AA Partager

Disciplina

El día de hoy charlé por teléfono con una buena amiga por horas; hacía tiempo que no hablábamos y teníamos tanto que decir, aunque la intención de la llamada no era precisamente contarnos la vida, terminamos como buenas amigas dándonos consejos una a la otra.


Por un momento me desahogué sin querer, y de pronto me escuché decir tantas veces "no puedo", que hasta me caí gorda. Encontraba una excusa tras otra y la siguiente parecía mejor que la anterior. De verdad, admiro la voluntad de ella por continuar escuchando del otro lado a una mujer que estaba muy cómoda dejando la vida pasar sin hacer lo que más ama, pasar tiempo de calidad con su hija.


Fátima tiene casi 3 años, vivo con mi esposo, a km de distancia de nuestros padres, y en ésta época de pandemia, a él le ha tocado salir a trabajar y a mí la fortuna de hacer Home office. Para mí es difícil a veces por que los horarios de trabajo se deben conservar y las reuniones por video no pueden posponerse, mis colegas ya conocen a mi hija por tantas interrupciones que he tenido que hacer por atenderla. No me quejo, me gusta estar en casa y me gusta estar con ella, pero eso no quita que esto sea difícil.


Sin embargo, durante éste tiempo pude observar a mi hija por más tiempo, la veo jugar y llorar y reír y esto me llena el alma de felicidad y a la vez de angustia, por que quiero hacer más actividades con ella como leer juntas un libro, contarle cuentos, enseñarle el vocabulario y me he sentido atada por que siempre tengo algo que debo terminar primero y cuando volteo, el reloj avanzó con gran rapidez que eso debe esperar hasta mañana. Sencillamente estoy viendo su vida pasar sin involucrarme tanto. Creía que, el no dedicarle tiempo de calidad era debido a tener una rutina larga al salir de casa a diario, dejarla en la escuelita, llegar ya tarde y solo dormir. Estaba convencida de que haciendo home office aprovecharía mis horas al máximo, por que evitaba perder gran parte de mi tiempo en el tráfico.


Fue durante la conversación con mi amiga que noté algo que me llevó a tomar la decisión de mejorar mis rutinas, por que nada de eso se debía al tráfico, ni a estar en casa trabajando me daba más tiempo con ella, todo se debía a mi. Recuerdo que me dijo unas palabras ,que me retumbaron como un tambor ensordecedor, "disciplina", lo dijo solo algunas veces pero con mucha fuerza, y yo estaba tan negada, explicándole mis múltiples actividades que llegó un momento en que pensé, "debemos terminar esta llamada". Le agradezco tanto por que me conoce y sabe que puedo ser testaruda.


En la búsqueda de mi desarrollo personal identifiqué algo que me ayudó a crecer y modificar mis conductas, "ser consciente"; en ese momento, noté que estaba pensando sin ser consiente y me detuve un poco, comencé a escuchar con mejor claridad.

Sus palabras fueron: "cuesta trabajo, es muy difícil, por que al principio vas a caer muchas veces y pensarás, ¿por qué hacerlo?, ¡nadie me ve!, y querrás volver a no hacer nada. La disciplina es un hábito, ¡tienes que tener un buen hábito para dedicarle esos momentos a tu hija!".


Me daba miedo pensar que, estaba en mí poder tener más horas en ese reloj, más tiempo con ella, y la fórmula era tan simple, disciplina. Entonces modifiqué mis hábitos, me costaba mucho trabajo despertar dos más temprano, hacer ejercicio junto con ella para enseñarle que debemos cuidar nuestro cuerpo, planear actividades creativas para instruirla, priorizar mis actividades por que había algo que seguro tendría que dejar de lado, terminaba mi jornada cansada, y al día siguiente era muy pesado despertar mucho antes, me ponía de malas, pero lo logré.


Lo cierto de todo es que, a veces no nos damos cuenta que un simple hábito puede cambiar por completo nuestra vida, y que la disciplina nos lleva a que ese hábito siempre se lleve a cabo, por más difícil que sea; en los momentos en que quería dejar mis hábitos recordaba a mi gran musa, mi hija y los momentos que disfrutaría con ella, todos esos momentos que convertiría en recuerdos, para cuando yo ya no esté aquí.


Mi disciplina sigue siendo una lucha constante contra mi más grande enemigo, yo misma.







4 Avril 2020 00:24 0 Rapport Incorporer 0
~
En savoir plus Page de démarrage 1