Mi querido sol, si algún día dejarás de brillar espero tener la fuerza suficiente para resplandecer tal y como lo haces tú. Somos tóxicos pero aún así te necesito, te anhelo y busco en otros brazos la extraña sensación de tu piel cuando me calientas.

Bajo la tenue luz de la luna, tembloroso, quedó paralizado ante los labios de aquella voluptuosa mujer.

Llegan al lugar donde, hace siete años, vieron a Sam morir quemado. Ahora es una enorme casa de cinco dormitorios, de la que la última familia se fue rápidamente. Mientras Will se estaciona, los neumáticos empujan la grava mientras da marcha atrás junto a un valón negro sin nadie dentro, pero debe ser el motor del jardinero. Todo el mundo se sale del vehículo mientras Donald intenta conseguir una falda de Teresa con la videocámara, pero solo tiene las mejill. Donald dice: "Checo, lo eres". ...

Déjame abrir las puertas de tu cuerpo Déjame entrar en la estancia de tu centro Déjame llenarte de vida por dentro Déjame ser el ancla en tu puerto Déjame darte todo lo que tengo dentro Y darte el placer de florecer en el desierto.

La sentó sobre su regazo, mientras le susurraba al oído cuanto la deseaba. Del otro lado, entre el enrrejado, una anciana le confesaba sus pecados.

—Qué es eso… —La voz rota. Las pupilas temblando. El sudor, frío. La niebla tomó aspecto medio de animal, medio humano. Cabeza y extremidades de lobo. El torso, fibroso y peludo como el de un gladiador. Por sus enormes colmillos, la saliva caía en pequeños hilos mientras en las fauces se formaba una sonrisa desquiciada. Tenía los ojos encendidos, amarillos, contaminados. Como la propia Casa.

Se deslizó por el sendero árido hasta el néctar de sus labios. 📲 IG: @susanariveroreyes93 ☕ Ko-fi.com/susanarivero93

Lloraba en compañía de los rasgueos de la vieja guitarra de su abuelo. Lloraba, lloraba, y seguía llorando sobre su pecho desnudo, mientras le hablaba con seducción. Cayó el sol para cuando cenó en invierno con la sobremesa enrollada en su entrepierna.

Vio la silueta de su cuerpo desnudo envuelto en penumbras. Jadeó al ver como se acercaba, no pudo evitar sentir su su tersa piel, al tiempo que le musitaba sus deseos de pasar una vida juntos.

Al desnudarse sintió su corazón.