Algo extraño sucedió cuando él se le acercó, sintieron que se conocían de toda una vida. ¿Cómo podrían? Si nunca antes se habían visto. Una electricidad los recorrió y una extraña imagen en sus mentes apareció, definitivamente eran ellos en otro tiempo. Fue ahí que ella lo recordó. - te he visto en mis sueños - dijo - y yo en los míos- él respondió Como magia la imagen en sus mentes se disipó, creando así una nueva que duraría una vida más, hasta que se vuelvan a reencontrar y reconocer.

—¿Quien eres tú? Su mirada de fiera logró encender lo más profundo de su alma. El no dijo nada. Se quedó en silencio y agachó la cabeza. Ella tomó su barbilla obligando a qué le mirará. No podía decir nada, pero no hacía falta. Aquellos corazones latían al unísono y sus cuerpos temblorosos se arrojaron al abrazó. ¡Almas gemelas ardiendo de una misma llama azulada al fin fusionadas!

Simplemente el amor no se busca, no se mendiga, no se obliga. Solo llega y surge.

Los besos que imaginé contigo no puedo sentir los, me rompe el corazón el echo de que eres mi alma gemela que no está destinada a estar conmigo. Amor de mi vida; me has roto, no puedo aguantar tanto este dolor, creí que enamorandome de otra persona iba a amortiguar ese dolor. Pero como siempre, me equivoqué. Siempre lo hago.. Y me siento una estúpida por haberme hecho una ilusión con alguien que solo esperaba una amistad, pero que la término teniendo aun así...

Mi alma me confesó que ya nos elegimos en otras aventuras, en otras dimensiones, en otros espacio-tiempo, tal vez en otras galaxias, con otros rostros, pero con los mismos ojos, por eso cuando nos reencontramos nos reconocimos el mismísimo instante que mis ojos hicieron contacto con los tuyo. Mi alma me confesó que quedó muy triste la última vez que nos separamos y le regó al universo que te buscara, el universo creó caos para que volviéramos a encontrarnos y coincidir en este aquí y ahora.

No sabía para que estaban hechas las almas realmente,pero su alma y la mía erán una sola. Cuando te volví a mirar estavez todo fue distinto. Ahí supe que ese era mi lugar. Cuantas tormentas tuve que atravesar para al final darme cuenta de que las cosas buenas conllevan su tiempo. Tanto que corrí para terminar de nuevo en el principio. Con quíen siempre debí estar. Tú. No erás lo que buscaba,pero fuistes mejor de lo que yo pensé alguna vez.

En la estación de tren, sus miradas se encontraron por casualidad. El tiempo se detuvo mientras sus corazones empezaron a latir al unísono. En un instante, supieron que estaban destinados a recorrer juntos el camino de la vida, entrelazando sus manos y sus almas para siempre.

Ella quería hacerlo feliz, haría lo que sea por él, solo para mantenerlo feliz y brillante. Ella incluso pondría en riesgo su vida misma para cuidar el corazón de Tyler. No sabía si llamar a sus sentimientos simple amor fraternal, o un ligero enamoramiento, o solo admiración. Pero sabía que lo que sentía era real, era genuino y ese sentimiento perduraría en su corazón mientras ella viviera. El amor que sentía por Tyler era inexplicable, pero hermoso, y no había necesidad de complicarse...

Digamos que los dos teníamos esa pieza del rompecabeza que nos faltaba para complementarnos el uno al otro...dos almas gemelas perdidas que se encuentrán. Tu me enseñastes amar,yo te enseñe amarte a ti mismo. Al principio fue todo un reto,pero el final resultó ser mejor que lo anterior. Después de todo ambos nos quedamos,supongo que la vida misma fue la que se encargo de volvernos a juntar.

—Katie nunca debe encontrar a su padre, Filo. Katie no puede descubrir su origen, la profecía no puede cumplirse. —Katie no puede saber la verdad de su pasado. Sthefania no puede encontrar a su hermana melliza. Libro: Katie

En el pequeño rincón de una cafetería, sus miradas se encontraron. Ella, con sus ojos cálidos y una sonrisa tímida; él, con su encanto y una chispa en su mirada. Fue un encuentro efímero, pero suficiente para encender una llama en sus corazones. Los días pasaron, las palabras se entrelazaron y las risas resonaron. Compartieron secretos, sueños y miedos. Cada encuentro era un suspiro de complicidad. Aunque el mundo intentara separarlos, Su amor prevalecia. ¡Que Bello es el amor!

Creo que una de las peores tragedias de la vida es cuando te encuentras con alguien que quieres y que te quiere, pero tienen diferentes maneras de querer y demostrar amor, hasta que se alejan pensando que no se querían, cuando en realidad sí lo hacían.