ESTACIÓN RECUERDOS Suivre l’histoire

Querida Dome, te doy la bienvenida a mis pensamientos. Tranquila, no es un lugar turbio ni escalofriante, eso sí, debes estar preparada para imaginar lo que sea. Debes imaginar cada línea que leas, sólo así todo lo que leas tendrá sentido. No te preocupes si llega un punto en el que crees haber perdido la razón, es exactamente lo que debe ocurrir, ¡Al menos a mí me pasa!

¡EMPECEMOS YA!

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Una vez más, una vez más estoy aquí. Afuera hace muchísimo frío, debería tomar una taza de café hirviendo... A lo mejor esa no es una opción ahora, creo que necesito dormir un poco... - ¡RING! ,¡RING!, ¡RING! - ¡Demonios, una vez más ese teléfono, al próximo que llame juro por Dios que le colgaré y no me va a importar quien sea!

- ¿¿Si... diga...??

+ ¡Hola, hola! Soy Spencer, su vecino, me da gusto que haya contestado. Le llamo porque esta mañana he recibido una invitación, y no va a creer dónde la encontré, !EN MI BAÑO! Es todo tan confuso, en fin, la invitación me ha llegado por error, pues lleva su nombre. ¿A qué hora se la puedo entregar?

- Hola Spencer, déjalo en mi buzón cuando puedas.

+ Ya..., pero hay un problema señor Pillajo, la carta dice que debe ser leída con atención y para ello usted debe tenerla presencialmente.

- Spencer, ¿leíste la carta sin permiso?..., como sea, déjala en mi buzón luego voy a por ella.

+ Pero señor, aquí dice que debe leerla presencialmente.

- Por eso, la leeré yo solo más tarde, no hay diferencia.

+ Señor, no sea terco, debe recibirla en sus manos.

- ¡Spencer, no seas terco tú, te he dicho que la dejes en el bendito buzón!

+ Señor... no quiero volver a repetirlo, hágame caso, por favor.

- ¡Pero esque...! Bueno va, tráeme la invitación esa, pero ahora, más tarde me ocuparé.

+ ¡Sí señor, como usted diga!

- Adiós.

¡Vaya!, ¡Qué señor tan estresante!, de seguro ya es la edad... ¿En qué estaba?... encima me ha hecho olvidar lo que estaba por hacer. ¿Desde cuándo la gente se ha vuelto tan abusiva?. Ya casi es hora, debo arreglarme para esta noche, debo de estar impecable si quiero conseguir el empleo. ¿A ver... dónde he guardado la camisa? - ¡DING DONG!, ¡DING DONG! - ¡BUENA YA ESTÁ!, ¡Este señor no me va a dejar ni ponerme los pantalones o qué!

(ABRE LA PUERTA)

+ ¡Señor Pillajo, qué gusto!

- El placer es sólo suyo...

+ Aquí tiene la invitación, olvidé mencionarle que dentro de 5 minutos recibirá la visita del señor Mente.

- Espera, espera, frénate ahí. ¿Quién rayos es el señor Mente?. Spencer, tengo una cita en media hora y no tengo tiempo para el señor Cerebro.

+ Mente señor.

- ¡Me da igual!, no podré atenderlo.

+ ¡Oh!, ¡Creo que es él!

- Spencer, lo siento pero no podré quedarme, en otra ocasión será.

M: ¡ALTO AHÍ!