Caminaba por el bosque
entre arboles y flores.
Hasta que te vi en la cascada
cantando a todo pulmones.
El cardumen de peces
te escuchaba con atención.
Hasta las alegres algas
bailaban con tu voz.
Los pequeños unicornios
se acercaron con cautela.
pero de la vergüenza al mirarlos
decidieron escapar.
Los traviesos duendes
reían sin parar.
Hasta que las enojadas hadas
los mandaron a callar.
Bosque, bosquecito
alegre y bondadoso.
Gracias por dejarme entrar
y escuchar algo tan armonioso.
Magia y fantasía
de noche y de día.
Sirena, sirenita
de dulce cantar
continua así...
Para tener un feliz despertar.
Спасибо за чтение!
Мы можем поддерживать Inkspired бесплатно, показывая рекламу нашим посетителям.. Пожалуйста, поддержите нас, добавив в белый список или отключив AdBlocker.
После этого перезагрузите веб-сайт, чтобы продолжить использовать Inkspired в обычном режиме.