Era un día lluvioso, estaba en un parque muy tranquilo y relajado, de pronto se me vino a la mente entrar a bañarme, abrí la llave de la regadera y me empece a bañar, estaba todo bien hasta que, estaba tranquilo cantando con los ojos cerrados, en ese mismo instante sentí como si el agua estuviera en mis pies, baje la cabeza y había un gran mechón de pelo enredado en el sifón, trate con todo lo que tenia en el baño para tratar de quitar ese mechón de pelo que tapaba el sifón pero no lo logre, luego de ver que no fui capaz de hacer eso trate de cerrar la llave del agua pero estaba muy floja cuando entre y con tantos nervios que tenia la rompí, quede en shock, no sabía que hacer, estaba encerrado, había que pedir a alguien que me abriera la puerta ya que el baño no tenia como abrirse por dentro, empece a gritar desesperado tratando de que alguien me escuchara, lo logre, me escucho la dueña del baño, el agua ya iba por mis rodillas, estaba asustado, no sabia que hacer, trate de explicarle de la mejor manera lo que estaba pasando, la dueña del baño fue rápido a llamar a los plomeros, pero, sonaba y sonaba, siempre le respondía que el número se encuentra ocupado, la dueña me dijo que me tranquilizara, pero era muy difícil en tales circunstancias, estaba temblando, paso muchas veces por mi cabeza el pensamiento de que moriría... El agua iba ya por mi cintura entonces decidí rendirme, aceptar que moriría, jamas pensé que mi final seria de esta forma, ahogado, entonces retome fuerzas, se me ocurrió colocar en la regadera mi camisa para que el agua no saliera tan rápido y se llenara tan deprisa el baño, lo logre el agua estaba dejando de salir tan rápido, me sentí muy aliviado, aunque el problema no había acabado. En un momento escuche la voz de la señora diciéndome trate de jalar la puerta hacia donde esta usted, la ayudare junto con unos hombres a tratar de sacarla, porque mis llaves se las llevo mi hijo, me sentí salvado, sentí que ya iba a salir de ahí, trate con todas mis fuerzas de jalar, afuera hicieron todo lo que pudieron empujando pero no lo lograron, sentí que el mundo volvió a venirse abajo otra vez, pero, NO ME RENDIRÍA, estuve tan cerca de salir que seguí jalando la puerta sentí como si tuviera algo pesado de mi pecho para abajo, mire y tenia el agua ya en mi pecho, grite con todas mis fuerzas: !! AYUDA !!, el agua esta haciéndose más y más alta, rápido, pidan ayuda. Entonces de repente se escucho un estruendo en la puerta, eran los plomeros, habían llegado justo a tiempo, tenia el agua en el cuello, sentí que viviría para contarlo, de repente tumbaron la puerta y salí junto con toda el agua, me levante lo más rápido que pude y le di las gracias a los plomeros por habermen salvado. Luego llego una ambulancia, los plomeros se encargaron de la llave y la regadera, la ambulancia me llevo a un hospital para mirar como estaba y así fue como logre sobrevivir a una muerte casi segura, jamas olvidare esos momentos, nunca había experimentado ese miedo a quedar ahogado en algún lugar, y siempre estaré preparado para cuando sucedan eventos de ese tipo, no quiero volver a experimentar ese miedo que sentí, siempre estén preparados que nunca saben cuando estarán tan cerca de la muerte y con ese miedo.
FIN.
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