Jungkook suspiró ansioso cuando vio su casa — la de su padrastro, en todo caso—. Hoy había rendido uno de sus últimos exámenes en la universidad y, realmente necesitaba y quería llegar a su casa y sentarse en el sofá, comer palomitas, mirar una buena película y hablar de cosas triviales con Taehyung, su padrastro.
Su madre y Taehyung se habían casado cuando el era un adolescente pero, pocos años después, por un mutuo acuerdo se habían separado. Su madre no perdió tiempo, meses después supo que estaba saliendo con un hombre de negocios y, un año después, su madre se había vuelto a casar.
Taehyung no pareció afectado por todo lo ocurrido, es más, se lo veía tan relajado. Él no tuvo problema en alojar a Jungkook y mantenerlo mientras terminaba su carrera, y esa era una de las cosas que más apreciaba de su padrastro.
Abrió la puerta de su casa y se extrañó al no escuchar sonido alguno.
—¿Taehyung? —lo llamó y no obtuvo respuesta.
Tiró su mochila sobre el sofá y se descalzó. Subió con pereza la escalera y se dirigió a la habitación de Taehyung.
Iba a abrir la puerta pero algo lo detuvo. Frunció el ceño y, ¿escuchó a Taehyung gemir?
Si, definitivamente Taehyung había gemido, y lo acaba de volver a hacer.
Algo en su interior se removió y se sintió enojado. ¿En serio Taehyung había traído a alguien a su casa?
Iba a darse la vuelta e ir a su habitación a encerrarse, pero su nombre había salido en forma de gemido de la boca de Taehyung. ¿Se estaba masturbando mientras pensaba en él?
Jungkook se mordió el labio inferior y bajó la vista hacia sus pantalones: en cuestiones de segundos obtuvo una erección. Colocó su mano sobre el pomo de la puerta y, tras inhalar aire y prepararse mentalmente para lo que vería, abrió la puerta despacio, tratando de no hacer ruido.
Cuando ve a Taehyung de rodillas sobre la cama, con un consolador, de un tamaño considerable, entrando y saliendo de su culo casi se corre en sus pantalones. Aprieta fuerte los labios para evitar jadear y que Taehyung supiese que estaba allí.
Se quita la remera que traía junto a los pantalones, lentamente disfrutando de los dulces sonidos salidos de la boca de su padrastro.
Decidido se acerca a la cama, se arrodilla en el piso y mira cálidamente a Taehyung, con el rostro enterrado en la almohada.
Él ya no aguanta, sus manos arden por tocar el hermoso cuerpo de Taehyung, acariciar cada parte de él y que sus dedos se aprendan cada mínimo detalle.
—Quién iba a imaginar que el famoso Kim Taehyung iba a ser de esos tipos a los que le gustan que los jodan, ¿uh? —murmura en su oído mientras le acaricia con suavidad la espalda.
Taehyung se congela, pero no levanta su rostro de la almohada, por vergüenza, posiblemente.
—¿Jungkook? —susurra con su voz temblorosa.
Jungkook baja su mano y la posa sobre la del mayor, despacio mueve su mano y quita el juguete de su apretado agujero, haciendo que Taehyung arquee su espalda y suelte un jadeo sorprendido.
—Si, Taehyung. Aquí estoy. —escucha al aludido maldecir y sonríe divertido.
—Y-yo n-no... —empieza a hablar Taehyung, su voz teñida de vergüenza.
— No quiero escuchar algún tipo de 'no' Taehyung. Hace demasiado tiempo quiero enterrarme profundamente en ti. No quiero ninguna negativa de tu parte, no ahora. —dice y deja un beso casto en la mejilla del castaño.
Jungkook quita totalmente el consolador y lo arroja al otro lado de la cama. Involuntariamente, Taehyung gime triste ante el vacío. —No te preocupes, dulce. Tengo algo más sucio y duro que ese jodido juguete.
Jungkook sonríe y sube a la cama, girando a Taehyung de modo que queden frente a frente. Taehyung estaba terriblemente sonrojado, algunos mechones de pelo se habían pegado a su frente debido al sudor. Ésto le da ternura a Jungkook, le da ternura ver a Taehyung sonrojado.
—¿De verdad querías... uh.. hacer eso? —habla bajo, tímido.
Jungkook prefiere no contestar con palabras, así que toma los labios del mayor en un ardiente beso. Mueve sus labios bruscamente, mientras que con sus manos separa las piernas del pelinegro y se ubica entre ellas. El pene de Taehyung está rozando su abdomen, así que se separa de sus labios mientras gime.
Taehyung solo jadea y se frota contra él. Esconde su rostro en el cuello de Jungkook y suspira. Baja sus manos por la espalda y se detiene al sentir la tela del bóxer.
Lo mira con un puchero y aletea sus pestañas, —no es justo que todavía tengas el bóxer puesto cuando yo estoy completamente desnudo y listo para ti.
Jungkook respiró hondo, baja su boca al cuello de Taehyung y deja un rastro de besos húmedos allí. —¿Me lo quitas?
Taehyung definitivamente no pierde tiempo, y con sus manos temblorosas despoja al menor de la última prenda que los separaba. Jadea alto al sentir el glande húmedo contra su piel, toma al pelinegro de las mejillas y lo acerca nuevamente para besarlo. Inconscientemente se mueve contra el miembro de Jungkook.
El pelinegro se separa un poco y mira a su alrededor; —¿Lubricante, Taehyung?
—¿En serio quieres lubricante? ¡Por Dios, Jungkook! ¡Solo mete tu c-cosa en mi, ahora! —Taehyung se queja, y no le importa lucir desesperado.
Jungkook solo arquea una de sus cejas y lo mira con diversión. —¿Acabas de llamar cosa a mi pene, de verdad? —
Taehyung rueda los ojos y suspira, frustrado. —Sí Jungkook, le dije cosa. No importa como demonios quieres que le diga, deja de decir idioteces y jódeme.
—Qué directo. —mientras habla pasa sus manos por sus piernas, de manera lenta. —Dése la vuelta, Señor Kim.
Taehyung se voltea, quedando con su culo en alto y la cabeza enterrada en la almohada nuevamente. Siente la palma de la mano de Jungkook impactar en su culo y se arquea, tomando las sábanas bajo él en un puño.
Jungkook lo acaricia varias veces, luego se alinea contra su entrada, suspira y mordiéndose el labio inferior se hunde en él hasta la mitad.
Taehyung está bajo él mordiendo sus labios con fuerza, evitando gemir como zorra. Y es que, Jungkook dentro suyo es una de las mejores sensaciones de su vida.
Jungkook toma sus brazos y los cruza sobre su espalda, sujetándolos por la muñeca.
—Bien, Taehyung. Éste va a ser el mejor sexo de tu vida. —quiso contestarle que de eso no tenía dudas, pero lo único que abandonó sus labios fue un agudo grito, pues Jungkook se había hundido en él profundamente y había dado de lleno en su punto.
Jungkook se retira completamente y suelta las manos de Taehyung, las estira y apoya sus grandes manos sobre las de su padrastro, uniendo sus dedos.
—Jungkook —se queja, arrastrando la letras en un gemido. Taehyung empujó su culo hacia atrás, tratando de tener contacto con el menor.
—¿Si, Taehyung? ¿Qué quieres? —le respondió con rastros de diversión. (Toda la diversión que podía tener, teniendo en cuenta que el culo de Taehyung estaba a centímetros suyo, listo para recibirlo)
La única contestación que recibió fue un gemido cargado de frustración.
Quitó una mano de sobre la de Taehyung y la dirigió a su propio pene y lo masajeó un par de veces. Mordiéndose el labio inferior se hunde en el castaño de una sola estocada, ganándose fuertes gemidos por parte de ambos.
Jungkook toma fuerte con sus dos manos la cintura de Taehyung y sin más empieza a embestirlo con rudeza. El mayor está derritiéndose en la cama y disfrutando del placer que recorre su cuerpo cada vez que Jungkook se hunde en él. Y no intenta reprimir sus gemidos y jadeos, él los deja salir. (Y estos sonidos a Jungkook lo están volviendo loco, cada sonido que sale de la boca de su padrastro la acerca a la cima rápido).
En el fondo, Jungkook se siente un tanto ridículo porque sabe que no va a durar mucho y es que, la manera en que el cuerpo de Taehyung se amoldaba a él lo tenía delirando. Eso y el hecho de que al fin estaba cumpliendo una de sus grandes metas en la vida.
El sudor cubriendo cada centímetro de piel hace que las manos de Jungkook resbalen. Los brazos de Taehyung se sienten cansados, y él cede y se deja caer en la cama llevando a Jungkook consigo.
Jungkook siente que toca su orgasmo con las yemas de sus dedos, y es por eso que inconscientemente lleva una de sus manos a las suaves hebras azabaches del cabello de Taehyung y lo sujeta con fuerza en un puño, haciéndolo jadear y alzar el cuello.
—K-kookie, e-estoy cerca. Más... ¡ah! m-más rápido.
Jungkook jamás había escuchado tan ronca la voz de Taehyung. Y le encanta descubrir el efecto que tiene sobre él.
—Yo también estoy cerca, bebé. Muy cerca. Mh-mh. Aguanta un poco más y correte conmigo, ¿si? ¿harías eso por mí?
Jungkook había bajado -considerablemente el ritmo de sus embestidas, y se había acercado tanto a Taehyung de manera que su pecho se pegaba a la espalda de éste y su boca había quedado a la par con su oreja. Susurró aquellas palabras con una voz tan ronca que hasta a él mismo le sorprendió. Taehyung asintió jadeando y el pelinegro aprovechó para dejar, con extraña dulzura, un casto beso en los labios del mayor.
El pelinegro se alejó y dio pocas lentas embestidas más, luego volvió a aumentar el ritmo y la dureza de cada estocada. Los gemidos en la habitación aumentaron la intensidad y el volumen. Las respiraciones se volvían cada vez más erráticas.
Y ellos se sentían a punto de caer.
—Ngh, J-Jungkook mh. Ya n-no aguanto, p-por favor necesito...
—Está bien, amor. Vamos, déjate ir. Correte para mí.
Jungkook gruñó y Taehyung medio gritó. Dos, tres embestidas más y ambos se dejaron ir en un orgasmo explosivamente placentero.
El cuerpo de Taehyung cedió totalmente, Jungkook cayendo con él. Ambos respirando agitadamente, tratando de acompasar sus respiraciones y desacelerar los latidos de sus corazones.
Jungkook no tenía intenciones de abandonar el débil cuerpo de Taehyung, y es por eso que lo cogió de la cintura y los puso a ambos en una cómoda posición, todavía unidos. Abrió sus ojos y sonrió feliz cuando oyó a Taehyung respirar tranquilamente, supo que se había dejado llevar por Morfeo. Suspiró y también se dejó llevar.
— Eres tan sucio Taehyung.
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Decidí que haré OS como en series. Este que ya había hecho una vez lo edité y formará parte de como una pequeña saga de varios o los que se me ocurran.
𝑲𝒉𝒂𝒐𝒔 👑
