"APASCACIO" Hikayeyi takip edin

¿Abuelito que estás haciendo?

-Por acá Mateo, arreglando estas cajas donde tengo muchos cuentos que he escrito.

-Abuelo, pero esas cajas que tienes son del siglo XX pasado.

-Sí Max, son bastante viejas algunos cuentos tienen más de 25 años o más que los escribí.

Jii..jii..jii..

-De que te ríes Max,

-Abuelo este cuento tiene un nombre muy folclórico dice solo “Apascacio”, de que se trata.

-Mateo y Max, ese cuento lo escribí cuando Apascacio, falleció como un homenaje a su memoria de ser un buen agente de la Policía Metropolitana de Caracas.

¿Abuelito, léenos el cuento?

-Bueno primero que todo les diré que yo lo conocía de vista, mas no de trato en ese tiempo era estudiante y subía a pie del terminal de autobuses que quedaba una cuadra más abajo de la Esquina de Sociedad, allá por el centro cerca de la Plaza Bolívar de Caracas, cuando iba para clases de la Universidad.

-Me ponía a verlo esperando que el semáforo diera pasó a los transeúntes, él estaba siempre sobre el rayado peatonal o en una tarima que usaban en esa época para dirigir el tráfico, con su uniforme de esa época de la policía que era azul con gorra, guantes y guetas o cubre botas de color blanco, tenía un modo muy peculiar de dirigir el transito con unos movimiento cortos y secos parecía como un robot y sonaba el pito para alertar al vehículo que ya podía pasar, así trascurría su día.

-Abuelito, pero dinos que hacía para que les escribieras este cuento.

-Eso era en el siglo pasado cuando la ética, respeto y buenas costumbres era al día a día de la vida caraqueña, todo el mudo respetaba la ley y a los policías.

¿Abuelito, y su nombre completo lo sabes?

-Sí, me dedique a buscar sus datos él se llamaba Apascacio Mata Palacios, un joven mulato espigado nacido en el sector "La Maroma", Panaquire, estado Miranda, el día de su nacimiento fue 22 de febrero de 1940, que luego de cumplir su servicio militar decidió quedare a vivir en Caracas, optó por ingresar a la Policía Metropolitana donde permaneció durante 32 años hasta que fue jubilado en noviembre de 1996, por el reglamento, él quería continuar pero acepto cumplir con lo de la jubilación fueron 32 años como policía de los cuales 18 años dirigió el tránsito en la esquina de Sociedad.

-Abuelo ¿Y durante todos esos años alguna anécdota importante en su vida?

-Sí Max, él era muy educado y correcto en su trabajo ayudaba a las personas de la tercera edad y niños a cruzar la calle, era tan estricto para hacer cumplir las leyes del tránsito que detenida y les daba un sermón al conductor infractor, si la falta era grave les imponía una multa, de estos muchos diputados y senadores del Congreso de la República tuvieron que pagar la multa de tránsito por pasar en la luz roja los detenida, es más le decía que como eran las personalidades e hacer las leyes, debían dar el ejemplo de cumplirlas a cabalidad.

Jii..jii..jii..

-Abuelito ¿Y no lo castigaron por multar a estos señores?

-No que va Mateo, si sabe que hasta al Presidente de esa época Luis Herrera Campins, quien días antes por televisión había manifestado su decisión de hacer cumplir las leyes de tránsito, lo multó por infractor que su vehículo por pasar la luz roja.

¿Y como fue eso abuelito cuéntanos?

-Bueno según pasó el Presidente iba retardado para su oficina en Miraflores, el jefe de los escoltas cruzo la luz roja, enseguida sonó el pito de policía de Apascacio, ordenándole estacionar a un lado y allí según dicen los testigos se suscitó este dialogo.

¡Ahí no...! ¡Deténganse…paren…paren…! dijo Apascacio.

¡Epa, tú no ves quienes somos...!, dijo el jefe de los escoltas del Presidente.

-Apascacio lo recriminó de buena manera le dijo: ¡Miren el semáforo, el paso es de los peatones…!

Jii..jii..jii...

-Abuelo ¿y que más paso?

-Bueno ese día era lunes 17 de marzo de 1980, las doce horas del mediodía con ese sol y calor de la época de verano.

-Los transeúntes se arremolinaron en las aceras para ver qué pasaba con la caravana presidencial, en eso el presidente Luis Herrera pregunta ¿Qué paso?

-Le dicen que un policía de tránsito los detuvo por pasar la luz roja.

-Sorpresa para los escoltas del presidente le dijo de manera enfática;

¡Dejen en paz al policía que esta cumpliendo cabalmente con la ley...!

-Luego de regañarlos enfáticamente y tú.

¡Paga la multa...!

-Le dijo al jefe de los escoltas por violar la ley.

-Este incidente se corrió como reguero pólvora entre la gente, días después era todo un tema de la alta política y Luis Herrera invito a Apascacio a desayunar en el Palacio de Miraflores donde departió toda la mañana con el hablando de muchas cosas, esta invitación a desayunar tuvo gran trascendencia y recorrió las noticias nacionales e internacionales.

-Mateo y Max, aunque no lo creas en 1981, el Presidente de los Estados Unidos Jimmy Carter, lo invitó a almorzar allá en el Capitolio en Washington D.C., luego que Apascacio, asistió a la escuela de agentes de Tennessee, fue enviando a buscar de un vuelo especial de un avión por Jimmy, dando así un gran ejemplo a todos los funcionarios de su gobierno que la Ley está por encima de todos los títulos y honores que tenga las personas.

-Abuelito entonces Apascacio se hizo muy famoso, sí ya lo era con anterioridad cuando una joven de 18 años que cursaba primer semestre de arquitectura en la Universidad Central de Venezuela (UCV) decidió participar en el concurso de Miss Venezuela ganado para luego ir a competir por el título de Miss Universo de 1979, allá Perth Entertainment Centre, en Perth, Australia, ese día viernes 20 de julio de 1979, donde concursaron 75 bellas jóvenes del mundo por el tan codiciando título de reina de la belleza.

-Abuelo, ¿Pero no nos has dicho quién era la muchacha que gano el concurso de belleza?

-Bueno como te dije una joven estudiante del primer semestre de arquitectura de la UCV, Maritza Sofía Sayalero Fernández una caraqueña nacida el 15 de febrero de 1961, con apenas 18 años y saben lo más importante de ella que no se le subió el título a la cabeza, sino regresó a seguir estudiando graduándose con excelentes calificaciones como arquitecta, ahora vive en México felizmente casada allá.

-Abuelito, ¿Pero que tiene que ver Maritza con Apascacio?

-Muy sencillo Mateo, ella iba a la parada del autobús que la llevaba a la universidad y todos los días veía a Apascacio dirigiendo el tránsito y cuando retornó al país, lo primero que pidió era que la escoltara el Policía de la Esquina de Sociedad “Apascacio”, como un reconocimiento a su gran labor de hacer cumplir la ley a cabalidad, esto se hizo eco por todos los medios de la farándula de la época.

-Luego que vino después abuelo.

-Como siempre viene en la vida el ocaso de la misma los años dorados, pero a Apascacio en el final de su vida no le fue bien, sufría de diabetes y en un accidente que sufrió una de sus piernas tuvieron que amputársela, ya que se le gangrenó y luego la otra paso lo mismo, vivió sus últimos año en una silla de ruedas, recordando viejos tiempos, él ascendió a Sargento Mayor de la Policía Metropolitana tuvo más de cuarenta altas condecoraciones, muchos reconocimientos de diplomas por su méritos y rectitud en el ejercicio como policía, era un ejemplo para las nuevas generaciones del siglo XX, lamentablemente ahora los policías del siglo XXI, estos en vez de respetar y hacer cumplir la ley, se han convertido en unos delincuentes de oficio.

-Abuelito ¿Y Apascacio, cuando falleció?

-Mateo, Apascacio, murió el día jueves 14 de mayo de 2015, prácticamente solo vivía en un modesto apartamento en el 23 de enero en Caracas, aún permanece una moto de la Policía Metropolitana que le asignado, la tenía aparcada en el patio trasero del edificio nunca la vendió decía que “ni loco, esa moto es parte de mí” y a petición suya la Chapa de policía que uso durante 32 años de servicio la Nº: 0983 fue sacada de la institución y no será asignada a nadie.

-Qué bello cuento abuelito de la honestidad y cabal cumplimiento de las leyes.