Camino hacia lo desconocido Подписаться

“Cuando todo comenzó yo aún era joven. Lo recuerdo, recuerdo estar emocionado pero a la vez muy asustado, como si todas las barreras pronto desaparecieran. En ese momento el mundo entero supo que no estábamos solos y recordamos lo poco que sabíamos. Luego de ese día nada fue normal.”

“Nadie sabe de dónde vinieron. Algunos veían hacia las estrellas en busca de respuesta y otros miraron hacia dentro la tierra. Muchos acusaron a las ciencias, incluso algunos a cosas absurdas como la magia, de haberlas creado y liberado todo esto ante el mundo. Lo cierto es que no sabíamos si en verdad tratábamos con alienígenas, dioses o demonios. Igual, aquellos seres de luz sin forma no se quedaron mucho tiempo para averiguarlo.”

“Distintas historias empezaron a surgir en los lugares donde aparecieron. Por todo el mundo, diversas ciudades, pueblos y lugares salvajes, quedaron sumergidas por una luz que se extendía a kilómetros de distancias para luego desaparecer y dejar atrás la cosa más extraña. Los reportes eran claros al respecto. En todos esos lugares, flotando a unos centímetros de un cráter con diámetro de un kilómetro, había una simple puerta de madera, blanca, alta y con símbolos extraños a lo largo de su marco. No estaba conectada a nada y no había explicación por su existencia, pero ahí estaban.”

“De pronto, el mundo entero miraba aquellas puertas. Pero lo que cautivó fue lo que encontraron al abrirlas.”

“Los reportes hablaban de un lugar imposible. Una habitación, blanca y expansiva, existiendo sin explicación o conexión alguna con su exterior. Mencionaban algo negro, como una niebla, que cubría la mitad de toda la habitación, consumiéndola y llevando a todo aquel que entraba a ella a... Algún lugar.”

“Los primeros meses pasaron y poco se supo de lo que había dentro de aquella negrura. Nadie podía estar de acuerdo. Unos veían oscuridad sin fin, otros puestos de luz que guiaban a su profundidad. Hubo historias de caminos entre lo negro, rodeados por objetos masivo e imposibles de describir de lo lejos que estaban. Descripciones de sonidos extraños y lo que parecía criaturas alienígenas perdidas en la oscuridad. Pero hubo una constante en todos los reportes. Quien sea que entraba en las profundidades de aquella negrura, nunca retornaba.”

“La humanidad recibió una pregunta la cual no tenía forma ni manera de responder. Todo intento por estudiar o explorar lo que había detrás de aquellas puertas terminaba en fracasos y en pérdidas. Los gobiernos no tardaron en abandonarlo, al principio prohibiendo la entrada por temor de perder a más personas. El problema es que ya era muy tarde. Todos sabían, y el misterio de los visitantes era demasiado para muchos. El llamado del misterio y la aventura llevó a miles de personas a entrar, de intentar ser los primeros quienes descubrieran el secreto, los misterios y los tesoros que había detrás de aquellas puertas, para nunca volver a salir.”

“El mundo se vio dividido entre los que querían quedarse en esta tierra y los que veían las puertas para su futuro. Las razones para entrar eran diversas y siempre fue particularmente popular entre los más jóvenes con todo que probar y los más viejos sin nada que perder. Como los antiguos exploradores, aquellos que entraban esperando riquezas y gloria. Otros solo buscaban un nuevo comienzo en un lugar lejos de lo que ya conocían y llenos de esperanzas de un futuro mejor. Muchos lo hacían simplemente porque no sabían qué más hacer.”

“Con el tiempo, las antiguas prohibiciones fueron removidas, permitiendo el libre acceso a todo aquel que quisiera entrar por aquellas extrañas puertas. Total, tal vez regrese y, si no, no se pierde nada.”

“En la víspera del veinteavo aniversario de la llegada de los visitantes, todo el mundo vuelve a ver aquellas puertas. Los gobiernos nuevamente se preparan para la migración de gente que de seguro emprenderá la expedición ¿En mi opinión? Luego de diez años reportando al respecto, todo ya me parecía una verdadera tontería. Entrar sin ninguna clase de seguridad de que volverás, solo con vagas esperanzas, las mochilas en sus espaldas y la fe de que todo saldrá bien, es una locura. Igual, eso era suficiente para muchos.”

Las palabras se detuvieron por completo, tanto en mi mente como en el ordenador. Quería seguir, escribir sobre las absurdidades que he visto a lo largo de la última década. Pero la verdad era que ya no podía, no después de lo que iba a hacer.

Volví a leer lo que tenía, revisando una y otra vez, con la esperanza de que sacara alguna respuesta clara al respecto. Y luego pensé.

- Supongo, que ya no tiene importancia…

Suspiré profundo y nuevamente volví a la escritura.

“A pesar de todos los intentos, nadie sabe exactamente lo que hay detrás de esas puertas o la naturaleza de nuestros extraños visitantes. Pero una cosa es segura. La humanidad se enfrenta a un gran acertijo. Y como toda gran pregunta en la historia, no pararemos hasta que tenga una clase de respuesta.”

Volví a leerlo, una y otra vez. Seguía odiándolo, pero me dije que quizás era mejor tener un poco de optimismo. Quiero decir, para ser mi último artículo. No es todos los días que uno abandona su vida.