the unwanted husband (kookv) Suivre l’histoire

Taehyung se dejó caer sobre el colchón, su cuerpo resbaladizo por la transpiración y fláccido de placer.

Los espasmos de su poderosa lberación todavía atormentaban violentamente su esbelto cuerpo. Su esposo, Jungkook , se habíadesenredado, separado istanciado de el a los pocos segundos de su mutuo orgasmo y yacía boca arriba junto a Taehyung, con la respiración pesada y entrecortada.

Taehyung se giró de lado para trazar amorosamente su perfil con los ojos,anhelando tocar y acariciar la piel suave y ligeramente pálida, pero sabía que su toque sería rechazado.

Sus palabras, las que siempre decía después de su clímax, aún flotaban en el aire entre ellos y aún, después de todos estos meses, dolían más de lo debido.

Con esas cuatro palabras, mató el resplandor, destruyó la intimidad del momento y relegó el acto a nada más que un imperativo biológico.

Después de un año y medio de lo mismo, Taehyung finalmente había aceptado que nunca cambiaría.

No fue una realización abrupta.

No, era uno que había estado creciendo constantemente desde la primera vez que los dijo.

—“Dame un hijo, Taehyung…”

Pero Taehyung tenía sus propias cuatro palabras.

Eran palabras que habían estado en la punta de su lengua durante meses y deberían haber sido pronunciadas mucho antes. Eran palabras que ya no podía tragar; por mucho que le doliera decirlas.

Se incorporó, desnudo, con el cuerpo todavía temblando, y acercó las rodillas al pecho. Se rodeó las piernas con los brazos,apretó la mejilla contra las rodillas y observó cómo la respiración de Jungkook se estabilizaba y sus propios temblores disminuían. Yacía con los brazos abiertos,magníficamente desnudo, con los ojos cerrados, pero Taehyung sabía que no estaba dormido.

Como de costumbre, se tomaba unos momentos para recuperar la compostura antes de dirigirse a la ducha, donde Taehyung siempre lo imaginaba restregándose frenéticamente su olor y caricias en su piel.

Ya no pudo contener las palabras, y brotaron de sus labios con una sinceridad desesperada.

—"Quiero el divorcio, Jungkook”

Se tensó. Cada músculo de su cuerpo se puso tan tenso como un resorte enroscadoantes de girar la cabeza para encontrarse con su mirada. Sus ojos estaban entrecerrados y su labio superior se curvaba burlonamente

—"Pero pensé que me amabas , Taehyung", Jungkook se burló con exquisita crueldad, y Taehyungcerró los ojos, tratando de enmascarar el dolor que causaban sus palabras. Cuando estuvo seguro de que tenía sus emociones bajo control, abrió los ojos.

—"Ya no." Esperaba que la mentira sonara convincente.

—"Hmmm..." ronroneó. "¿Qué pasó con 'Te amaré por siempre, Jungkook'?"

—"Las cosas cambian", susurró.

—"¿Qué cosas?" Rodó sobre su costado y se apoyó en su codo, descansando sucabeza en su mano. Se parecía tanto a un gladiador romano en reposo que su garganta se secó de deseo. Taehyung tragó dolorosamente

—"Los S-sentimientos cambian..." tartamudeó. Volvió a emitir ese ronroneo ronco deacuerdo, pero Taehyung no se dejó engañar por su postura relajada; estaba tan tenso como una serpiente enroscada. "Yo... he cambiado..."

—"No te ves diferente", dijo, su voz todavía terriblemente tierna."Sigo siendo el mismo Taehyung con el que me casé,El que decía amarme tanto que no podía vivir sin mí, Aquel cuyo papá se aseguró de que obtuviera exactamente lo que quería..."

Y fue entonces cuando golpeó, sin moverse, sin siquiera cambiar su voz.

—"El mismo pequeño Taehyung que ni siquiera puede darme lo único que siempre he querido de esta patética excusa para un matrimonio". Taehyung se estremeció pero se negó a desviar la mirada

—"Razón de más para un divorcio". Lo intentó con indiferencia pero fracasó miserablemente.

—"Tal vez para ti." Se encogió de hombros. "Pero te lo dije desde el principio, caro, no habrá una salida fácil de este matrimonio. No hasta que obtenga lo que quiero de ti, y ese día parece estar muy lejos. Desafortunadamente"

—"Ya no puedo vivir así". Taehyung enterró su cara en sus rodillas y luchó para mantener las lágrimas a raya

—"Ninguno de nosotros tiene muchas opciones..." Se sentó y se estiró lánguidamente antes de levantarse para caminar hacia el baño en suite. Taehyung escuchó el comienzode la ducha momentos después y se tomó unos segundos para recuperar la compostura antes de secarse las lágrimas calientes de la cara con el dorso de las manos. Se puso una bata de gasa y se dirigió a la cocina para preparar un vaso de leche caliente con miel.

Era un brebaje que su madre solía prepararle cuando era un niño, y esperaba que lareconfortante bebida calmara sus nervios.

acababa de sentarse en un taburete de la barra y tomar su primer sorbo cuando sintió la presencia de Jungkook detrás de el. Los pelos de la nuca se le erizaron y sus manos comenzaron a temblar nuevamente

—"Debes tener frío solo con esa pequeña cosa diminuta que llevas puesta", observó ociosamente, dirigiéndose a la nevera por un cartón de jugo de naranja. Su corto cabello negro estaba húmedo y erizado en mechones donde se lo había secado descuidadamente con una toalla después de la ducha. Llevaba nada más que un par de calzoncillos negros.

Estaba tan hermoso como siempre, y Taehyung lo odiaba más que nunca por esa perfección masculina

—"Estoy bien." Taehyung se levantó abruptamente y se dirigió hacia el fregadero para enjuagar su taza, pero Jungkook lo agarró del codo para detener su movimiento. El se tensó, sorprendido por el toque... Jungkook nunca lo tocó fuera del dormitorio. En los dieciocho meses que habían estado casados, esta era la primera vez que podía recordar que él lo tocaba sin que fuera un precursor del sexo. Jungkook se inclinó más cerca de el y bajó sus labios a su oído.

—"Ya no se hablará más de divorcio, Taehyung... nunca "le dijo con un repugnante aire de irrevocabilid.

—"No puedes evitar que me divorcie de ti, Jungkook", respondió con valentía

—"¿De verdad quieres el divorcio, caro?" preguntó

Taehyung asintió

—"Si te divorcias, tu primo pierde su negocio y no puede pagar eso ahora, no con unnuevo bebé en camino. Ely su esposo necesitan todo el capital que puedan obtener". De alguna manera Taehyung no había esperado eso. Debería haberlo hecho, pero no lo había hecho . Jungkook le había prestado a su primo Seok Jin el capital inicial de su librería. Taehyung no sabía cuáles eran los detalles de ese préstamo, pero siempre había asumido que se había hecho por generosidad. Mirándolo ahora, no podía creer su propia ingenuidad. Jungkook no hizo nada por pura generosidad, y ese préstamo fue simplemente otra arma para usar contra el.

—"No lo harías", respondió Taehyung. "Jin no ha hecho nada para merecer esto".

—"Caro, haré lo que sea necesario para obtener lo que quiero de ti"

—"Yo también tengo dinero, puedo ayudarlo..." comenzó desesperado.

—"No, tienes un padre rico, y él tuvo la oportunidad de ayudar a Seok Jin, pero hizo que su desprecio por la idea fuera más que obvio para todos en ese momento, y sabes que él nunca te apoyaría durante un divorcio complicado, Taehyung. ."

—"¡Todavía no creo que lo harías! Tienes una reputación que mantener. Eres un hombre de negocios honesto y no destruirías una pequeña empresa solo para probar un punto. ¿Qué tipo de mensaje enviaría eso?" Taehyung preguntó.

—"Que no se debe jugar conmigo". Se encogió de hombros. "¿De verdad crees que me importalo que la gente piense de mí, Taehyung? ¿Crees que me importa lo que pienses de mí? Nuncalo he hecho y nunca lo haré. Eres débil y mimado."

—"No soy ..." Taehyung trató de defenderse, pero él hizo un sonido de burla en la parteposterior de su garganta antes de continuar como si no hubiera hablado.

—"Obtendrás tu divorcio eventualmente, pero hay algo que necesito saber de ti primero.Querías este matrimonio, ¿recuerdas? Lo suplicaste, estoy seguro. Entonces, si quieredivorciarse ahora mismo, vendrá con fuertes sanciones. ¿Estás dispuesto a jugar con el futuro de tu primo?"

Taehyung no lo haría y Jungkook lo sabía,lo tenía exactamente donde lo quería. No habría divorcio. No cuando tanto pendía de un hilo. Pero habría cambios...

Taehyung no dijo nada, eligiendo darse lavuelta y marcharse en su lugar, Jungkook lo vio irse, y Taehyung pudo sentir sus ojos ardiendo en su esbelta espalda, pero él no lo llamó para que regresara.

No volvió al dormitorio que compartían desde el primer día de su matrimonio, optando en cambiopor dirigirse a la biblioteca, sabiendo que no podría pegar ojo ni un guiño más.

No en esa habitación, ya no...