Háblame y enseñame que de alguna manera estoy mal.
Corrígeme y muéstrame que las cosas no son como yo quiero.
Enseñame que tu voluntad sobre mi no es mal.
Consiente que mi alma corte a los demonios con tu peluquero.
Prestame tus ojos y enseñame lo que es bueno,
Prestame tus oídos y dejame escuchar tu voz.
Inquebrantable y capaz de entrar en mis sueños.
Dejame cortar el mal con tu hoz
De no reconocer que eres mi padre
¿Dónde estaría yo?
De no haberme llenado de tu poder
¿Sería ahora un esclavo?
Háblame, para servite
Castigame para horrarte
Siente mi devoción.
Háblame sin que tengas más opción.
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