Martín estaba caminando hacia su casa después de un largo
día de trabajo. En el camino, tropezó y cayó en un agujero desconocido.
Mientras trataba de levantarse, escuchó el graznido de un cuervo que estaba
posado en un nido cerca del agujero.
Martín intentó levantarse varias veces, pero cada vez que lo
hizo, el cuervo graznaba con más fuerza y el nido se volvía más grande, como si
quisiera atraparlo en el agujero.
Comenzó a sentir cómo poco a poco el agujero comenzó a
llenarse con un líquido viscoso y oscuro. El olor a azufre y a putrefacción se
hizo cada vez más fuerte y pronto Martin tuvo la sensación de ahogarse. No era
capaz de ver nada y el goteo constante e incesante del líquido incrementaba su
miedo y su sensación de impotencia.
Era como si el agujero quisiera tragárselo vivo.
Gracias por leer!
Podemos mantener a Inkspired gratis al mostrar publicidad a nuestras visitas. Por favor, apóyanos poniendo en “lista blanca” o desactivando tu AdBlocker (bloqueador de publicidad).
Después de hacerlo, por favor recarga el sitio web para continuar utilizando Inkspired normalmente.