u15675968831567596883 Ricardo Ramírez

Narra la historia de Corvo, un caballero de Winterfall, que fue condenado por un crimen que él no realizó, deberá buscar recuperar su honor...


Ficção científica Impróprio para crianças menores de 13 anos.

#orgullo111
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Deshonra.

Corvo es un caballero del Reino de Winterfall, él está encargado de cuidar y proteger a la princesa Ashley, que es hija de la reina Elene, Corvo es muy respetado por los altos mandos del Reino.

Un día normal, estaba el caballero con Ashley jugando a las escondidas en uno de los jardines, se estaban divirtiendo mucho, más tarde tenía una cita con la reina para hablar sobre el futuro del Reino, ya que anteriormente Elene había sido visitada por unos hombres los cuales tenían poderes, eran como magia negra, muy extraño, pero cierto, ella fue amenazada de muerte y tenía miedo.

Llegó el momento de ir con la reina, Corvo se dirigió a la terraza, pero antes dejó a Ashley en su habitación, por el camino se encontró a otro guardia, era Bonzo, estaba siendo pintado por un artista, estaba quedando muy bien, después de saludarse se fue, ya que iba un poco tarde, al llegar la reina se levantó y le dio la mano, comenzó a contarle sobre una carta que recibió por la mañana, la cual seguía con la amenaza de asesinarla y llevarse a la princesa, Corvo le dijo que no descansará hasta encontrar a los criminales.

A partir de allí dejaron el tema y comenzaron a hablar de otros temas, como la fuerte propagación de la peste, estaba matando a muchas personas, debían encontrar una cura lo más rápido posible.

Minutos después la pequeña Ashley subió con ellos, habló un rato con su madre y se sentó junto a ellos a beber un té.

A la lejanía Corvo podía ver un grupo de hombres que al parecer se teletranportaban, dejaban un rastro de sombre a su paso, él advirtió a la reina e hizo llamar a los guardias pero ellos no respondían a la llamada, los magos llegaron muy rápido hasta donde estaban reunidos la reina y su hija junto a Corvo, a él lo paralizaron, no podía moverse, ni gritar, no podía hacer nada, uno de los hombres tomó a Ashley y la durmió, a Elene la apuñalaron, Corvo vio todo, se sentía tan culpable, los hombres usaron magia y se desaparecieron de allí sin dejar rastro, Corvo se podía mover al fin, corrió hasta donde estaba la reina y ella con su ultimo suspiro le dijo -Rescata a Ashley, protégela, porfavor- y calló muerta.

Segundos después llegaron los guardias, vieron la sangre y sin dejar que se defendiera sometieron a Corvo y lo culparon de asesinar a la reina y desaparecer a la princesa.

Cuando Corvo despertó estaba en una celda, llegó un guardia y le entregó una bandeja de comida que le había mandado un señor, su amigo Padua, debajo del pan había una carta junto a una llave, la carta decía:

“Corvo, se que tu no eres el culpable, tienes que salir de allí y recuperar tu honor, aquí te dejó una llave, es la llave de tu celda, asegúrate de que nadie la vea y que no se den cuenta cuando la uses, cuando llegues al bar te daré otras cosas”.

Firma: Padua

No lo podía creer, ahora sólo faltaba esperar el momento indicado para salir.

Casualmente sólo tuvo que esperar un par de horas, y los guardias se habrían marchado, conocía un poco los horarios, pero en el calabozo eran distintos y no sabía de donde obtener la hora. Usó la llave y salió, se dirigió al patio y desde allí fue a la sala donde se guardaban las armas de los guardias, tomó un cuchillo y una pistola, a partir de allí se dirigió hacia las cloacas, sin embargo, se encontró a unos guardias y sin problema los eliminó.

Al llegar a las puertas que dirigían a las cloacas se encontró una manada de ratas las cuales lo persiguieron e hicieron llamar la atención de otros guardias. Habían descubierto que Corvo estaba escapando.

Corvo corrió hasta un lugar medianamente seguro, donde no lo encontraran los guardias. Esperó unos minutos y se largó lo más rápido que pudo.

Él intentó buscar un método para llegar lo más rápido al bar de su gran y estimado amigo Padua, al salir de las cloacas buscó a alguien que quizá podría ayudarlo, pero solo pudo alcanzar a ver a un par de hombres que parecían pezcadores, pero a lo mejor eran recoge basura, no se sorprendió al verlos,ya que estaban en una zona del imperio en el que no había sistema sanitario, vaya, que estaban en los barrios bajos de Winterfall. Sin embargo, fue con aquellos hombres que ademas de verse mal, lo trataron mal, Corvo les preguntó dónde estaba la calle Dalia, que era la avenida donde estaba ubicado el sitio que quedó a verse con Padua, era el bar, les dijo que si lo podían llevar y ellos con una mala cara le dijeron que no, porque tenían mucho trabajo.

--Está bien--Dijo Corvo --Me voy--

--Sí, ya lárgate de aquí-- Le dijo uno de los hombres.

Corvo se fue a paso acelerado para que no le hicieran nada.

16 de Janeiro de 2020 às 15:11 0 Denunciar Insira Seguir história
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