La Noche de las Bestias
El predicador les había advertido del mal. "Temed la noche, hijos míos. Temed a la luna, causante de todo mal, pues convierte a las mujeres en brujas y a los hombres en bestias. Cuando el sol, omnipotente creación protectora de la humanidad, descienda de los cielos y se esconda de nuestras vistas, huid a vuestras casas y esperad a su regreso. El mal no debe merodear estas calles". Pero muchos de aquellos ciudadanos lo tomaron por necio al privarles de su libertad. Fueron los primeros en caer...
Muertos de Amor
Estaba infectada. La ignorancia iba a ser letal, no solo para aquella bella mujer sino también para los demás. Pobres solteros condenados que atraídos por su belleza acabarían cayendo en los hoyos de sus futuras tumbas. Hubo pocos inteligentes que se marcharon nada más ser rechazados, salvados por los pelos de las garras de la muerte misma, pero aquellos que se quedaron… Pobre de ellos. Un solo beso terminaría poniendo fin a sus vidas. La alegría duró poco. El sufrimiento duró una eternidad.
Medidas extremas
Ocultarse con maquillaje y Photoshop no era suficiente, no si quería llegar hasta él. Su verdadero rostro era feo de nacimiento y así seguiría siendo. Con esta negatividad se centró en su víctima, una joven bella que atada a una camilla lloraba por su vida. Una navaja clavada en su corazón alivió su sufrimiento. Después faltaba cortar alrededor del rostro para arrebatárselo y graparlo al suyo para finalizar el proceso. Tras mirarse en el espejo, ella sonrió. Ahora era guapa. Ahora era bella.
Lo importante está en el interior
Él la amaba por su personalidad.
Ella deseaba con ansias su corazón.
Al darse el primer beso lo afirmaron,
Que "Lo importante estaba en el interior".
Pobre hombre, nunca se lo imaginó.
Al llegar la noche, mientras él dormía,
La mujer aprovechó y lo destripó.
Le sacó el corazón que tanto ansiaba,
Y sin perder más tiempo lo devoró.
Satisfecha esa noche, la mujer sonrió,
Y a su siguiente víctima ella buscó.
Esa asesina lo dejaba siempre claro:
"Lo importante estaba en el interior"
Ser madre
Ella siempre había soñado con ser madre. No importaba quien fuera el padre, solo quería el bebé. Después llegó la tragedia, la mala noticia de que era estéril. El sueño de su vida roto en mil pedazos por la naturaleza de su ser, pero eso no le quitó la esperanza. Decidió acudir a una vecina, que había sido madre hacía unos días, y pasados unos instantes ella también lo fue. Con su nuevo bebé llorando en la cuna, ella sonrió. Su anterior familia no lo echaría de menos... porque los muertos no sienten preocupaciones.
Dr Desdicha
