Quiero ser como tú • YoonMin • Suivre l’histoire

— Primer encuentro —

Es martes y me encuentro bajo el techo de una tienda que me alcanza a tapar de la lluvia, eran las 12:00 pm y salí a almorzar, el cielo parecía despejado y soleado cuando salí a mi hora de almuerzo del trabajo, pero media hora después cuando estaba terminando de almorzar el cielo se nubló y la lluvia empezó a caer sin esperar, me quede esperando a que escampara, pero el tiempo paso demasiado rápido y pronto será la 01:20 pm, mi receso termina en 10 minutos y necesito salir de debajo, quizás y si tengo suerte logre llegar a tiempo.

Salgo a la calle y empiezo a caminar bajo la lluvia, sintiendo como las gotas que caen con tanta intensidad y fuerza caen sobre mí logrando empapar mi cabello.

Trato de correr para llegar más rápido, pero a cambio solo consigo caer en medio de la gente, noto como me miran intentando juzgarme y reírse, que tontos al ninguno querer ayudarme, pues parece que me lastime un poco la rodilla. Me duele tanto que en este momento ya ni me importa lo tarde y empapado que pueda llegar, solo quiero levantarme de aquí y poder dirigirme a casa.

Así que con la dignidad que me queda, me levanto del piso e intento caminar, pero puedo sentir lo mucho que duele y arde por el agua, así que inconscientemente mis ojos se llorosean y yo me siento un poco más ridículo.

Miro al frente y siento como mi mirada se pierde en la nada y realmente no sé por cuanto tiempo me quede allí de pie, pero lo próximo que siento es a alguien tocarme el hombro y me doy cuenta de que ya no me están cayendo gotas de agua en la cabeza.

El extraño que toco mi hombro para llamar mi atención lleva un paraguas en su mano izquierda, me mira algo preocupado y dice:

"¿Estás bien?, hace rato, te vi en la cafetería donde escampaste y ahora que iba pasando por el semáforo vi que te caíste, así que fui a conseguir un paraguas para dártelo y también ayudarte a revisar la herida en tu rodilla, porque parece doler mucho". Explico, aunque yo no pedí ninguna explicación.

Simplemente, no sabía que decir, es tan vergonzosa y humillante la situación que me he quedado sin palabras mirándole la cara con la mirada perdida nuevamente.

"¡Oye! No quería asustarte, simplemente quiero ayudarte", dice sacudiendo su mano frente a mi rostro y yo vuelvo a reaccionar.

"Gracias, la verdad es que si duele un poco". Digo señalando mi rodilla.

"¿Necesitas ir al médico?", niego de inmediato y vuelve a hablar, "Creo que deberías ir a casa y reposar, puedo llevarte si no tienes problemas con ello".

Y por más imprudente y loca que sea la idea, me decido a aceptar "Creo que no debería aceptar, aun así, un chico desesperado con una situación desesperada, creo que necesita medidas desesperadas". Río un poco por mi respuesta y él también lo hace.

"Bien, entonces dime ¿Puedes caminar de aquí a allá?" Señala un auto de color vino tinto que está en la esquina.

Intento mover otra vez mi rodilla para caminar y suelto un chillido de lo mucho que duele y le digo un simple "Lo siento, duele mucho".

"Tengo una idea, sostén el paraguas", me dice y hago caso, acción siguiente, él me eleva tomando mis piernas y me carga hasta su auto, razón por la que me avergüenzo y puse mi rostro en su pecho ocultando mi cara.

"Esto es vergonzoso", le digo y hace caso omiso.

Me deja en los asientos traseros procurando que mi rodilla no se doble mucho y yo le agradezco silenciosamente, él sube al asiento de copiloto, pues recién puedo notar que lleva chofer.

"¿Cuál dices que es tu dirección?", le doy la del edificio donde de vivo y el carro se dirige allí, el camino continúa en silencio y luego de media hora por fin llegamos, unos edificios de color azul desgastado por lo viejos que están.

El hombre vuelve a bajar del auto y me saca con cuidado, y aunque el cielo sigue opaco, la lluvia se detuvo.

"Dime cuál es tu apartamento, te acompaño, ¿Tiene ascensor el edificio?".

"Tiene uno, aunque el edificio es de 5 pisos, no más, cuando lo construyeron le decidieron poner uno." Intento levantarme otra vez, pero esta vez dije, "Tranquilo, ya duele un poco menos, puedo caminar hasta el ascensor". Aunque fuese mentira.

Y pareciendo poco convencido me dejo caminar hasta el ascensor donde presione el piso 3.

"Por cierto, no he preguntado como te llamas, así que, ¿cuál es tu nombre?, al menos debería saber tu nombre si voy a dejarte entrar a mi apartamento".

Ríe por lo bajo como si hubiese hecho una broma y procede a decir.

"Es un gusto Jimin, soy Min Yoongi".

"Espera, como sabes mi nombre", lo miro con duda y él levanta una ceja señalando mi pecho, lugar donde llevo puesto la marquilla del trabajo que contiene mi nombre. "Ohhh, lo había olvidado, bien puedes pasar". Dije abriendo la puerta y haciéndome a un lado.

Pasa y me pregunta donde está el botiquín para ir a buscarlo, a lo que yo señalo la habitación que es el baño para que lo busque y lo traiga, luego de tenerlo en sus manos me pide que estire el pie en el mueble y sentándose a un lado empieza a desinfectar la herida. Al parecer duele mucho porque me alcance a raspar con el pavimento cuando me caí, también se empezó a formar un hematoma al rededor de esta.

Luego de terminar le digo que puede beber algo de la nevera si lo desea a lo que niega y dice.

"Ya tengo que irme, pero fue un placer encontrarme contigo por hoy, espero que nos volvamos a ver en el futuro", siguiente a esas palabras le veo marcharse, miro por la ventana cuando sube al auto y se marcha.

Y ese fue el primer encuentro, tan extraño y sereno que hizo sentir cálido mi corazón.

† 𝓓𝓲𝓪𝓶𝓸𝓷𝓭 †