—Muy bien clase, ahora, habrá un examen sorpresa —Dijo el profesor de la clase.
—¿Que? ¿Encerio? No puede ser, ¿Tan pronto? —Dicen los estudiantes, quejándose.
—Ja, sabía que esto pasaría, que bien que estudié —Pensó Sairo.
—Tranquilos, calmense, será de a dos, ya decidí los grupos —Dijo el profesor, para tranquilizar a la clase.
—Que bien, así tendré más oportunidades de aprobar, así sera fácil —Murmullo la clase.
—¿Que clase de examen de hace de a dos? Bueno, no importa con quién me toque, tengo un 10 asegurado —Pensó Shairo.
—Jaja, no se confíen, porque el examen contiene 30 preguntás y solo tienen 20 minutos para responderlas. Así que, cada uno tendra que responder la mitad, o de otro modo, no les alcanzará el tiempo para completar el examen, jaja —Dijo el profesor, riéndose macabramente.
—No puede ser, creo que desaprobare, es mi final —murmullo la clase.
—Significa que... si el compañero que me tocó presenta mal su parte... ¡Desaprobare! —Pensó Sairo, algo asustado.
—Muy bien, el primer grupo será de Sairo Natgu y Layna Saomi —Dijo el profesor de la clase, mientras leía el el portablock que sostenía.
—Mmm... Saomi, mmm... Nose como va en la clase. Solo espero que halla estudiado —Pensó Sairo, mientras acomodaba su asiento en el escritorio de Layna y mientras el profesor mencionaba los demás grupos a la par que revisaba una notificación de su celular.
"Minutos después"
—Ya mencionados los grupos, comenzaré a repartir los exámenes —Dijo el profesor, y empezó a repartir los exámenes que recogió de un escritorio.
—Yo respondere las primeras 15 preguntas y tú las demás ¿De acuerdo? —Dijo y pregunto Sairo
—Si —Respondió Layna, asintiendo rápidamente.
—Muy bien, !Empiecen! —dijo el profesor, luego de repartir los exámenes.
—Respondere rápido mis preguntas para ver si están bien las repuestas de Layna —Pensó Sairo, mientras respondía las preguntas del examen en su hoja.
"15 Minutos después"
—Listo, termine, solo espero que Saomi halla termi —Pensaba Sairo, pero se detuvo al girar la cabeza y ver qué Layna lo estaba observando fijamente con una sonrisa.
—Este... ¿Podría ver tu hoja porfavor —Dijo y pregunto Sairo, algo nervioso.
—Si, claro —Respondió Layna, y le dio su hoja a Sairo.
—Muy bien, ahora veamos si está todo bien —Pensó Sairo, y empezó a leer las respuestas de Layna.
—Mmm... las respuestas están bien, pero, faltan ampliar las respuestas de tres preguntás. Así,calculo que sacaremos un noventa —Pensó Sairo, luego de leer las respuestas de Layna, y miro el reloj de la pared.
—Faltan 2 Minutos. ¡Puedo ampliarlas! —Pensó Sairo, y bajo presión empezó rápidamente a ampliar tres respuestas de Layna.
"2 minutos después"
—¡Termine! —Penso Sairo, luego ampliar las repuestas de Layna. Y sonó el timbre para salir al receso.
—Huf, justo a tiempo —Pensó Sairo, levanto la vista, y se percató que Layna lo estaba observando fijamente como hace poco.
—Muy bien, ahora dejen sus hojas arriba de sus pupitres y salgan al receso —Dijo el profesor, luego, Sairo acomodo las hojas en medio del pupitre, un poco incómodo y nervioso porque seguía siendo observado por Layna, y salió al receso.
-—Que sea lo que Dios quiera —Escucho decir Sairo, de alguno de sus compañeros de clase cuando salío del aula.
—Ja, este examen estuvo complicado, pero... solamente por el tiempo y por la cantidad de preguntas. Por suerte Saomi no tenía muxhast respuestas incompletas —Pensaba Sairo, mientras se estiraba y caminaba en los pasillos de la escuela.
—Mmm... todos están afuera, así que debería ir a... —Pensaba Sairo, mientras miraba por la ventana, hasta que, noto que alguien caminaba atrás suyo, así que, se voltio para ver quién era, pero, ese alguien se escondió rápidamente atrás de una puerta de un aula abierta.
—¿He? Esa de ahí era ¿Saomi? —Pensó Sairo, luego de haber visto un segundo a Layna.
—Debo... haber visto mal, mejor sigo caminando —Pensó Sairo, algo nervioso, y continuó caminando.
—Ahora que lo pienso, trabajar con Saomi fue algo incómodo —Pensaba Sairo, recordando como Layna lo miraba fijamente, y notando como alguien lo seguía.
"Minutos después"
—Esto.... debe ser algún malentendido, ¿Porque Saomi me estaría siguiendo? —Decia Sairo, luego de voltearse muchas veces y ver qué Saomi era quien lo seguía.
—Mmm... no tiene sentido, pero, ella está caminando atras de mi, y ahora, subio por las escaleras al mismo piso que yo. Mmm...Ya se, iré al baño de hombres para ver si me sigue ahí, así sabré si esto es un mal entendido o no —Pensó Sairo, al ver que Layna no dejaba de seguirlo, y fue al baño de hombres.
"minutos después"
—Por suerte todo fue un mal entendido. No me siguió aquí y... tampoco la veo asomándose por la puerta. Así que sin duda, todo fue un mal entendido —Pensó Sairo, aliviado, mientras se secaba las manos. Luego, salió del baño de hombres y observo un celular con la pantalla prendída en el suelo.
—¿Que? ¿Un celular? —Pensó Sairo, lo levantó y vio que estaba abierto un documento en el que estaba escrito: "Porfavor, ven a la azotea Natgu".
—Tiene... Tiene que ser una broma, ¿Saomi se me va a... declarar? Debe de ser una broma, mejor, mejor no voy. Pero... si lo dice de verdad... —Pensaba y se preguntaba Sairo, nervioso, hasta que se le ocurrió algo
—Un momento, y si... ¿Es el celular de otra persona y solo estoy mal interpretando todo? Mmm... podría ser... no puedo ser el único Natgu en toda la escuela. Mmm... Ya se, veré si aparece Saomi en alguna foto del celular —Penso Sairo, y luego prendió el celular solo para ver qué necesitaba una clave de acceso.
—Que mal que apague el celular luego de leer ese documento —Dijo Natgu, y dio un pequeño suspiro.
—Solo me queda ir a la azotea para ver si está Saomi —Penso Sairo, y se dirigió rápidamente a la azotea.
“Minutos después "
—Hola Natgu —Dijo Layna, sonriendo y sujetándose las manos atrás de su espalda, luego de que Sairo entrará por la puerta de la azotea.
—Ha, hola Saomi, este... encontré este celular y... decía que venga a la azotea, ¿Sabes a quién le pertenece? —Dijo y pregunto Sairo, nervioso, mientras le mostraba el celular que encontró.
—Es mio —Respondido Layna, sonríendo y sujetándose las manos atrás de la espalda
—Entiendo, ¿Por qué... por qué me pediste que venga a la azotea? —Dijo y pregunto Sairo nervioso.
—Para preguntarte algo —Respondio Layna.
—¿Sobre el examen? —Pregunto Sairo, nervioso
—Si, eso debe ser —Penso Sairo, rápidamente
—No, quería preguntarte si querias salir conmigo, me enamoré de ti quisiera que seas mi novio Natgu —Respondio Layna, y empezó a sonreír radiantemente
—Esto, esto no puede estár pasando —Penso Sairo, mientras su corazón latía fuertemente.
—Debo.... debo calmarme y responder rápido —Penso Sairo, luego de quedar unos segundos en shock.
—Este... —Decia Sairo, hasta que fue interrumpido por Layna.
—Por cierto, tengo un cuchillo atrás de mi espalda por si me rechazas —Dijo Layna, sonriendo, pero, Sairo estaba tan concentrado en su respuesta que no tomo en serio lo que acababa de escuchar.
—Veamos... tienes una bonita sonrisa, eres linda, inteligente por lo que vi, y más o menos de mi tamaño. No veo porque rechazarte —Dijo Sairo, ocultando exitosamente un tono de vergüenza.
—¿Eso significa que... —Preguntaba Layna, algo asombrada y nerviosa por lo que acababa de escuchar, hasta que Sairo la interrumpió
—Si, acepto ser tu novio —Respondió Sairo, y Layna dejó caer al suelo el cuchillo que sostenía con sus dos manos atrás de su espalda, para abrazar rápidamente a Sairo.
—Valla... en verdad tenía un cuchillo—Penso Sairo, al percatarse del cuchillo.
—Por cierto, si me eres infiel te mataré a ti y a la chica con la que me engañaste, y si hablas con otra chica, además de mi, la mataré y te lo are saber —Dijo Layna, a la oreja de Sairo mientras lo abrazaba, con un tono siniestro.
—Está... está chica definitivamente tiene problemas mentales, pero.... aún así, ahora ella es mi novia, así que... supongo que tengo que tratar de solucionarlos —Penso Sairo, un poco asustado por lo que acababa de escuchar.
—Por ahora... le seguiré el juego —Penso Sairo
—Esta bien, de todos modos no hablo con nadie—Respondio Sairo, y sonó el timbre que indicaba el final del receso.
—Ahora vayamos juntos a clase —Dijo Layna, y dejó de abrazar a Sairo para tomarlo de la mano.
—Claro —Dijo Sairo, y tomado de la mano de Layna, salió de la azotea.
—Estar asi es vergonzoso pero... ahora tengo novia —Penso Sairo, avergonzado, al percatarse de las miradas de asombro de muchos de sus compañeros de clase y profesores que lo veían caminar tomado de la mano de Layna.
Alex Antonio
