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Para Isabel y Elizabeth el Otoño siempre ha sido como un gran y sabio consejero de las mejores formas posibles y en un mundo en donde como mujeres es más dificil llevar la vida ambas aprenderán de la otra. Dos polos opuestos y la llegada de una persona a sus vidas lo cambiara todo Siempre las han querido separar ¿Podrán con esto?


Drame Tout public.

#alegria #amigas #amor #drama #belleza #dolor #felicidad #feminismo #sentimientos
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Prólogo

Se tu misma

Esa fue la primera oración que María Elizabeth Alexandra Amery (hija de un militar condecorado y una madre amorosa) recuerda, una niña de cabellos negros y aspecto delicado, piel lechosa, con unos ojos verdes que eran los favoritos de la gente que quedaba atrapada en ellos, semejantes a los de un gato y unas pocas pecas cubriendo el rostro fino y afilado, su padre Ansel supo desde el primer momento que la vio que la vida de esa pequeña niña no sería fácil.

Una mujer en esa época sufría y él lo sabía, habrían hombres que querrían engañarla, que la usarían y el pequeño corazón de su bebé no daría para tanto, es por eso que él, como hombre de familia, junto a su esposa Alexandra de Amery, la criarían con todos los valores para que pudiera hacer frente a la vida.

Así que le enseñaron todo lo que ambos sabían, su madre le enseñó a leer, a escribir a cocinar, también le enseñó a no dejarse, a usar sus palabras en contra de las personas, a manipular algunos aspectos de la vida que se llevaba, mientras que su padre le enseñó a luchar, a defenderse a golpes para nunca permitir que un hombre la tocara, a no permitir que los hombres formarán parte de su vida, no como más que simples accesorios a su belleza, porque para ellos, ella era lo que era, un simple accesorio que debía estar parado.

Ella debía ser más.

Siempre a un lado, nunca atrás.

Se tu misma

Aquello que siempre le prohibieron a Isabel.

Isabel Alejandra Anthonyson, hija de un gran marqués, una pequeña niña de aspecto delicado y parecido a la porcelana, una muñequita perfecta, cabello castaño claro, ojos marrones y piel aperlada, siempre fue una niña bajita, más que los demás, su gran complejo, cuando nació se hizo una conmemoración, la primogénita de los Anthonyson y George, su padre, estaba enfurecido, él quería hombres que pudieran continuar con su legado no mujeres que se casaran con hombres y perdieran el apellido, y después de tantos intentos fallidos se resignó a la idea de tener más descendientes. Así que si no tendría a un varón, al menos tendría a una niña que se convertiría en su princesa.

Él y su esposa Alejandra se encargarían de enseñarle todo lo necesario para convertirse en una señorita educada y con modales, una de la cual se sentirían más que orgullosos cuando la vieran desposarse con un hombre rico, que estuviera a la altura de sus expectativas, que la tratara como reina y le diera todo lo que su padre le daba.

"Nunca seas tú misma Isabel, o nunca encontrarás un marido".

"Eres una rosa Isabel, bella y delicada".

"¿Y sabes para que sirven las rosas?"

"Pará estar calladas, ser disfrutadas y verse bonitas, si eres tú misma lo único que lograrás es que tal cual rosa te pudras".

28 Janvier 2021 16:30 0 Rapport Incorporer Suivre l’histoire
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