miquel-sirera Miquel $irerª

De pronto, en Wessex empiezan a haber asesinatos sin sentido por un tal Jinete. Los nobles empiezan a investigar y resulta que todos los asesinados son siervos suyos, esto no les beneficia en absoluto. Los asesinatos no paran y se crean conflicton entre los nobles porque creen que hay un infiltrado entre ellos...


Исторические романы Всех возростов.

#histórico #crimen #caballeros #medieval #lanzas #espadas #arcos #asesinos #armadura
0
179 ПРОСМОТРОВ
В процессе - Новая глава Каждую субботу
reading time
AA Поделиться

El asesino de hombres

Caía ya la tarde en el frondoso i milenario bosque de Wessex. En un claro del bosque, un prado de verde y fresca hierba rodeado de robles centenarios, dos individuos de humilde aspecto mantenían una animada conversación. El hombre de más edad era robusto y, aunque de poca estatura y escaso cabello, todo en su aspecto insinuaba un carácter valiente y fiero. Vestía una tosca vestimenta de piel curtida y calzaba unas rústicas sandalias de cuero. A su lado, se sentaba un individuo, unos doce años más joven, vestido con un atuendo similar, aunque de mejores materiales y diseño mucho más fantástico y colorido. Llevaba las piernas cubiertas por medias con rombos de colores, y la cabeza con un gorro del que colgaban que tintineaban al moverse. Tal atuendo los identificaba como unos bufones de los que acostumbran a servir en las casas nobles para amenizar las largas y aburridas veladas invernales, pero en realidad, los dos eran unos granjeros de campo que servían a Lord Larkaw, el hombre mayor se llamaba Naqus Qubelle y el joven Koopus Walzor.
-Te digo, Koopus, que los soldados de Sir Kram solo piensan en cómo robar a los granjeros- le decía Naqus a su acompañante -. El otro día dos caballeros de Kram quisieron quitarnos unos cuanto cerdos del establo. Estos bosques son todavía de Larkaw y lo seguirán siendo. Ni el príncipe Fruyo se ha atrevido a apropiarse de Wessex, aunque ganas no le falten.
Un viento frío se levantó de pronto y espesos nubarrones cubrieron el cielo de ocaso. Ante la amenaza de la tormenta, ambos sirvientes se apresuraron a volver, pues tenian que estar en la cena con Larkaw a la hora justa. Justamente en ese momento se oyeron cascos de caballo que se acercaban al prado. Ambos empezaron a correr, pero al poco tiempo fueron alcanzados por un Jinete de aspecto peculiar, era sin duda una persona de alto rango: iba vestido con lo que parecía una túnica negra que le llegaba hasta los pies, unos zapatos negros de cuero viejo y una espada peculiar, parecía toda hecha de oro puro, por último llevaba una capucha y una tela roja que le tapaba la cara.
Naqus estaba petrificado, savia que aquella persona fuese quien fuese no era ni de Wessex ni de ningun reino vecino, Koopus le pregunto sin ser consciente de con quien hablaba, -¿Se puede saber quien eres tú?-, el Jinete no respondió, Naqus le hizo un golpe en el hombro a su compañero para que se callase, pero Koopus continúo, -Mire señor, si no nos dice lo que necesita o lo que quiere no tendremos más remedio que irnos-, el Jinete continuaba sin responder, Naqus cogió la iniciativa i comenzó a caminar en dirección contraria al Jinete, Koopus le siguió la corriente, justo en ese momento, la voz grave y oscura del Jinete dijo -Quiero muerte-. Koopus y Naqus empezaron a correr, el Jinete saco su espada y comenzó a galopar con su caballo negro y oscuro. Naqus, que era más mayor se tropezó con una rama y cayó al suelo, Koopus intentó ayudarlo, pero era inútil, el Jinete estaba demasiado cerca, Naqus le dijo a su amigo -No te preocupes por mí, ¡Corre!-, Koopus obedezió y comenzó a correr dejando a su amigo atrás, cuando el Jinete paso por el lado de Naqus, de un golpe seco le corto la cabeza, Koopus traumatizado al ver a su amigo de toda la vida morir de esa forma se quedó petrificado, no podía moverse, lo último que vio fue ese tal Jinete galopando hacia él con la espada preparada para cortarle la cabeza.
El Jinete después de haber matado a los dos granjeros, recogió sus cabezas y las metió en un saco de paja, se subió a su caballo y se fue sin dejar rastro.

2 октября 2021 г. 18:18 0 Отчет Добавить Подписаться
1
Прочтите следующую главу Kromodos diente de león

Прокомментируйте

Отправить!
Нет комментариев. Будьте первым!
~

Вы наслаждаетесь чтением?

У вас все ещё остались 1 главы в этой истории.
Чтобы продолжить, пожалуйста, зарегистрируйтесь или войдите. Бесплатно!

Войти через Facebook Войти через Twitter

или используйте обычную регистрационную форму