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Tú no te lo mereces

Esta es la historia de dos primas, Marina y Mónica. Tristemente, los celos son protagonistas en su vida.

Marina tenía apenas cinco años, cuando un terrible accidente le arrebato a sus padres. Quedando así bajo la custodia de sus tíos; papás de Mónica. Mónica que era apenas unos meses mayor que Marina, no entendía muy bien lo que pasaba. Ahora la habitación tendría dos camas, el clóset serio dividido en dos, los juguetes y regalos tendrían que ser compartidos y ni hablar de la atención.

A pesar de que los tíos de Marina nunca mostraron diferencias entre las dos niñas, Mónica se sentía desplazada. No eran más que celos de una niña caprichosa. Pero eso no duro mucho, pronto aprendieron a estar juntas.

Paso un año y las primas ahora eran inseparables. Iban juntas al colegio, paseaban y jugaban sin peleas. Mas que primas, ya se veían como hermanas. Tuvieron una infancia tranquila y muy bonita.

Cuando las primas estaban por cumplir los 15 años, decidieron que querían una sola fiesta para las dos. Pero el encanto terminaría pronto, las ahora hermanas tenían muchos amigos en común, entre ellos un niño, el que les gustaba a ambas. La fiesta de 15 años fue todo un éxito, todos bailaron, cantaron y se divirtieron; excepto Mónica, ella estaba muy molesta con su prima por que casi toda la fiesta se la paso con Omar, el amigo mutuo. Ese fue tema de discusión para un largo tiempo, y la armonía del hogar se veía comprometida.

Omar invitaba a salir a Marina y ella aunque si quería convivir más con él, prefería no hacerlo para que su prima no se molestara. Y así fue un buen tiempo hasta que la tempestad pasara.

Marina y Mónica, entraron a la preparatoria, y Omar ya no estaría entre ellas, pues el asistiría a otra escuela. Pero el destino ya les tenía algo con lo que no contaban. Tiempo después, Omar se encontró con Marina en un centro comercial, y Marina pensó que como ya había pasado mucho tiempo, pues no habría problema con su prima. Aun así, no le contó nada a Mónica hasta pasado unos meses de que Marina y Omar eran novios. Fue el mismo o peor problema, aunque Mónica se hizo la desinteresada, no desistió del todo y empezó a hacer cosas para que su prima quedara mal ante Omar y viceversa. Pero como Marina y Omar sabían de lo que era capaz Mónica con tal de salirse con la suya, nada de lo que hiciera, funcionaba.

A pesar de que los novios, tomaron todo como un juego de niña mimada, esto era más serio de lo que parecía. Mónica cada vez hacia cosas peores y más peligrosas. Marina se vio en la necesidad de contarle todo a sus tíos. Y eso funciono, aunque sea por un tiempo.

Cumpliendo los 3 años de noviazgo, Marina y Omar se comprometieron. Todo era felicidad, los tíos y Mónica estaban preparando una gran fiesta de bodas. Marina aún estaba estudiando y no le quedaba mucho tiempo para hacerse cargo de la boda. Parecía que por fin Mónica había entendido que no todo lo que hacía estaba bien, y que la intervención de sus padres había servido para ello.

La felicidad se hizo presente, la boda seria en dos horas, y todos estaban vueltos locos terminando los últimos detalles. La felicidad no era para todos, Mónica no sentía lo mismo. Y en la ceremonia, ella pidió decir unas palabras para los novios. Todos pensaron que era buena idea.

Mónica se puso de pie frente a los novios, dándole la espalda a los invitados, en su mano derecha traía un ramo de flores blancas y en la izquierda, una hoja blanca muy arrugada, la cual comenzó a leer. - Querida prima, quiero que sepas que desde que llegaste a nuestra vida, yo jamás fui feliz. Mis padres, decidieron darte parte de lo que me correspondía, siempre destacaste en el colegio y los elogios eran para ti. Me esforzaba por no sentir coraje hacia ti y un tiempo lo conseguí, pero Omar no ayudo mucho, pues hasta con él te quedaste…

Su padre avergonzado. Quiso detener la lectura, pero Marina insistió en que la dejara terminar.

… no es que yo quisiera lo que tu tenías, es que tú no te lo merecías y siempre te quedaste con lo que era mío. Y creo no es justo que de las dos tu seas feliz. Pues la que llego huérfana a mi casa fuiste tu.

Todos se quedaron boquiabiertos. Y su padre decidido, la tomo de brazo y casi a empujones la saco del lugar. Entre grito y maromas, Mónica le gritaba a su prima cuanto la odiaba. Aun así, Marina y Omar, salieron detrás de ellos.

Marina intento darle un abrazo a Mónica, pero ella agresiva solo gritaba y pateaba, mientras sus padres se la llevaban de allí, no quedo más que terminar con el evento.

Mónica tuvo que ingresar a terapia.

Los celos surgen como una defensa cuando se siente una amenaza a perder lo que creemos nos pertenece, de una manera posesiva. La envidia, es parte del proceso.

Los celos mal llevados al extremo constituyen a una patología fuertemente destructiva. La persona que padece esta enfermedad vive con miedos, indecisiones, infelicidad y sospechas de engaño. Esto puede ser detenido si se detecta a tiempo, pues muchos casos vienen desde la infancia. Los casos no solo se dan con la pareja, pueden ser entre familiares o amigos.

Autor Lizeht Lira.

24 Nisan 2021 21:17 0 Rapor Yerleştirmek 0
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