qué es? — mentía si decía que no estaba feliz, pasar tiempo a solas mientras el chico leía con esa voz que tanto amaba era un buen plan


— Mh... Violeta, de Susana Olaondo — leyó la tapa, aunque ese libro se lo había leído inumerables de veces a él le seguía gustando, cualquiera de las dos partes en realidad


— Eh~ ¿Era de Uruguay esa señora verdad? — por alguna razón desconocida consiguieron que llegara a su país


— ¡Sí! ¿Es muy chiquito verdad? — con su dedo índice y su pulgar hizo un circulo pequeño — ¡Casi ni se ve en el mapa! — emocionado abrió el libro, viendo cada una de las ilustraciones y leyendo en voz alta


— ¿Se terminó...? — eran muy cortos los cuentos infantiles, pero bueno, es para niños


— Mmh, pues sí — se dedicó a ver la tapa trasera que mostraba algunas de las otras historias que creó


Se sintió la campana que decía que el módulo terminaba y ambos se levantaron de su lugar


— No comimos las papitas — se hizo una masa blanda en su lugar, él quería comer


— Guardalas, las comemos en casa — y así, sin ninguna vergüenza levantó el buzo del pequeño llevandose la camisa con este, casi se queda embobado mirando el sonrojo que se marcó en el pequeño pero no lo hizo — Disculpa... — bajó la camisa y dejó el buzo arriba


— Si, no pasa nada — tomó la pequeña bolsa de papas, la llevó a su estomago y bajó su buzo


— ¿Y no se cae? — tocó donde estaba la bolsa, ni siquiera se notaba dónde estaba — Además, se me hace demasiado conocido este buzo — lo miró con una sonrisa ladina, casi con burla


— Tal vez ya me haz visto usarlo... — desvió su mirada y tarareó la misma canción que se le había quedado pegada hace unos días, claramente no era suyo, lo había saqueado hace unas semanas del ropero de Shun


— Mh.. Tal vez — tomó la mano del más bajo y se fueron hacia su clase

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— ¿Vienes y te vas? — se escuchó la voz de su madre a través del teléfono


— Sí, voy a buscar las cosas — apretó la mano de Shun con emoción — Pijama, cepillo de dientes... — nombró a la par que su madre miraba que cosas tenía que entregarle


— Y... ¿No te falta nada? — recriminó


— No lo creo...


— ¿Un abrigo? — típico de una madre


— Está bien — al estar cerca de la casa soltó la mano del más alto y disimuló


La puerta se abrió en la cara de ambos, se saludaron entre sí y comenzaron un conversación al azar


— ¿Sabes? Hoy tal vez salga — le entregó las cosas y le sonrió, luego miró a Shun — Cuídalo ¿Sí? — el pequeño desvió la mirada, si no conociera a su madre juraría que estaba hablando de su relación


Él alto solo asintió con una sonrisa


— Muy bien, cuídate — fue a darse la media vuelta pero repasó las palabras de su madre — ¿¡Salir!? — Shun pegó un salto por el susto y la señora rió a lo bajo


— Sí, hace mucho no salgo — acarició el cabello del menor quien seguía en shock — ¿Está bien? — sonrió con dulzura


— P-Pues sí — salió del shock mental y le entregó las cosas a Shun — Adelantate por favor — su voz sonó más aguda de lo normal


— Está bien — si no estuviera la madre de Kouta lo hubiera besado, abrazado y apachuchado ¡O cualquier cosa para demostrar su amor!


Cuando hijo y madre se encontraron solos se miraron entre sí


— ¿Tienes una cita? — soltó


— B-Bueno no creo que sea una cita — bromeó un poco pero la seriedad que había en su hijo la hizo ponerse un poco nerviosa — Mi jefe me invitó a una cena — se sinceró


— ¿¡Q-Q-Qué!? — derrepente recordó que estaban en una puerta y se adentró en la casa — ¿Qué? — bajó la voz


La señora solo asintió sin saber que decir


— Digo, es un buen hombre... — él lo conocía y al parecer era bueno — Es lo mejor para ti, yo estoy bien con que solo seas feliz... — la mujer lo abrazó con fuerza


— Gracias


Se quedó quieto en su lugar


— ¿Y cuando sale la pareja para vos? — bromeó para terminar un poco con ese tema


"Es Shun" — No lo sé, al parecer se está demorando — "Se demoró tanto que llegó cuando tenía 8 años"


La mujer rió abiertamente y le dió otro abrazo para despedirse, así para luego irse a la casa de su amado


— S-Shun — sollozó al haber llegado, el otro no dudó en abrazarlo — Tal vez tenga un nuevo padre — levantó su vista y apoyó su mentón en el pecho del alto, las lágrimas comenzaban a caer


— ¿Enserio? — preguntó con dulzura mientras llevaba su mano a la mejilla del chico en un intento vano de secar sus lágrimas — Eso está muy bien — sonrió


Asintió — Espero este no se vaya — se separó del chico y le sonrió al cielo.

17 Ağustos 2021 17:33 0 Rapor Yerleştirmek Hikayeyi takip edin
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Sonraki bölümü okuyun Entretenimiento

Yorum yap

İleti!
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~

Okumaktan zevk alıyor musun?

Hey! Hala var 4 bu hikayede kalan bölümler.
Okumaya devam etmek için lütfen kaydolun veya giriş yapın. Bedava!