tadeoibarra Tadeo Ibarra

Una antología de relatos en la que las aplicaciones de celular, las citas y uno que otro ser sobrenatural se entremezclan para crear mundos e historias en las que el desenlace no es siempre el que se espera.


Триллер 13+. © TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS (TADEO IBARRA, 2020)

#antología #relatos #gay #lgbt #suspenso #postapocalíptico
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José

José

Conteniendo la respiración José observaba desde la ventana el hueco que había debajo del puente. Desde donde se encontraba alcanzó a distinguir una mancha oscura en el suelo que parecía un pequeño charco de agua y por instinto estiró su mano a la cabeza para tocar el pañuelo con el que la tenía envuelta. Volteó hacia los dos lados de la calle. Silencio.

Aliviado, exhaló el aire que tenía contenido en el pecho y una voluta de vapor salió de su boca y se disolvió con el aire frío de esa mañana.

Con manos temblorosas se colocó los guantes para protegerse y con cuidado apoyó sus manos en lo que quedaba de la ventana con cuidado de no cortarse los dedos con los pedazos de cristal roto que aún permanecían en el marco. Contuvo la respiración nuevamente para levantar una pierna y apoyar la suela del zapato en el marco de la ventana.

Escuchó un crujido de ramas debajo de él.

Se agachó lo más rápida y silenciosamente que pudo aguantando la respiración. Se mantuvo así unos segundos. Notaba una fuerte palpitación en las sienes. Despacio se incorporó y se levantó lo suficiente para averiguar cuál había sido el origen del ruido. Vio algo de color café oliendo el pasto y mordisqueando de vez en cuando alguna rama que encontraba tirada. Un perro. Solo había sido un perro. Exhaló de nuevo y se sentó en el suelo. Con cuidado se quitó la mochila que llevaba en la espalda y palpó el interior. Sacó una fotografía instantánea, la cual tenía escrito debajo con plumón permanente:


Pride Festival
Junio del 2020


Con la vista nublada por las lágrimas acarició con los dedos los tres rostros que se encontraban a un lado del suyo y sonrió al ver el fondo lleno de banderas y playeras multicolores que los rodeaban.

Siguió hurgando dentro de su mochila y encontró su teléfono móvil. Lo encendió y desbloqueó el aparato. Todavía tenía señal. Con la vista recorrió toda la pantalla y seleccionó la aplicación que buscaba. Esperó unos segundos a que esta cargara y el celular se llenara de retratos de muchachos jóvenes y también de otros hombres que rondaban los cuarenta años de edad. Debajo de todos los retratos se podía leer la frase Fuera de línea a un lado de un círculo de color gris.

Para su sorpresa en la esquina superior izquierda vio encenderse un puntito verde debajo de una de los rostros. Su corazón dio un vuelco. Había alguien cerca. Al parecer era un chico un poco mayor que él, tenía cejas pobladas, ojos cafés y cuando cargó la fotografía en la aplicación probablemente acababa de rasurarse. A un lado del puntito verde se podía leer:


Mike90


Con dedos temblorosos dio un tap en la imagen y se abrió una ventana de conversación.


Tú: ¿Hola?


Pasó alrededor de un minuto y nada. La sensación de vacío se estaba generando rápidamente en su estómago. Pasó otro minuto y de repente sintió la vibración del celular en su mano.


Mike90: ¿Dónde estás? Apareces muy cerca. Ya casi llegas al refugio. ¿Necesitas ayuda?


José abrió el perfil de Mike90 para observarlo con detenimiento. Descubrió que debajo de su nombre de usuario se especificaba que se encontraban a solo quinientos metros de distancia el uno del otro. Con una mezcla de nerviosismo y emoción comenzó a escribir su respuesta en el pequeño teclado de la pantalla.


Tú: Solo traigo una mochila. Estoy en una de las tiendas de conveniencia que están a un lado de la carretera. Enfrente de mí hay un puente donde pensaba pasar la noche.

Mike90: Sé donde es. ¿Cuantos vienen contigo?

Tú: Vengo solo. Capturaron a mis compañeros de cuarto.

Mike90: Vale. Tienes suerte de habernos encontrado antes de que bloquearan este medio. Voy a salir por ti, las patrullas no suelen pasar a esta hora. Llevo puesta una camiseta gris y una chamarra verde tipo militar.

Tú: Vale.


Emocionado y expectante bloqueó la pantalla de su celular y volvió a asomarse por la ventana y esperó paciente.

A lo lejos cruzando la carretera, vio acercarse a una figura alta y que parecía traer botas pesadas. Su andar era algo torpe y alcanzó a distinguir que llevaba el celular en la mano y lo observaba de vez en cuando al caminar. Cuando el sujeto estuvo lo suficientemente cerca José levantó su mano y la agitó a modo de señal y de saludo. Su salvador también levantó y movió la mano en la que llevaba el celular. El movimiento fue demasiado rápido que el móvil cayó al suelo y José pudo ver que el muchacho tuvo que agacharse a recogerlo.

De pronto José pudo escuchar a lo lejos el rugido de un motor haciéndose más fuerte al pasar los segundos. Presa del pánico José hizo señas a Mike90 para hacerle saber que ya no se encontraban seguros.

La camioneta estaba ya muy cerca.

Con el corazón queriendo salírsele del pecho y con un nudo en la garganta José volvió a ocultarse velozmente debajo de la ventana pegando la espalda a la pared mientras la camioneta pasaba enfrente del establecimiento.

El suelo vibró por unos instantes y después escuchó dos disparos.

23 марта 2020 г. 15:15 3 Отчет Добавить Подписаться
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MIRAVEN Escritoraatiempoparcial MIRAVEN Escritoraatiempoparcial
Buena introducción, muy bien escrita y cuidada con mino, también me impresionó la narración, muy correcta a la igual que la ortografía y puntuación. Deja un atrayente final para el siguiente capítulo, espero engancharme. Un gusto y hasta pronto
Denis Angueira Denis Angueira
Muy buen relato, ya quiero leer el proximo capítulo para ver que pasa con José

  • Tadeo Ibarra Tadeo Ibarra
    Gracias por tu comentario. De hecho es una antología de diversos relatos con diferentes protagonistas. Todos los relatos tienen algo en común. Espero y te guste el próximo. March 23, 2020, 19:38
~

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