night | kooktae Suivre l’histoire

No es incesto.

***

Jungkook rió ronco, pasando su mano por toda la extensión por encima del bóxer.

Su hermanastro era… Oh, no había manera de describirlo.

Ese niño malcriado, dos años menor que Jungkook sabía que cartas usar para llevarlo lentamente a la demencia.

Un mes había pasado desde que Taehyung había pisado su hogar junto a su madre. Sonrisa encantadora, cuando lo vio simplemente pudo compararlo con un ángel, pero pasando los días, se dio cuenta de que aquello no era así.

Maldición, claro que no.

Rió otra vez a sus pensamientos, viendo aquella imagen en la pantalla de su móvil, tirando la cabeza hacia atrás mientras metía su mano por debajo de la ropa interior. Ese diablillo había pretendido mandárselo a su "novio", pero se lo había enviado a él. Jungkook sabía que en realidad, esa foto sí había sido enviada al chat correcto; al suyo.

Aquella semana su hermano parecía estar más caliente de lo normal, puesto que estaba tratando de provocarle escalando a un nivel más que las semanas anteriores, y no fallando, no, porque Jungkook aún así fue al baño luego de haber apreciado el gordo culo de Taehyung con aquella braga negra encima, pretendiendo agacharse para buscar algo en el cajón frente a él.

O cuando le mandaba aquellas sonrisas sutiles, no habiendo más que provocación en esos carnosos labios.

O peor aún, cuando sus padres habían querido ver una película con ellos, Taehyung no encontró mejor lugar para sentarse que en sus piernas y menear sus caderas con cuidado encima suyo.

Y ahora se había desatado, porque aquella imagen logró volverlo loco.

Taehyung (bro)

últ. vez hoy 1:34 a.m

¡Ups! ¡Lo siento, Hyung!

Chat equivocado, jiji

Era para mi novio :)

Lo deseaba, diablos, deseaba tanto a su hermanito de diecisiete años.

Lo conocía. Taehyung vestía normalmente faldas cortas, shorts apegados que hacían resaltar su enorme culo, y crop tops que dejaban ver su lindo abdomen. Aún así, el pelinegro sabía que esas vestimentas no las usaba para provocar, sino que a Taehyung realmente le gustaban. Aún así, cuando buscaba provocarle, esas prendas ayudaban.

Nunca habían hecho nada, ni hablado sobre eso que pasaba entre ambos. Jungkook lo dejaba pasar, a pesar de tocarse pensando en él, nunca fueron más que simples provocaciones.

Hasta hoy.

Se levantó de su cama con la polla al aire, masturbándose un poco antes de meterla dentro de sus boxers. Descalzo, fue hasta la puerta de su cuarto y la abrió. Eran las 3 a.m para ser exactos. La casa estaba en pleno silencio, así que caminó hasta toparse con la habitación de su hermanastro, y la abrió despacio para asomar su cabeza y ver a Taehyung durmiendo con su cuerpo destapado boca abajo, probablemente gracias al calor de la noche. Finalmente, entró a la habitación y cerró la puerta con delicadeza, volteando a su hermano y sonriendo sugestivamente.

Se acercó a paso lento hasta el borde de la cama de Taehyung, y lo observó por unos segundos, su rostro (lo que podía verse de ella, ya que su perfil estaba apoyado en la almohada) se veía igual de preciosa incluso mientras dormía.

Pequeño malcriado.

Tiró de sus boxers hasta tenerlos fuera de su cuerpo, y llevó sus dedos al dobladillo de su camisa para proceder a sacárselo, quedando desnudo. Estaba seguro de que si Taehyung lo veía así, no sería siquiera discreto en morderse el labio libremente mientras recorría su cuerpo.

Parado frente a Taehyung, se inclinó un poco hacia adelante, apoyando su rodilla derecha y ambas manos en el suave colchón, gateando delicadamente hasta posarse encima de su hermanito, viendo el perfil de su rostro sereno dormir y removerse levemente ante el movimiento en su cama, mas no despertando.

Jungkook dejó sus piernas a cada lado de los muslos traseros de Taehyung, rozando apenas sus pieles. Mordió su labio inferior y sonrió. Taehyung no era el único que podía jugar.

Se inclinó con cuidado más arriba, dejando sus manos a los costados de los hombros de Taehyung, y bajó lentamente hasta llegar a su cuello expuesto.

—Eres mío desde ahora, pequeña zorra. —susurró en la parte posterior de su cabeza, y consciente de que Taehyung no podía escucharle en consecuencia de su estado durmiente; lamió la piel delicadamente para no hacer mucho aún.

Caliente, así se sentía Jeon.

Lamió esta vez la piel de su nuca, sintiendo el cuerpo debajo suyo removerse un poco.

Olfateó la fragancia de su cabello con los ojos cerrados, disfrutando de su aroma a cítricos. Movió un poco la cabeza y mordió la punta de su oreja suavemente.

Trazó un camino de besos superficiales a través de sus hombros y descubierta espalda baja, su lengua apareciendo en varios ocasiones, chupando la piel de su cintura antes de enderezarse, observando su maravillosa piel brillosa por la humedad de su lengua, aunque con aquella molesta prenda superior gris.

Relamió sus labios con el deseo destellando en sus ojos, recorriendo cada porción de piel que podía ver. Eventualmente, su vista cayó en su gordo y redondo culo, amando la braga negra al no dejarle nada a su imaginación.

Así que aquella foto había sido tomada en el mismo instante que la envió.

Jungkook sintió su polla crispar; el anhelo por tocar siendo más fuerte que él, así que lo hizo.

Palpó suavemente su espalda descubierta, acariciando una línea antes de bajar, su mano inclinándose ante la curva del comienzo de sus glúteos. Eran tan grandes y esponjosas que solo quería lamer y apretar.

Entonces, bajando más, mimó su culo, su miembro endureciéndose a la par. Taehyung se removió un poco.

Jungkook acarició sus abdominales, bajando sobre su propio trabajado cuerpo, el movimiento de su diestra haciéndose presente, masturbándose con la vista.

La mano encima de Taehyung siguió moviéndose, acariciando esta vez la piel dorada de su muslo. Preciosa dermis marcándose tan sólo con un pequeño apretón entre sus dedos.

Jungkook lamió el contorno de su labio inferior, pellizcando el otro muslo de Taehyung. Se sentía ridículamente suave. Deseaba chupar y morder por todos lados.

Subió de nuevo a su culo y apretó el trozo de piel con más fuerza, dejando la parte pálida por la presión. La mano en su polla reforzó el agarre, subiendo y bajando con un poco más de velocidad, aunque seguía siendo moderado.

Dejándose de juegos, acarició superficialmente una vez más, antes de sostener entre sus dedos la línea de las bragas, dejándola de lado.

Apretando la piel de su caliente miembro, la alejó y usó ambas manos para apartar bien la tela, enganchándola a su glúteo, y separó con dos dedos las nalgas de su hermanastro, observando aquel orificio apretado antes de lamer sus labios y masturbarse de nuevo suavemente.

Sin pensarlo dos veces, miró la parte posterior de su cabeza para asegurarse de que siguiera dormido. Una vez hecho el chequeo breve, dejó su polla y se inclinó hasta que su rostro estuvo frente al culo de Taehyung.

—Voy a joderte tanto… —Jungkook susurró, como si le estuviera avisando, sabiendo que no podía escucharle.

Separando de nuevo sus redondas y suaves nalgas, vislumbró el anillo de músculos, escupiendo saliva en él, frotando con su dedo la humedad. El cuerpo de Taehyung se removió suavemente antes de quedarse quieto.

Jungkook sonrió y se inclinó, besando y mordiendo la piel de su trasero, creando una pequeña línea que lo llevó hasta su estrechez. Es entonces cuando dio una superficial lamida, todos los puntos rojos apareciendo, la oleada caliente apareciendo sin previo aviso. Su mano volvió a enroscarse alrededor de su polla, acariciándose mientras le comía el culo a Taehyung.

Lamió desde abajo hasta arriba, volviendo siempre a su pequeño agujero. Chupó con avidez el orificio cerrado, apretando con fuerza una de sus nalgas para separarlas correctamente. Probablemente la marca de sus dedos quedaría allí.

Era un desastre; había saliva por todos lados, incluso en la ropa interior. Taehyung se sentiría orgulloso de saber cuánto Jungkook le deseaba, estaba seguro.

Un momento después, empujó su lengua, casi forzando a que se abriera el interior. Se sentía jodidamente apretado. Jungkook ajustó su mano alrededor y se masturbó más duro, sin remedio.

Cuando tuvo su órgano mojado dentro por completo, sacudiéndose en el interior, Taehyung gimió tal vez entre sueños, tal vez ya despierto. Jungkook no lo sabía, por lo que dejando la erección entre sus piernas de lado, llevó su mano arriba, buscando la boca de Taehyung y cuando la encontró, introdujo sus dedos allí para acallar los sonidos obscenos.

Está despierto. Pensó cuando los labios se cerraron alrededor de sus dos dedos, chupando y lamiendo.

Ante el pensamiento y la boca trabajando en sus falanges, su lengua estimuló con más ansía, empujando más profundo.

Minutos después, dos dedos aparecieron en la intromisión, presionando contra él y maltratando su interior. Se enderezó y fue hacia arriba, sin dejar el movimiento de sus dedos. Taehyung sintió el cuerpo caliente en su espalda.

—Oh, Jungkook-

El mencionado tapó su dulce boca con la palma de su mano, respirando tras su oreja. El cuerpo de Taehyung vibró.

—Shh —dijo Jungkook—. Papá y mamá están al lado, bebé. Sé silencioso, ¿De acuerdo? —después de la pregunta, agregó un tercer dedo. Taehyung asintió frenéticamente, y Jungkook chupó la parte posterior de su cuello con afán. Jungkook aún se encontraba a los lados de sus muslos, y Taehyung con las piernas juntas.

—¿C-Cómo entraste a mi habitación? Estaba con llave. —gimió aquellas palabras en voz baja. Jungkook no respondió, enderezándose y sacando sus dedos del interior de Taehyung. Sostuvo la tela y la enganchó de nuevo a su glúteo para que no molestase, observando el ano palpitante de su hermanito, contrayéndose ante el deseo de más. De tener algo más grande—. Joder, Jungkook —llamó de nuevo, sin aliento—. T-Te pregunté algo.

Jungkook se inclinó sobre él, sus manos apoyadas a sus costados. Acomodó su polla entre las nalgas de Taehyung, y el menor mordió su labio inferior, apoyándose en sus codos.

—Te voy a joder, ¿Está bien? —dijo sin molestarse en responder las preguntas previas de Taehyung—. Voy a follarte duro y quiero que no hagas ruido, Taehyungie. Porque si mamá y papá se enteran… —susurró vacilante, sacudiendo suavemente su pelvis, empezando a frotar la piel de su pene con la del culo de Taehyung—, todo se irá a la mierda, y no podré volver a joderte. Así que hazme caso, bebé, ¿Estamos claros?

Taehyung asintió sin pensarlo dos veces, su cabeza cayendo levemente hacia delante cuando los labios de su hermano se pegaron a la curvatura entre su cuello y hombro.

Taehyung se quejó ante la falta de algo en su interior, empujando sus caderas hacia atrás, chocando con la piel caliente de la polla de Jungkook.

—Calma —susurró encima de su piel, irguiéndose y presionando la espalda baja de Taehyung contra el colchón, obligándole a quedarse quieto—. ¿Cuánto has deseado esto? Quiero escucharte.

—Cállate y jóderme. —gimió Taehyung, respirando pesado.

Jungkook tarareó en desaprobación.

—¿Qué es esa actitud de mierda, nene? —preguntó sin esperar respuesta, guiando su polla entre los glúteos de su menor, la misma perdiéndose entre las suaves nalgas cada vez que presionaba—. Joder, que gran culo. —susurró, relamiendo sus labios. Taehyung mordió los suyos, cerrando los párpados y tirando suavemente la cabeza hacia atrás mientras Jungkook frotaba su miembro contra él.

—Lo siento —se encontró diciendo, removiéndose. Jungkook le dejó (porque probablemente sabía lo que quería) y se puso sobre sus manos y rodillas, volteando un poco la cabeza para verle desde adelante—. Hyung… Lo quiero adentro. —meneó sus caderas de lado a lado, provocando.

Jungkook estaba demasiado caliente, su polla endureciéndose más si es que era posible, y no pudo evitar masturbarse mientras Taehyung jugaba con sus glúteos, meneando sus preciosas caderas.

Taehyung se sentó en la cama sobre sus propias piernas, sus pies tocando los costados de su trasero. Sostuvo el elástico de sus bragas y estiró el lado izquierdo primero, luego el derecho, mirando a Jungkook por encima del hombro con aquellos labios húmedos y brillantes en saliva.

—Papi… —llamó Taehyung, moviendo el culo de lado a lado. Eso encendió muchas cosas en Jungkook, quien se encontró aproximándose y pegándose a su espalda, su polla frotándose desesperada contra una de sus nalgas, sus manos sujetando el abdomen, rodeándole. Sus bocas se encontraron en un desordenado beso, si es que así podía llamarse a dientes, lenguas y saliva, mientras Taehyung tenía la cabeza de lado para alcanzar sus labios.

Jungkook subió sus manos y acarició sus pezones por encima de la tela de la ropa, sacándole unos cuantos gemidos que morían en su boca. Por fin, al fin estaban haciendo aquello que ambos querían desde la primera vez que se vieron.

Cuando Taehyung se separó levemente y quiso moverse para probablemente ponerse en cuatro de nuevo, Jungkook subió una de sus venosas manos y la colocó alrededor de su cuello, inclinándola hacia atrás. Jungkook respiró encima de su mejilla, y apretó la piel bajo su mano. La cabeza de Taehyung descansando sobre su hombro.

—Quieto, nene —ordenó Jungkook. Taehyung apoyó una de sus manos encima de la que presionaba su cuello, respirando por la boca—. ¿Tienes lubricante? —cuestionó, bajando para morder su hombro.

Cuando asintió, le soltó. Taehyung gateó y rebuscó en su mesita de noche, eventualmente inclinándose, por lo que un pequeño grito escapó de sus labios cuando recibió una nalgada que probablemente resonó en toda la habitación. Sus glúteos fueron cruelmente apretujados por su hermano, y mientras seguía buscando sin realmente enfocar su vista, las bragas que llevaba fueron bajadas hasta sus rodillas.

Y realmente no pudo comenzar a buscar con la lengua de Jungkook trabajando de nuevo en su culo, mordisqueándolos y jugando con su entrada, dando lamidas y besos frívolos.

—J-Jungkook… —una queja brotó de sus labios. Tenía los ojos desenfocados y levemente cristalizados, apoyado en sus codos al no poder sostenerse.

Jungkook sólo acarició la curva de su espalda arqueada, dejando un posible chupetón en una de sus nalgas. Quería marcar a Taehyung de él; completamente lleno de huellas de Jungkook.

Taehyung rodó los ojos y los cerró cuando Jungkook chupó su entrada con fuerza, mimando su espalda sudorosa.

Segundos después, Jungkook se separó y Taehyung lloriqueó.

—Vamos, el lubricante. —exigió desde atrás, dándole un golpe a su culo antes de alejarse. Taehyung no lo vio, sólo obedeció poniéndose sobre sus manos, buscando el botecito en su cajón.

Cuando lo encontró un minuto después, volteó y se lo extendió a Jungkook.

Él bombeó su polla, recostado en el respaldo de la cama—. Prepárate para mí, bebé.

Su cuerpo tuvo una sacudida, temblando en anticipación. Obediente, tiró de la ropa interior en sus rodillas y su camiseta, dejándolas regadas en el suelo. Se colocó en cuatro frente a su hermanastro completamente desnudo, escuchando a este sisear, probablemente por estar masturbándose.

—Así es, nene. Abre más tus piernas.

Y Taehyung así lo hizo, apoyando parte de su cuerpo y mejilla derecha sobre el colchón. Sostuvo el botecito cerca y lo abrió, esparciendo un poco de lubricante en sus dedos, guiándolos hacia atrás. Tanteó un poco la zona, y cuando pudo meter uno de sus dedos, gimió.

—Joder. Mete todos los que puedas para mí, bebé. —dijo Jungkook, su mano retorciéndose alrededor de su miembro, sus ojos fijos en el espectáculo.

Cinco minutos después, Taehyung tenía tres dedos dentro, entrando y saliendo con velocidad por el lubricante.

—Oh, Dios —balbuceó Taehyung con los ojos cerrados y el ceño fruncido, agilizando sus falanges, imaginando que era Jungkook. Aunque también le ponía el hecho de que estaba observándole y masturbándose por él.

Dobló y buscó su próstata, maltratándose por sí sólo, enterrando la cabeza en sus sábanas en varias ocasiones, soltando maldiciones.

El sonido de la piel de la polla de Jungkook siendo bruscamente masturbado le prendía en demasía, provocando que sus dedos se movieran en tijeras dentro suyo.

—Jungkook… —gimió en un murmullo débil, tirando sus caderas hacia atrás para que sus propios dígitos llegasen más profundo.

Escuchó movimiento atrás, pero no prestó atención, estimulando uno de sus pezones.

Su cuerpo sufrió un excitante temblor cuando unas manos fuertes deshicieron sus dedos de un movimiento brusco y rápido. Taehyung no tuvo el tiempo suficiente para reaccionar, así que simplemente se posó sobre sus manos. Jungkook agarró con una mano su propia polla y restregó el glande contra el anillo de músculos, no esperando más de tres segundos para introducirlo de una estocada, haciéndole gritar.

Jungkook gruñó, posicionando sus manos en sus caderas y apretándolas con fuerza, probablemente ante el calor envolvente alrededor de su polla.

—¡Ah! ¡Me hubieses… —no pudo terminar siquiera la oración cuando Jungkook empezó a mover su pelvis, penetrando inmediatamente duro.

Jungkook perdió el control detrás suyo, presionando jodidamente fuerte con sus dedos la piel de sus caderas. Las yemas estaban blancas por la presión, y Taehyung estaba seguro de que obtendría marcas después.

Su pene entraba y salía de su interior, y para Jungkook aquella vista era magnífica; cómo su polla se perdía entre las gordas nalgas de su hermanito.

Cuando Taehyung comenzó a gemir más alto, Jungkook volvió a tapar su boca con la palma de su mano, esta vez trayéndolo hacia atrás. La espalda de Taehyung se arqueó y su cabeza chocó contra el mentón de Jungkook.

—Mi amor… —molió su polla contra el culo de Taehyung, gimiendo suavemente tras él—, haz más silencio. No sabes cuánto querría escucharte, pero no podemos.

Taehyung cerró los ojos mientras la otra mano de su hermanastro se enroscaba alrededor de su abdomen, sus gemidos muriendo en la palma de Jungkook.

Jungkook penetró de nuevo, rápido y duro, el sonido de su pelvis impactando contra sus nalgas hacía todo más caliente. Estaban seguros que la habitación se encontraba a grados preocupantes porque todo se sentía jodidamente acalorado y caliente.

El cuerpo de Taehyung empezó a sacudirse por la fuerza de las estocadas, y Jungkook chupó el costado de su cuello cuando se inclinó. Su mano libre viajó hasta los pezones de Taehyung, estirándolos y apretándolos entre sus dedos.

Cuando fue suficiente, dejó de sostenerlo y Taehyung ocupó nuevamente sus manos cuando cayó hacia adelante, apoyándolas en el colchón. Jungkook se inclinó encima suyo, pegándose a su espalda, besando y lamiendo. Sus manos se posaron en su cintura, y sus penetraciones se hicieron lentas y certeras. Cuando Taehyung enterró su rostro en las sábanas y gritó, supo que encontró su próstata.

Jungkook se enderezó y lamió sus propios labios con hambre, la lujuria brillando en sus orbes oscuros. Posó una de sus grandes manos en el culo de Taehyung, y apretó la piel con fuerza, dejando la marca de sus dedos por unos segundos. La otra mano acarició su espalda y subió hasta mimar su cabello, antes de enredarlo entre sus dedos y sostenerlo con fuerza. Taehyung entonces salió de entre las sábanas, arqueando la espalda mientras su pelo era tirado por Jungkook.

Otra nalgada dura resonó en el lugar, y luego otra, y otra, y otra, hasta que su culo estuvo rojizo. Jungkook las vio desde arriba con sus caderas trabajando, penetrando y presionando, deseando morderlas y empaparlas de saliva para apaciguar el dolor.

Taehyung se preguntó si servía de algo ser silencioso cuando Jungkook estaba golpeando su culo con fuerza, lo que probablemente también se escuchaba. No le dio importancia en ese momento a la reflexión, porque jodidamente amaba tener las nalgas rojas por las manos de su hermano.

Comenzó a llorar en algún punto, la estimulación y la rudeza que siempre quiso en el sexo haciendo mella en él. Las penetraciones se hicieron más duras y sin piedad, halando de su cabello.

—Papi —llamó Taehyung, y la mano en su cabello se reforzó, con un apretón demasiado brusco en una de sus nalgas. Taehyung chilló—. Sí, así, papi, más duro. —lloriqueó, su cabello siendo liberado. Los brazos de Jungkook le abrazaron desde atrás, rodeando su cuerpo. Besó codiciosamente su espalda desnuda, brillante en sudor.

Taehyung empezó a empujar sus caderas hacia atrás al compás de las de Jungkook, ayudándole. Encontrándose entre sí. Jungkook molió su polla de nuevo, moviéndose en círculo mientras gemía encima de su piel, mordiendo.

—Oh, más, más. —Taehyung pidió con los ojos inundados.

—Uh, ¿Te gusta, amor? ¿Te gusta cómo te jodo el culo, mhm? —cuestionó en un murmullo, irguiéndose y posando ambas manos encima de su trasero, empezando un vaivén lento y duro, moviendo simplemente su pelvis.

—Me encanta, joder. Amo cómo me follas, papi.

Ese apodo ponía loco a Jungkook. Calentaba cada entraña de su cuerpo, cada chispa encendiéndose y su polla pidiendo más profundidad.

—¿Si, bebé? ¿Te gusta cómo te folla papi? —murmuró en un gruñido, acariciando cada fragmento de piel a su disposición, empujando con lentitud dentro.

Taehyung lloriqueó cuando volvió a encontrar su punto dulce, tirando su cabeza hacia atrás mientras arqueaba obscenamente la espalda.

—Más duro ahí, papi. Ahí. —pidió desesperadamente, gimiendo.

Jungkook mordió su labio inferior y hubiese querido jugar con él un poco al respecto, pero su jodido autocontrol estaba fuera, así que obedeció y empezó a presionar su polla contra la próstata rápidamente, el sonido de sus pieles chocando apareciendo de nueva cuenta.

Taehyung comenzó a gemir con cada estocada puesta en el lugar justo, y Jungkook lo mismo junto con sus gruñidos mientras empujaba dentro, echando la cabeza hacia atrás.

Es por eso que, cuando la puerta fue abierta y un grito estalló en la habitación, Jungkook siguió penetrando, sin importar que sus padres estaban allí, observando horrorizados y alterados lo que estaba sucediendo.

Jungkook cerró los ojos con la boca levemente abierta cuando sintió que estaba por correrse, presionando sus dedos en las caderas de Taehyung, su pelvis encontrándose con el culo y muslos de él mientras empujaba.

Los gritos de sus padres no cesaron, pero Jungkook sonrió mientras perseguía su orgasmo.

Que disfruten del show. Pensó, mordiendo su labio inferior, aún con aquel indicio de una sonrisa.

Estaba jodiendo a su hermanito tanto como ambos quisieron por un mes entero. Jodidamente a un rebelde sin causa como Jeon Jungkook, le importaba una mierda.

Y Taehyung estaba por correrse, así que sólo pudo observar con las mejillas rojas y los ojos cristalizados en placer a sus padres, su cuerpo sacudiéndose de atrás hacia adelante por las estocadas duras que no se detuvieron en ningún momento.

La culpa fuera de su cuerpo, enfocándose en las manos duras de su hermano apretándolo, en sus gruñidos bajos sin importarle absolutamente nada. En sus cuerpos encontrándose una y otra vez.

Bajó la cabeza y sonrió, sintiendo la sensación caliente en su pelvis.

Que disfruten del show.

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Decidí traerles acá "night". Espero que lo hayan disfrutado. <3

-fcksign.