L
Lu morno


Hace siglos atrás el mundo colapsó entre guerras, sequías, la muerte abundaba, se había convertido en una fiel amante de la vida, nadie podía escapar de ella, entre otras cosas, el mundo enojado con la vida humana, decidió quitarle lo más preciado, ¿El dinero?, no ¿riqueza?, ¿poder? Nada de eso, les arrebató sus emociones sin dudarlo, dejando unos caparazones fríos y vacíos por todo el mundo, el humano se sintió extraño, no podía expresar nada, se acostumbró al frío y vacío de su ser, muchos se suicidaron esa noche de enero donde los pájaros miraban por la ventana y la luna era una espectadora más , aunque los rumores dicen que las nuevas generaciones tiene una pizca de eso de lo que se nos fue arrebatado… todos quieren volver a tener eso ¿Yo? Nací sin sentir, ¿por qué debería cambiarlo?, si se nos fue arrebatado, es por algo, es nuestro castigo… pero las cosas nunca salen como yo quiero apareció, él no diré que lleno de vitalidad, pero tenía algo diferente al resto, ¡Tenía emociones! ¿Era un fenómeno? Quien sabe, Mi nombre es Ellen Vlachos y me gustaría decir que esta es mi historia de amor, las primeras emociones que sentí a su lado


Romance Romance jeune adulte Tout public.

#239 #245 #sentimientos #32816 #217 #amor
0
2.6mille VUES
En cours - Nouveau chapitre Tous les lundis
temps de lecture
AA Partager

0

Capítulo 1

El chico nuevo

“El mundo cambia en un instante y nacemos en un día.”

El sol se colaba por mi ventana, esa fría mañana, era el primer día de enero donde los recuerdos inundaban las calles y los ancianos nos contaban sobre las emociones, ya me sabía ese pequeño cuento de memoria, era algo infantil e idiota “a veces pienso que es mentira que podíamos sentir, ¡son puras blasfemias! ¿Control de gobierno?” - deja de pensar estupideces, Ellen decía mientras me daba pequeños golpes en la cabeza

-Buenos días, amor, ¿cómo amaneciste, ¿emocionada por ir a la escuela?- mi madre cargaba con una sonrisa falsa, que parecía más una mueca, al no sentir imitamos lo que los ancianos nos describen como ¿felicites? No, no felicidad, eso, amor, tristeza , odio, aunque sinceramente nadie sabía si lo hacíamos correcto o solamente éramos algo idiotas

- Buenos días, madre, como siempre iré a ducharme- sin más me levanté moviendo mi cabello castaño con puntas de otro color, ¿debería cambiarme el look?, entre al baño mirándome al espejo mientras bostezaba, mi cabello no llegaba más allá de mis hombros, mi piel morena, mis ojos marrones oscuros era algo común demasiado diría yo, el agua fría caía en mi cuerpo levantándome, ¿debería ir? El primer día solo será presentarnos Ellen apurarte que llegarás tarde!

El tiempo pasó volando mi ropa, volaba por toda mi habitación, los colores “vivos” como lo nombraron los ancianos “Esos colores son de alegría, les puede producir felicidad” -Mi madre y muchas otras personas al escuchar al anciano del pueblo decir eso compraron camisas de colores, aunque fue difícil de conseguir nadie sabía que eran los colores, conocíamos exclusivamente el blanco y el negro, las grandes marcas de ropa comenzaron a crearlas y fue un éxito mundial que beneficio a mi padre que trabajaba en unas de esas empresas- Me pondré esta que es igual al sol - dije mientras agarraba la camisa con estampado de osos, me puse mi jean y mis tenis negros y salí de mi habitación dándole un beso a mi madre “otro gesto de cariño que va con el amor, alegría” .

“Llegue algo temprano”- murmuró al ver solo el lugar, mi salón es él… ¡¿dónde mierda deje el papel?! Rebuscó entre mi bolso, ¡touche! Salón 11, caminó arrastrando mis pies hacia allá, los minutos pasan y nadie llega, ¿si es hoy? Escucho un pequeño tintineo estresante “gesto de frustrado, furioso o nervioso” soy algo quisquillosa con los gestos, el cual imito además que mi madre quería llevar la cuenta de cuanto utilizo, esa persona entra a mi campo de visión, venía vestido de negro de pies a cabeza, pero había algo extraño en él ¿era nuevo, nunca lo había visto? Tengo curiosidad “gesto de emoción” estaba sentada en las escaleras y él, a algunos pasos adelante mío, llevaba unos audífonos, ¿escucha la radio o explicación sobre esas estúpidas emociones? Me levanté sacudiendo mi jean, tenía pequeñas partículas de sucio pegadas en ella, caminé 5 pasos hacía estar a su lado, sentí su mirada en mí -Hola- dije con un tono fingido de emoción, ¿por qué hice eso? ¡Mierda! Se quitó un audífono, suspiré algo, no me había escuchado

-Hola? - Su voz era alegre y su mirada era penetrante, sentí un pequeño cosquilleo extraño, eran mieles, era un poco más bajo que yo, blanco es guapo - Jejeje, disculpa, ¿vas para ese salón también?- dije con mi voz chillona que salió al juego era extraño que me estuviera comportando así

- Sí, soy nuevo -

-Ohh, bienvenido, entonces mi nombre es Ellen Vlachos - extendí mi mano como saludo, el cual estrecho con una sonrisa no pude evitar achicar los ojos por inercia, fue extraño, mi corazón latió por ese pequeño gesto, ¿quién era ese chico? Porque hacía que sintiera cosquilleos?, ¿estaré enferma?, ¿moriré? ¿Qué es esto? Aunque su sonrisa no parecía una mueca o al menos era perfecta, ¿cuánto tiempo se demoró en obtener algo así?.

- Soy Atlas Drakos- Otra vez esa maldita sonrisa que hizo que tragara en seco, su voz era fuerte y varonil, solo tenía algo en la mente huir de él o acercarme ¿cuántos gestos imite? ¿Si los imite?, mierda, debes pensar en otra cosa Ellen - ¿De dónde provienes Atlas?- exclame mirándolo a sus ojos que parecían dos agujeros de color miel que me succionaban -La curiosidad mato al gato Ellen- una sonrisa picarona broto de sus labios - ¿cómo puedes imitar tan bien?

-¿Imitar?- susurro tocándose el labio con su dedo -

- ¡Si! -mi uña se clavó en mi pierna para calmar ese pequeño hormigueo que sentía - Si no puedo saber de donde provienes, por lo menos que tienes edad, no?- dije, con una sonrisa falsa “gesto de felicidad”

-¿Estás bien?, ¿te duele algo?, acabas de hacer una mueca - Si, si sabía que mi imitación de una sonrisa no era perfecta -No, sonreía, pero es que tú ya llevas tiempo practicando, no?-

-Diría que nací sonriendo, tengo 19 años Ellen-

-¿Nacer? Eso es imposible, en fin te doy 20 por esa imitación perfecta -

El silencio reinó entre nosotros, la soledad también inundaba el ambiente, pero no faltó para que se escuchara el bullicio de la ciudad y de los estudiantes.

-Buenos jóvenes, esa fue la clase de hoy, mañana daremos sobre la emoción de la tristeza- El profesor mueve su mano de un lado a otro saliendo, aunque parecía que se le iba a dislocar la muñeca - ¿por qué todos son así?- Él susurró de Altas hizo que cerrara los ojos sintiendo su aliento frío golpear mis mejillas - Debes respetar la privacidad Drakos- Su nombre era algo difícil de pronunciar para mí.

-Discúlpame, pero puedes responderme?- asentí, el salón quedó completamente vacío, todos salieron a sentarse afuera a escuchar los cuentos y mitos de los ancianos, al ser primero de enero todos los ancianos se reunían en el patio para contar las historias de las emociones, era una tradición, él se sentó al frente mío esa actitud rebelde y amargada era extraño -¿qué quieres saber?

-¿Por qué todos parecen que imitaran sentir?- su pregunta me dejó algo atontada, ¿esto es una broma? -¿Acaso tú puedes sentir emociones Drakos?, porque es imposible, se nos arrebató - Mi cara debió ponerse roja, a veces me pasaba con una respiración agitada sufría de esa enfermedad desde pequeña - Perdón por hacerte enojar, vengo de un lugar diferente- Dijo mientras me pasaba su pañuelo- ¿estoy enojada? No, no para estarlo debo ponerme roja como un tomate y que mis pelos se ponga de punta y decir groserías -No estoy enojada, es una enfermedad llamada “Celestin” me pasa algunas veces - Una carcajada salió de él, algo fuerte para mí y nuevo ver a alguien reír con tal naturalidad y sencillez, sus ojos se pusieron pequeños ese ronquido que hacía para agarrar aire y soltarlo - Eso en mí, ciudad es estar enojado- ¡¿de dónde provenía este chico tan extraño?!

-Tengo otra pregunta- dijo al terminar de reírse

-Dime-

-¿Cómo hacen para amarse?, si me dices que no puedes sentir como se casaron tus padres?- su voz tenía un tono burlón

-No debes sentir amor para casarte, solo es procrear y seguir creciendo, dame tu número chico extraño

-¿si soy un chico extraño porque quieres mi número chica imitadora? - su tono seguía siendo burlón, lo de imitadora no me molestaba, era cierto todo lo éramos ¡Hasta él! - ¿Acaso me quieres conocer? - finalizó poniendo su mano en su cara de forma sarcástica

"Dios si imita genial"

-No te mentiré, eres extraño para mi gusto, aunque me servirás para ser como tú, ¡mi madre estaría feliz que sonreirá tan perfectamente "- Él movió su cabeza de un lado a otro - ¿Te acompaño a tomar él…? -!

¡¿Acompañar?! ¡¿Me estaba coqueteando?! No, no era posible, ¡No!, cálmate Ellen es un chico nuevo, no sabe que esa es una forma de querer salir, es un gesto romántico, así salieron mis padres y me tuvieron a mí, si le digo esto a mi madre se volverá loca… y no de hablar de mi parte ¡Uha! - Ellen ¿hola? ¿Estás? - su voz me saca de mi mente, su cara esta extraña, sus cejas están arriba mientras busca algo en mi cara - ¿Tú estás bien? - Dije mirándolo

-¿Yo? Solo estoy confundido, te quedaste en blanco, ¿dije algo malo? -

-Esa es una manera de salir… ya sabes… eh de querer tener hijos - Al decir eso pude notar una expresión de asombro, bueno así no lo han descrito y él parece transmitir o imitarlas tan bien esas emociones que dan miedo, es como ver la descripción gráfica en él - ¡No! Perdón, pero no quiero tener hijos todavía, estoy joven, solo quería acompañarte para hablar como amigos -

-Te pondré al corriente de aquí si? No quiero que vayas por allí diciendo esas cosas -

-¿Te preocupas por mí? En estas pocas horas que te conozco no paras de hablar de emociones, imitar… pero no te das cuenta de que las estás teniendo, que estás sintiendo - Sus palabras me generan un malestar raro en mi cuerpo - ¿me darás tu número drakos?

-¿Esa no es una propuesta de tener hijos, cierto? - en ese momento supe que debía ir al hospital, algo raro había pasado en mi cuerpo, mi mano se movió por inercia a mis labios cubriéndolo y mi boca subió mostrando mis dientes, si moriré debería ir haciendo mi testamento.

14 Juillet 2022 19:18 0 Rapport Incorporer Suivre l’histoire
1
Lire le chapitre suivant Capitulo 2

Commentez quelque chose

Publier!
Il n’y a aucun commentaire pour le moment. Soyez le premier à donner votre avis!
~

Comment se passe votre lecture?

Il reste encore 1 chapitres restants de cette histoire.
Pour continuer votre lecture, veuillez vous connecter ou créer un compte. Gratuit!