La noche era oscura y fría, y la luna llena iluminaba el camino hacia la mansión abandonada en el bosque. Un grupo de jóvenes se adentró en la mansión, con la curiosidad y el miedo a partes iguales. La casa estaba en ruinas, con las ventanas rotas y las puertas desvencijadas. Pero había algo en ella que los atraía, algo que les decía que debían explorar cada rincón.
Eliza, una de las jóvenes, se separó del grupo y entró en una habitación oculta. Al entrar, se encontró con una escena aterradora: las paredes estaban cubiertas de sangre y las ventanas y puertas estaban cerradas con tablas de madera desgastada. Eliza sintió un escalofrío recorrer su cuerpo, y un miedo profundo se apoderó de ella.
De repente, la puerta se cerró de golpe, dejando a Eliza atrapada en la habitación. Ella empezó a gritar pidiendo ayuda, pero afuera de la habitación nadie podía oírla. Sus intentos por salir fueron inútiles.
La desesperación se apoderó de Eliza, y sus pensamientos se volvieron confusos. "¿Cómo pude ser tan estúpida? ¿Por qué entré en esta habitación?" se preguntó a sí misma. "¿Cómo voy a salir de aquí?"
Ya en esa habitación solo se escuchaban sus gritos, pero afuera de la habitación nadie podía oírla. Sus intentos para salir de ahí fueron inútiles. De tanto golpear la puerta, sus nudillos empezaron a sangrar. Finalmente, se dirigió a una de las ventanas, y con las pocas fuerzas que le quedaban quitó la tabla de madera desgastada de la ventana y la abrió. Miró abajo, y en efecto era una larga caída, a su alrededor todo era bosque, nadie podría venir a rescatarla, ella tenía que saltar...
Sus lágrimas caían y sus nudillos sangraban, ya tenía la decisión hecha hasta que, la puerta se abrió de golpe, dejando ver a un muchacho que ella conocía a la perfección.
—Eliza— dijo el joven acercándose a ella —¿Estás bien?
—No, no estoy bien— respondió ella, temblando de miedo.
Eliza saltó...
Después de haberse ido a esa mansión.
Después de haberse encerrado en esa habitación.
Después de gritar como loca las razones por las que quería desvanecer.
Después de saltar.
Ella Murió
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