©LyzOrtega
Levantame hacia el cielo, con esa fuerza sabes como hacerlo.—Y•D🏵
En una Universidad es demasiado fácil encajar con las personas correctas. Claro, si eres alfa puedes llenarte de más alfas alrededor que buscan un grupo. Al ser Omega tendrás la atención pero también los problemas suficientes si eres lindo, esa era la dificultad al querer estudiar y tratar de pasar desapercibido sin problemas.
—¿Como dijiste que te llamabas?
—Chan Hyuk. —Repite su nombre delante de los alfas que lo miran con reto. —Me transferi, estoy en segundo grado.
—Bien, Chan. Somos alfas, y espero que si vas a quedarte en nuestro grupo sigas las reglas. —Sonrie convencido.
La bienvenida es buena, las clases serán diferentes y aburridas en lo personal. Probablemente le gustaría buscar una distracción para hacerlas mejores, no lo sabe. Mientras tanto, sentado en el fondo del salón sus oidos lo llevan a esa risa a su derecha. Es tan suave y delicada, especial. Mira con fascinación al dueño de tal melodía, y sonríe al haber encontrado al indicado. Pues parece ser un angel, tal vez su futura pareja.
Esos cabellos castaños que resaltan sus bellas mejillas, la sudadera de color melón que usa y deja al menos un poco de piel ser observada. Casi siente que lo saborea, tal vez su aroma es dulce. Pero en definitiva es un Omega. Uno con labios rechonchos que amaría morder y dejar hinchados.
—Chan Hyuk. —Su nombre lo regresa a la vida real, Chan se levanta y se tensa. Todos parecen mirarlo, incluso el chico de risa bonita. Eso lo anima a sonreírle y obtener una leve del contrario. —Filosofia es una rama importante para poder ser un buen escritor. Para comprender lo que alguien trata de decirte.
—Sí si., también para conquistar a alguien sexy. — provoca risas a los demás.
De reojo no puede dejar de ver al Omega castaño, quien parece esta vez borrar su sonrisa y voltear hacia otro lado como si lo que apunta en el cuaderno fuera más importante que él.
—Te crees muy gracioso, ya veremos cómo eres cuando tengas que quedarte dos horas al terminar las clases.—El timbre del almuerzo lo salva, pero su castigo sigue pendiente.—Más vale que regreses al terminar tus clases o sino, te pondré a barrer el campus.
Chan asiente, quedarse no es la gran cosa. El profesor se retira y todos toman sus cosas para salir, pero él se apresura. Corre lo más rápido que puede para ir detrás de ese Omega, que en el camino deja un aroma delicioso. Sin poder evitarlo pierde de vista al lindo Omega y suspira frustrado.
—Hey Chan, ¿Que fue eso?
—Los Omega aquí son muchos, ¿verdad? —Los alfas asienten jalandolo.—Creo que uno de ellos será mi Omega pronto.
—Tranquilo lobo, aquí hay demasiados donde elegir.
Avanzan hacia el comedor, toma cada uno su propia charola y conversan sobre lo que harán en la hora de deporte, los equipos que están abriendo vacantes para tener una oportunidad plena a los de nuevo ingreso. Sin embargo, Chan se encarga de buscar entre las personas al Omega, tal vez pueda ligar con él.
—Oh no, Wang esta en nuestra mesa con sus amigos. —Se queja uno.
—Podemos correrlos.
Los sigue, y ve el momento exacto en el que uno de los alfas que son sus nuevos amigos golpea la mesa donde está un grupo de chicos y chicas de la jerarquía baja.
—Pero mira nada más, si los lamepollas están aquí.
—Muy gracioso Jae, pero llegamos primero. Así que vete con tu tribu a otro lado. —La chica castaña se defiende comiendo de su almuerzo.
—No provoques alfas, sabes bien lo que sucede. —Amenaza Joon Due, lo suficiente para que todos se levanten y con enojo se vayan de la mesa. — Listo, sientense.
Chan sonríe, sus amigos son geniales. Alzo los hombros sentándose y mirando como a las tres chicas y tres chicos omegas que corrieron miran con repulsión donde estan.
—Oye Chan. Es tu primer día, ¿ya tienes a alguien en la mira?, podría ser tu primera novia o novio.
—Uhm. Solo me llamó la atención alguien. Pero, lo conquistare a mi manera. —Los demás lo miran como campeón.
—¡De eso se trata!, un beta u Omega. No se resiste.
Ignora un poco el alboroto, sus ojos miran a su izquierda. Agudiza su oído y escucha de nuevo esa risa suave.
Busca con detenimiento, finalmente la mirada cae en el mismo castaño de sudadera color melón de su salón. Con un pantalón negro de mezclilla y unas zapatillas blancas.
Olfatea leve, no puede acercarse para detectar su aroma. Ese es un problema.
—Chan, te vamos a enseñar cómo molestar a algunos tontos. —Lo jalan del brazo.
Memoriza algunas notas, sigue a sus nuevos amigos y se detiene justo en frente del lugar. Para su mala suerte, es en la mesa del Omega que le llama la atención donde llegan.
Ahora lo puede ver mejor, es más bajito. Con aretes en sus orejas, labial brillante en los labios. Su piel se ve suave y sobre todo tiene ojos color azul cielo.
—Los bombones cayeron del cielo, porque les aplastó su cara y quedaron feos.
—Ustedes de nuevo. ¿No se cansan? —Se queja un beta, es guapo. Lo admite. —Rindanse, tenemos autoestima alta.
—Ay, lamento ofenderlo. Pero, si tanto te molesta solo dejate abrir de piernas una vez y te dejamos en paz.
—Jae, Joon, Xiun, y Lee. ¿Se cayeron de pequeños o su madre olvidó tomar ácido fólico? —No espera que el Omega bonito conteste por los demás.
—Estúpido Omega. —Amenaza uno. —No te digo nada solo porque tu si eres bonito.—Chan aprieta los labios, no entiende porque a él no lo molestan. Aunque se alegra de ello.
—Uy, el alfita le tiene miedo a Jimin. Que alguien lo ayude. —Se burla el beta. —Dime Xiun Min, ¿tu orgullo es de adorno?, porque te lo acaban de pisar.
—Uhhh...
—Jin, ese hasta el mismo lo pisotea. —Responde por último el Omega bonito y Chan esta vez sonríe con picaria.
Aparta a los demás, se acerca lo suficiente y pasa su mano levantando del mentón al lindo castaño, sus ojos brillan como si de agua cristalina en pleno atardecer se tratase. Es una joya, preciosa y única al sostenerlo. Y ama tener toda la atención de aque hermoso ser.
—Uhm, eres bonito. Ya te imagino abierto de piernas pidiendo por más mientras me entierro tan profundo en tu culo.—Los ojos azules brillan, Chan siente a su lobo gruñir de orgullo pero lo que no espera es la cachetada que recibe.
—No sé quién demonios eres, pero los omegas merecemos respeto. Algo que tú y tus estúpidos amigos deben entender.
—Tampoco te exaltes, es un cumplido. Si quieres salir conmigo y pasarla bien, claro está. —Agrega.
—No gracias, no necesito ese tipo de servicios, prostituto. —Lo aparta, caminando lejos con su bandeja de comida.
Chan frunce él ceño, sé supone que debería ser mas sumiso, los omegas son así por naturaleza de donde viene. Y es extraño que aquel responda de forma agresiva sin dudarlo. Eso lo anima, le gustan los desafíos y ese chico llamado Jimin, es sexy. Le gusta.
—Chan, acabas de hacer una estupidez.
—No lo hice, sé hace el difícil.
—Chan, él tiene alfa.
—Sin marca no hay nada.
Y en realidad no sabe porque todos parecen mirarlo con preocupación, si solo intenta conquistar al Omega llamado Jimin.
Hey bebé, tú eres especial, por eso no dejes que te traten de ese modo.
🏵LyzOrtega🏵
Merci pour la lecture!
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