Jungkook tenía la mirada fija en la madera ¿Esto realmente estaba pasado? Todos a su alrededor lloraban, él no era la excepción.
Pequeñas lágrimas caían por sus mejillas. Esto no podía ser verdad.
El discurso de Hoseok era hermoso y muy conmovedor, pero Jungkook no podía prestarle atención, solo podía mirar aquel ataúd de madera frente él, sabiendo que lo bajarían en cualquier momento, lo cubrirían de tierra y no volvería a ver al amor de su vida nunca más.
Ya no habrán más abrazos, ya no habrán más besos, las mañanas que pasaban juntos ahora solo quedaran en su memoria, las risas, sus citas, las tardes de películas que solían tener cada viernes sin falta, ¿Cómo podría seguir ahora?.
"Jungkook" una voz se hizo presente pero él solo miraba el ataúd con sus ojos llenos de lágrimas. Una mano se posó en su hombro "Kookie, es tu turno de hablar".
Jungkook tomó la mano de Jimin quitándola de su hombro, subió al podio, miró a todos a su alrededor, todos se quedaron mirándolo fijamente, fue su pareja por cinco años y de seguro tiene mucho que decir, ¿Verdad?.
"T-Tae" su voz se entrecortó y las lágrimas comenzaron a salir con fuerza, cubrió su rostro con su antebrazo en un intento de secar sus lágrimas y recuperar el aliento, inhaló profundo y exhaló "Taehyung fue... Taehyung fue el amor de mi vida" aquel ataúd de madera se veía tan frió tan solitario.
Jimin y Seokjin subieron hasta donde estaba y ambos colocaron sus manos en sus hombros como señal de apoyo hacia el menor. Jungkook dentro de sí agradeció aquello, pues no se sentía capaz de hablar, no sentía capaz de nada ahora que estaría solo, volvió a recuperar el aliento gracias a la botella de agua que Seokjin le compartió amablemente para que se tranquilizara.
"Taehyung, t-te llevaste todo contigo..." las lágrimas salían sin parar "Te llevaste mi alma y mis ganas de vivir..." cada lágrima era acompañada de un grito de angustia, todos en el salón sintieron la pena y la angustia de Jungkook.
Seokjin abrazó al menor en intento por calmarlo pero era inútil, los gritos de Jungkook se escuchaban por todo el lugar, provocando escalofríos y haciendo que a más de uno se le apretara el pecho.
"Kookie, está bien..." Jimin le dijo mientras le acariciaba la espalda "No tienes que hacerlo" el menor asintió y bajo del podio aún en los brazos de Seokjin.
Ya que nadie más iba a hablar el entierro comenzó, el ataúd bajó y comenzaron a cubrirlo de tierra, los desgarradores gritos de Jungkook hacía que a todo el mundo se le rompiera el corazón.
La vida de Kim Taehyung había terminado con tan solo 24 años a solo un año de graduarse de la universidad, viviendo desde hace 3 años con su amado, un joven lleno de vida, sueños y esperanzas. Todo arrebatado en una noche por culpa de un conductor ebrio.
¿Tan frágil es la vida?
"¡No!" se escuchó fuerte "No te vayas Taehyung, por favor no me dejes..." Jungkook se lanzó a la tierra y abrazó lo poco que quedaba descubierto del ataúd, Namjoon reacciono rápido e intentó sacar al menor pero este estaba aferrado a la madera, su ropa estaba completamente sucia por la tierra.
"Yoongi, ayúdanos" gritó Seokjin mientras ambos trataban de sacar a Jungkook de ahí, sus gritos y sus lágrimas eran tan intensos como su agarre a la madera.
Yoongi no quería tener que hacerlo, pero sabía que Jungkook no desistiría, sabia que algo se había quebrado en la mente y en el alma del menor, que no volvería a ser el mismo. Después de todo fue él quién tuvo que darle la terrible noticia a su pequeño dongsaeng aquel día en el hospital.
Él hubiera dado lo que fuera por no haber tenido un ataque de ansiedad esa noche, Yoongi no puede borrar la imagen de Taehyung y Jimin llegando a la sala de urgencias, como médico jamás imaginó que alguno de sus mejores amigos bajarían de aquella ambulancia y que la vida de uno se iría justo frente a sus ojos, ¿Quizás si hubiera tenido los cojones de atenderlo él?
El shock del momento hizo que todos sus años de experiencia se fueran a la mierda al no ser capaz de atender a sus mejores amigos en el momento que más lo necesitaban, al verlos ahí con sus vidas pendiendo de un hilo, su respiración se cortó y no fue capaz de ir ayudar. El mayor tuvo que pedirle a uno de sus colegas que lo hiciera. Fue cobarde, y la ansiedad le ganó.
"¡Yoongi, haz algo!"exclamó Namjoon intentando sacar inútilmente a Jungkook.
Finalmente reaccionó corriendo hasta su mochila, sacando una jeringa lo más rápido posible y llenándola con suficiente liquido como para calmar o dormir a Jungkook.
"Sosténgalo fuerte" dijo Yoongi mientras se acercaba, Hoseok ayudó a sostenerlo, ya que para ser el más de joven del grupo tenía mucha fuerza.
Finalmente Yoongi logró inyectarle el medicamento provocando que Jungkook se mareara lo suficiente como para sacarlo de ahí, su ropa completamente cubierta de tierra y barro, su rostro sucio.
"Jungkook, háblame" le decía Yoongi mientras que le revisaba las pupilas con la linterna de su celular. La presión del momento hizo que el joven médico no calculara bien la dosis provocando que el menor se durmiera profundamente.
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