jeon-cookie • jeongguk harem Seguir historia

Sonrió para si mismo mientras pasaba sus manos llenas de crema por la lechosa piel de sus clavículas, con aquel olor característico a avena que tanto le gusta a sus hyungs.

Tomó su tiempo para masajearse los hombros y cuello, asegurándose así que el dulce aroma se mantenga por más tiempo impregnado a él.

Revisó por última vez frente al espejo su figura, encantado consigo mismo por cómo lucía, y ansioso de que los contrarios le vean con aquellos ajustados encajes adornando la parte baja de su menudo cuerpo.

—Lamento haber tardado mucho hyungs —indicó con un dulce tono mientras se adentraba a la sala del departamento, dónde los contrarios se hallaban formando un semi círculo.

Contuvo un ahogado gemido dentro de su garganta cuando con la vista recorrió cada uno de los prominentes bultos en los pantalones de los mayores.

Estos últimos no lograban atinar a decir algo, demasiado concentrados en comerse a Jeongguk con la mirada como para realizar alguna otra acción.

Entre ellos fueron cerrando el círculo para que el menor quede en medio de ellos, con Hoseok alcanzando a pellizcar el glúteo derecho de Jeon antes de que este se alejara lo suficiente.

—¡Hobi hyung! Eso está prohibido y lo sabes... —mencionó Guk con un puchero apareciendo por sus labios, imitando enojo mientras veía al mayor sonriendo por su linda reacción.

—Bueno... cómo todas las semanas, tengo que repetir una vez más las reglas porque tal parece que siempre a alguno de ustedes se les olvidan cuáles son —Con un ademán de mano les pidió que se acercaran más hacia él, Jeongguk comenzó a agacharse hasta encontrarse arrodillado frente a sus hyungs; encantado de verles desde ese punto de vista.

De esa forma se sentía más sumiso, más complaciente para los contrarios.

Se apresuró en indicar, de esa forma no tendría que esperar más para poder tener las pollas de sus mayores directo en su pequeña boquita.

—Regla número uno... No pueden tocarme, ni el cuerpo, ni el rostro, cabello... Nada. Recuerden que el que lo haga durante el juego será descalificado directamente... así no haya alcanzado el orgasmo todavía.

Mientras les hablaba, procedía a acercarsele a cada uno, desabrochando el botón de sus pantalones y bajando el cierre de estos para permitirles sentir algo de liberación.

Empezó con Namjoon, que no logró contener el ronco suspiro cuando se encontró con solo su ropa interior cubriéndole el pene, y las delicadas manos del azabache sobre sus fuertes muslos ya habiando bajado su jean.

—Regla número dos... Sus pelvis no podrán moverse para follarme la boca, aunque creería que no les convendría de igual manera ya que lo que quieren es aguantar lo más posible por no correrse...

El siguiente en ayudar fue Jimin, al cual gateó unos centímetros para poder situarse de forma correcta debajo de él, este gimió cuando de imprevisto tocó sin querer por encima de la ropa interior su polla... así como con Nam; dejándole el ajustado jean con huecos por debajo de las rodillas.

—Regla número tres... No podrán reclamar si le presto más atención a una de sus pollas o por coincidencia terminan corriéndose al haberles dado por más tiempo o no una mamada; cuando estamos jugando les prometo que no veo nada y lo único que quiero es engullir sus pollas hyungs, no veo a quien le pertenece... —El tercer mayor al cual ayudó a quitarle la presión ahí abajo fue Yoongi, encantado como siempre cuando sus manos quedaron marcadas en la lechosa piel de los muslos contrarios— De igual manera trataré de ser lo más justo posible y no regresaré a uno de ustedes hasta que haya jugado con el resto de los cinco. Aunque no prometo nada... —indicó con un sonrojo imaginando ya los miembros de los demás siendo atendidos por su boquita.

—Regla número cuatro... —Continuó mientras se arrastraba hacia Seokjin— Esta es sencilla. Yo soy el que decide en qué parte de mi cuerpo eyaculan, no podrán controlar la dirección moviendo su pene o apuntando en un lugar específico... —Le guiñó a Jin cuando desamarró el calentador que portaba y logró ver la cabeza de su polla mostrándose orgullosa detrás del blanco calzoncillo, el cuál se volvía transparente en aquella parte por la cantidad de pre semen segregado— Durante ese momento sus manos dejarán de tocar por obligación su polla y me dejarán el trabajo a mi, ¿De acuerdo? —Sonrió al recibir una respuesta afirmativa al unisono por parte de todos.

—Regla número cinco... Es obligatorio que, mientras yo no les esté dando atención a sus pollas, deban masturbarse con movimientos continuos y no podrán parar hasta que yo nuevamente me haga cargo de ustedes. —Continuó con Hoseok, acariciándole el vello de las piernas ya que era el que más largo se lo dejaba, y al igual que Jin usaban solamente calzoncillos y no bóxers, haciendo que el bulto se le vea más prominente al tener menos espacio— Por más que quisiera, solo tengo una boca y dos manos así que no podré con los 6 al mismo tiempo.

—Regla número seis pero no menos importante... —dijo mientras gateaba dónde Taehyung, primero quitándole la correa del pantalón de vestir que cargaba. Siempre tan sexy en su ropa formal— Si pierden automáticamente deberán alejarse del círculo y esperar a unos metros, cuando quede solo uno que es el que me usará por completo... tendrán que verle mientras me folla. —La fina tela al desabrochar el cierre cayó por completo al piso, dejando ver con notoriedad el grueso y grande miembro del castaño queriendo salir disparado del estrecho bóxer.

—Muy bien hyungs, ahora que todo ha quedado claro... —indicaba mientras se posicionaba nuevamente en el centro, y con el dedo índice les pedía que se acercaran aún más, prácticamente no dejando espacio alguno para que él pueda moverse; les exigió bajar su ropa interior... deleitándose con las seis hinchadas carnes brincando de un lado a otro por la rapidez usada por los mayores— Seré su deliciosa galletita, así que traten de aguantar lo que más puedan porque seis tendrán que bañarme de su leche... pero solo uno podrá llenarme de ella hoy.

Jeongguk inhaló con ímpetu el aire cuando tuvo los seis penes casi que encima de su rostro, deleitándose del fuerte aroma que emanaban y gimiendo al suspirar.

Empezó tomando los miembros de Yoongi y Seokjin con sus dos manos respectivamente, y escogiendo a la polla de Nam dónde usaría su boca por primera vez en el día.

Los otros tres por inercia empezaron a tocarse, creando un controlado movimiento con sus propias manos.

Jeon comenzó dando pequeños toques con su mojada lengua sobre el prepucio de Joon, para luego situar sus dos labios sobre la fina piel y agachando la cabeza por inercia el poderoso falo iba ingresando en su estrecha boca, de la cuál se ayudaba para descubrir el glande poco a poco mientras seguía metiéndoselo.

Sus pulgares se movían de un lado a otro sobre los circuncidados penes de Yoon y Jin, usando el líquido pre seminal para estimular más específicamente la sensible cabeza de su intimidad.

Guk en ningún momento dejó de ver fijamente a los ojos a Nam, mientras con facilidad seguía engullendo los centímetros de su sexo, para luego retroceder rápidamente dejando el tronco y cabeza empapados de espesa saliva, la cuál usaría en las siguientes arremetidas para mayor facilidad.

Chilló de alegría al ver cómo el miembro de su hyung se movía de arriba a abajo por ser atendido nuevamente, empapando sus labios para seguir con el cometido.

—¿Ya te dije cuánto me gusta lo curvado de tu polla Namie? —indicó mascullando sobre el rosáceo glande, para luego hacer desaparecer toda la extensión de una sola, soltando una arcada cuando la punta gracias a la curvatura, tocó la pared de su garganta cuando llegó al final.

Su segundo hyung más mayor es uno de los que siempre se afeita la pubis por completo, haciendo que su nariz entre en contacto con la lisa piel de esa parte, estimuló un poco sus testículos tratando con todas su ganas de sacar lo que más podía la lengua hacia abajo; rozando la sensible piel de las bolas de Nam y haciéndolo gruñir por la sensación palpada.

No dejó tampoco tranquilos a los otros dos, ya que con su índice empezó a urgar en el meato urinario de estos, sacándoles guturales gemidos y haciéndoles segregar más pre semen.

—Pasas... a la siguiente ronda Nam —Le mencionó tratando de recobrar la respiración, luego de tener su polla entera metida en la boca por casi un minuto sin chistar y dejársela chorreando de su saliva.

El mencionado suspiró aliviado mientras tomaba nuevamente posesión de su extensión y empezaba a masturbarse, al igual que Jin y Yoongi cuando dejó de tocarles.

Guk sonreía en todo momento sintiendo la potente mirada de todos en una suyo, y antes de proseguir con los otros tres, se despojó de su ropa interior dejando ver su lindo y rosado pene al igual de duro que los demás.

Prosiguió con Hoseok, y ahora usando sus manos para tocar los miembros de Tae y Jimin; estos dos exhalaron bajito cuando sintieron las tibias manos de Jeon sobre sus falsos.

—Esta primera vuelta será muy fácil pasarla Hoseokie... —Aseguró sonriéndole, antes de agacharse más para pasarle la lengua desde debajo de los testículos, recorriendo toda la parte baja y esponjosa de su verga hasta llegar a la necesitada cabeza.

La cuál aprisionó con delicadeza usando sus finos labios y aplastando esta una y otra vez recibiendo aquel transparente y viscoso líquido que tanto le encanta saborear.

Jung gruñó mientras alzaba sus brazos y posicionaba las manos detrás de su cuello, inclinado su cuerpo hacia delante para entregarle su delgada polla al menor.

Guk solamente se la metió hasta la mitad, ya que de esa manera su lengua tenía más soltura para poder estimular la circunferencia en su totalidad.

Con sus dos hyungs menores en cambio jugaba más con los testículos de estos, apretujando y aplastando con la palma de sus manos por varios segundos, creando espasmos en la parte baja de sus cuerpos.

La segunda vez que se metió la extensión de Hoseok lo hizo hasta el fondo, pudiendo sentir cosquillas en la nariz con el vello que crecía, al parecer se había rasurado hace días y estaba volviendo a crecer... al reírse le enviaba aún más corrientes de placer al sexo del mayor; quien gimió sin vergüenza dentro de las cuatro paredes frente a todos.

Guk le regaló una enorme sonrisa cómplice al inclinarse hacia atrás y sin su polla en la boca, sabiendo que si seguía de esa manera no aguantaría demasiado.

—Fui condescendiente Hobi hyung, la próxima no lo seré tanto...

El mayor respiraba pesado, pero sobretodo aliviado de haber aguantado lo suficiente como para no venirse. Pasó saliva por su garganta cuando le tocó palpar ahora su sensible miembro; empezando con la mano un lento vaiven para evitar eyacular.

El siguiente a continuación fue Jimin, y usando la mano que tenía puesta en él pasó a colocarla sobre la gorda cabeza del sexo de Namjoon, restregando ahí su palma una y otra vez; la otra mano continuaba sobre Tae, haciéndole gruñir más alto cuando juntó su pulgar con el índice y usó el círculo que estos dos dedos formaban para pasar por ahí dentro la prominente polla de Taehyung.

Todo mientras mordía levemente el prepucio de Jimin, el cuál se caracterizaba por ser el más elástico y el que más piel poseía de todos.

—Esto te gusta mucho, ¿Cierto Jimin-ah? —preguntó entre dientes de forma burlesca, viendo cómo el mencionado se pasaba la lengua por los labios antes de morderse estos para no gemir tan fuerte.

Al dejar la piel estirada pudo jugar un poco con la cordura de Park, metiendo la punta de su lengua dentro del pequeño hueco hasta entrar en contacto con el rosado y necesitado bálano.

Moviendo su lengua dentro de la apretada cavidad y palpando la circunferencia del sexo contrario. Jimin esta vez no contuvo el sonido de placer que su garganta emitió por varios segundos, dejándose llevar y echando la cabeza hacia atrás para palpar por completo la situación.

Guk siseó sobre su miembro pidiendo calma y contradiciendo aquello introdujo toda la extensión dentro de su boca, ayudándose con la lengua para retraer el prepicio completamente y permitiéndole al glande de su hyung sentir su estrecha y caliente garganta.

Recibió como respuesta a las piernas de Jimin temblando hasta que sacó de su garganta el pene de este; saboreó su paladar lleno de pre semen y abrió-cerró la boca continuas veces sintiendo como se formaban pequeñas burbujas.

Prosiguió con Yoongi, y escuchando los suspiros de alivio de Nam y Tae cuando dejó de estimular sus rojizas pollas.

Centró la atención de sus dedos sobre los miembros de Hoseok y Seokjin, apretando y soltando repetidas veces las puntas de estos simulando embestidas.

Con el Pene de Yoon jugó de diferente manera, moviendo la cabeza de atrás hacia adelante y cada que regresaba para meter la dura polla en su boca, aprovechaba para ir engullendo más y más centímetros.

Le encantaba hacer eso con el sexo de Yoongi ya que la anchura de su carne va aumentando conforme vas llegando a la base; volviéndose fácil darle placer a su glande pero difícil para hacer que quepa toda en tu garganta.

Los ojos de Jeongguk se volvieron blancos cuando en la última arremetida pudo engullirla toda, encantado de sentir sus labios doliendo al ser estirados con fuerza; olfateando los vellos de la pelvis contraria y restregando ahí la nariz reiteradas veces sin vergüenza alguna.

Aguantó por algunos segundos antes de que su garganta empezara a hacer arcadas, sonriendo al sentir como los chorros de saliva caían desde el estimulando glande hacia su muslo, agachando la mirada y viendo a su propio miembro temblar; reclamándole por ser atendido.

Antes de que se acercara dónde Seokjin para usar su cavidad bucal en él, su mano izquierda sintió los ya conocidos espasmos provenientes del cuerpo de Hobi, el cuál comenzó a temblar justo antes de que Guk sacara su mano de su pene.

—¡Mierda! Jeonggukie... Yo... —Trataba de articular alguna palabra volviéndosele imposible, extasiado por el inesperado orgasmo que se avecinaba.

El mencionado se movió rápido usando sus rodillas, controlando la dirección del semen que salió disparado a chorros sobre su rostro... fascinado por lo tibio y espeso pero triste al mismo tiempo de no poder disfrutar más el sexo de Hoseok.

—Hyung... —indicaba con un apagado tono, mientras chupaba la cabeza y succionaba lo que más podía de la polla contraria, dejándola sin ningún rastro de esencia cuando acabó y oyendo los sonoros gruñidos al brindarle aquella deliciosa sobre estimulación— Me encanta tu semen hyung, pero lamento tener que decirte que eres el primer perdedor de esta semana.

Señaló con su mano los muebles que se hallaban a unos metros alejados de ellos, viendo cómo el contrario se reprochaba a él mismo mientras se acercaba a estos para sentarse y esperar.

Los demás sonrieron cómplices, felices de saber que faltaban cuatro más por vencer. Estos achicaron más el círculo al ya no tener a Hoseok jugando con ellos para facilitarle al más joven el traslado de hombre a hombre.

Guk contuvo sus ganas de acumular los chorros de leche que se hallaban por todo su rostro para tragarlos de una, moviéndose rápido hacia Seokjin para no hacerlo ya que por regla, los orgasmos de cada uno debían mantenerse sobre su menudo cuerpo hasta que exista un ganador.

—Seokjinie hyung, mi boca está lista para recibirte... —aseguró mientras limpiaba solo un poco el semen de Hoseok que cayó en sus párpados para observar mejor, esparciendo este por sus manos sintiendolas un poco pegajosas.

Las cuales colocó ahora sobre los falos de Yoongi y Jimin, usando su dedo pulgar sobre el lado inferior de sus glandes para dar masajes circulares en aquella zona. Estos comenzaron a respirar pesado, aquella parte demasiado sensible el menor la estimulaba muy bien a decir verdad; cerraron sus ojos y lograron aguantar por los siguientes minutos.

Por su parte, la boca de Jeongguk se hallaba generando obscenos sonidos mientras el mismo se auto follaba los labios con el regordete glande del mayor de todos. El miembro de Jin era otro pene curvado pero a diferencia de Namjoon, su cabeza era más gruesa cosa que le dificultaba de diferente manera el engullirlo por completo.

Aún así, hacía de las suyas succionando con todas sus fuerzas, haciendo que su garganta se contraiga una y otra vez envolviendo el delgado y largo pene de Jin con una calidad inexplicable.

El mayor añoraba con demasiadas ganas usar a su antojo la pequeña garganta contraria, cerrando los ojos y colocando la cabeza hacia atrás trató de sobrellevar la situación; ayudándose de sus manos las cuales colocó arriba de sus glúteos para inclinar su cuerpo al igual que su cabeza...

Cuando la tráquea de Guk entró en contacto con la punta de su polla no supo ni entendió que se apoderó de él. Quizá fue la sonora arcada que el menor soltó, o el simple hecho que se estaban demorando demasiado que otras veces y su paciencia era nula para ese momento, y teniendo aquella estrecha cavidad a su poder estaba seguro que no habría persona alguna capaz de aguantar.

Lo próximo que sintió fue como su cadera follaba salvajemente la garganta del pelinegro, soltando gemidos cada que mascullaba su glande una y otra vez; golpeando aquel cálido punto final hasta donde alcanzaba a dar con los centímetros de su extensión.

Podría jurar que le salieron lágrimas de tanto placer palpado, rompiendo las reglas y agarrando de las mechas de cabello al menor, impidiéndole sacar su pene de su boca; no tenía nada que perder ya y al menos quería obligarle a tragarse su esencia.

Guk no podía safarze del fuerte agarre contrario y por más que lo estaba disfrutando, debía hacer que el mayor eyacule sobre él, más no dentro... así que cuando este creyó que había ganado, pese a lo mucho que le gustaba la cálida y viscosa sensación en su garganta; hizo lo imposible por mantener los chorros dentro de su boca y no dejándolos bajar por su tráquea.

—¡Demonios Guk! —gritó Jin al sentir como la experimentada lengua del mencionado comenzó a lamer su glande, sobre estimulándole y succionando hasta la última gota de su orgasmo.

Con los ojos bien abiertos cuando se dio cuenta que Jeongguk dejaba escurrir por la comisura de sus labios su corrida, recorriendo su mentón y cuello para crear lineas blancas sobre su pecho y abdomen.

—No puedo decir que no lo disfruté hyung, porque sabes que me encanta ser dominado... —dijo el menor pasándose la lengua sobre los dientes, sonriendo antes de seguir hablando— Pero lastimosamente perdiste así que tendrás que esperar con Hobi hyung por allá. —Usó dos dedos de cada mano para esparcir el semen de Jin aún más, contento de ver qué estaba avanzando con su cometido.

Esperó que Seokjin se encuentre al lado de Hobi, viendo cómo se daban un puño amistoso entre ellos al verse en la misma situación.

Guk giró la cabeza con dirección a Tae, entrecerrando los ojos de manera pícara y viendo cómo este le otorgaba una socarrona sonrisa esperándole arrodillado debajo suyo.

—Taehyungie~ eres el último de esta primera ronda... —Cuando se halló cerca escogió a Namjoon y Jimin para masturbarles, siendo más rudo esta vez con los dos, moviendo a mayor velocidad sus manos de un lado a otro.

Jeongguk tragó saliva antes de meter la palpitante carne del castaño en su boca, empezando por la carnosa cabeza que se encontraba ahorcada por el prepucio contrario... se ayudó en primer momento de sus labios, los cuales usó para retraer la piel dejando así el orgulloso glande que segregaba pre semen a cada segundo.

Inhaló lo que más podía de aquel obsceno olor que la verga de Taehyung siempre emana, excitándose rápidamente de tan solo imaginar ahogándose con la enorme polla del contrario.

Tae sabe lo grande que es su pene, la razón del hecho que este sea tan arrogante con el menor, porque de todos era el que nunca había podido engullir hasta el final su sexo; siempre terminando ahogándose o llorando.

Jeongguk cruzó miradas con Kim, viendo cómo este alzaba sus cejas expectante por recibirlo con su polla.

—Siempre tan seguro de ti mismo Taehyungie hyung, solo porque la polla te acompaña... —El mencionado sonrió cómplice, seguro del auto control que tenía para con Jeongguk.

Minutos después, dentro del departamento lo único que se podía oír era a la tráquea del pelinegro siendo maltratada una y otra vez por la venosa verga de Taehyung.

Jeon irritado por no poder meterla por completo dentro de su garganta, llorando por el dolor que la gran extensión le causaba y al mismo tiempo llegando a la cima del éxtasis sintiendo como la palpitante carne se movía dentro de su boca por la estimulación brindada.

Guk podia jurar sentir la sangre circular por las prominentes venas del sexo contrario, tomándose unos segundos para palpar aquel emocionante suceso; mientras sus labios se hallaban lo más estirados posibles causándole dolor de tener que soportar tanta anchura.

Maldecía internamente porque la gorda punta de Kim le golpeaba la parte trasera de la garganta, y aún así le faltaba trayecto para poder albergar todo el falo y aquello le irritaba de sobremanera.

Lo sacó rápidamente teniendo que aclarar su garganta porque ya no podía aguantar más en aquella posición, moviendo hacia un lado la polla y enterrando su nariz en la velluda pelvis de Tae, sacándole una pequeña risa al contrario...

Kim sabe cuánto le encanta a Jeon oler aquella parte, pero sobretodo le gusta cuando lo puede hacer mientras tiene el pene del contrario en su boca metido hasta el fondo, así que al saber que con él no puede hacerlo sino que debe primero sacarse su polla de la boca para luego ir por su pelvis... le aumentaba el orgullo bastante no podía mentir.

Guk movía la cabeza frenéticamente, tratando de llenar su olfato con aquel lascivo olor... embarrándole de saliva al contrario y por lo consiguiente su propio rostro, importándole poco su imagen en aquel momento.

La segunda ronda comenzó y para esta parte el pelinegro chupaba y tocaba con frenesí cada una de las cuatro pollas... en intervalos realmente cortos de segundos pasaba de un miembro a otro y de igual manera lo hacía con sus manos.

Cada extensión se hallaba completamente mojada de su cálida y viscosa saliva, volviéndosele fácil el poder masturbarles, y sobretodo con la intensidad en la que lo hacía.

—¡Córranse sobre mi cuerpo hyungs! Por favor no dejen ni un solo espacio de mi sin ser pintado por su leche... —Los mencionados gemían en respuesta, con su parte inferior inclinada hacia delante y permitiéndole al menor tomar posesión de sus falos.

El siguiente en sucumbir ante la surreal experiencia fue Park, cuando por error agachó la mirada unos segundos y vio el rostro de Jeongguk mientras le chupaba la polla con agresividad.

La frente llena de sudor al igual que su cuello, las finas y delicadas facciones del menor rojizas por el arduo trabajo realizado... llenas de saliva y fluidos de su pene y de los demás, todo junto con la obscena y sexual expresión que el contrario me entregaba.

Sus labios envolviendo su verga deformándolos cada que llegaba hasta el final de esta, los ojos hacia atrás de tanto éxtasis entregado... combinado con los sucios sonidos que generaban sus cuerpos al entrar en contacto.

Jimin mordió su labio inferior y cuando supo que ya no podía aguantar, obligó al menor a mantener su pene dentro por varios segundos; agarrándole fuertemente de la negra cabellera con fiereza... y empujando sus caderas hacia delante creyendo que así podía meter más dentro de la caliente cavidad; incluso cuando ya no había nada más que meter.

Jeongguk se agarró de las pantorrillas contrarias, y logrando zafarse del agarre pudo posicionar su cabeza justo cuando el sexo de Jimin no pudo soportar más y empezó a disparar chorro tras chorro de la blanquecina esencia.

El pelinegro trataba de regular su respiración, sonriendo tímidamente cuando el semen empezó a chorrear por todos lados sobre su cuerpo... sintiéndolo descender por su cuello hasta su espalda, y observando de reojo como caía por sus orejas hasta sus hombros y clavículas.

—Graciar por la ducha Jimin-ah, ahora necesito que esperes con los demás por favor... —Le indicó al mayor mientras acariciaba el ya flácido glande con sus labios, quitando de este el último rastro de semen para tragarlo.

Observó cómo le hacía caso, enojado consigo mismo y mostrando su frustración cuando llegó con sus otros hyungs, haciéndoles reír viéndose en la misma situación que él.

—Será más difícil a partir de ahora hyungs, espero puedan soportar bastante... —Aseguró con elocuencia a los últimos tres que aún se mantenían en pie.

Los gruñidos que se oyeron los siguientes diez minutos eran música para los oídos de Jeongguk, los tres varones mantenían las manos sobre su cintura puesto que el pelinegro se encargaba de masturbar a dos mientras en el último usaba la boca.

Y a los tres les hacía lo mismo pero usando su boca en uno y sus manos en los restantes... Sobre estimulaba el meato urinario de sus tres hyungs; Metiendo la punta de su viscoso músculo bucal en aquel sensible hueco una y otra vez mientras aceleraba la respiración, para que su cálido aliento le ayude a crear más placer en el pene de Namjoon.

En Yoongi y Tae se encargaban sus índices, moviendo con frenesí lo poco que podía meter ahí sus dedos, usando la suficiente fuerza como para separar en dos la parte final del glande...

Cuando pudo percibir que las grandes piernas de Joon comenzaron a temblar, supo que era el fin para él; se inclinó hacia atrás sin sacar sus dedos de los penes contrarios y solo bastaron segundos después de que hizo aquello para recibir la lluvia de esencia que la polla de Nam comenzó a eyacular.

Guk tenía los ojos entrecerrados mientras observaba el gran cuerpo de su hyung estremecerse una y otra vez mientras la corrida tomaba lugar, esta cayó sobre su rostro, torso y muslos... terminando de pintar las partes restantes del frontal de su cuerpo con aquel manjar.

Y antes de que pudiera decir algo, su índice izquierdo pudo percibir espasmos, tomándole por sorpresa cuando el dueño de aquel falo empezó a orinar de la nada, no pudiendo aguantar la bendita sobre estimulación que Jeongguk le estaba brindando a su sexo.

El menor comenzó a reír cuando la orina comenzó a salir con semen, disparado para todos los lados posibles gracias al dedo de Guk tapando la salida de los fluidos.

—Yoongi hyung, no se supone que debías perder de esta forma... —Le reprochó a modo de burla, parpadeando cuando un poco del líquido amarillo cayó sobre sus pestañas; y acercándose rápido luego de quitar su índice para recibir todo en su boca.

Colocó con fuerza sus dos manos sobre los pálidos muslos y movía la cabeza hacia la dirección de la corrida con meado para acaparar lo último que Yoongi podía soltar; hasta tomar con su juguetona boca la verga de este para tomarle como si de bebida se tratase.

Min vio estrellas cuando el paladar y lengua de Jeon envolvieron su sensible miembro, pudiendo sentir calambres en el abdomen de tanto placer sentido, escuchando cómo la garganta del pelinegro creaba aquel singular sonido cuando su orina pasaba por la misma para seguir su trayecto hasta el estómago de este.

—Mierda, Jeongguk... —habló cómo pudo, temblándole la voz y el cuerpo al sentir la boca del mencionado aplastar su glande suavemente.

—Mmh, debo dejarlo muy limpio hyung... siempre hay que limpiar bien tu polla luego de orinar —mencionó con una gran sonrisa, subiendo su ropa interior por completo para luego dar una breve palmada sobre el miembro ya cubierto— Realmente pensé que ibas a ganar hoy Yoongi hyung... Pero gracias por la lluvia dorada, hace tiempo no recibía una y aún mejor no una como la tuya.

El pelinegro se acercó a Nam, para succionar también su ahora flácido miembro y recopilar lo más que podía de su esencia, viéndole temblar al chupar la ya arrugada cabeza con ganas hasta sacar la última gota... y sintiendo como poco a poco iba creciendo de nuevo el sexo de este. —Hey, ya perdiste Namie... no te haré correr de nuevo por mucho que quiera... —Le dijo mientras hacía la misma acción con él, ocultando el ya semi erecto pene detrás de sus boxers.

Palmeó el piso con dirección a los muebles, escuchando suspirar a los dos mientras se dirigían con los demás, alzando sus pantalones en el trayecto.

Jeongguk situó su mirada en el único varón que quedaba junto a él, divisando la socarrona sonrisa que este le entregaba. —Dos semanas consecutivas Taehyungie, muy bien hecho... —Halagó al contrario, el cuál alzó los hombros y cejas simulando ingenuidad cosa que nadie le creía.

—¿Qué te puedo decir Guk-ah? Me volví adicto a tu pequeño cuerpecito...

Jeon se levantó del piso con dificultad, quejándose un poco del dolor en sus rodillas por los minutos permanecidos ahí abajo, acercándose hacia el castaño que no dudó ni un segundo en desvestirse para poder hacer suyo al contrario.

El pelinegro por su parte también quitó la única prenda que poco cubría su intimidad ya que la tela transparente no servía en demasía para ello; otorgándole su completa desnudez al mayor... alzando sus brazos cuando estuvo bastante cerca de este, dándole a entender que desde ese momento podía hacer lo que quiera con él.

—Felicidades por la victoria de esta semana Taehyungie hyung, serás el encargado de usarme por dos horas como te plazca... no podré chistar ni reclamar, solo obedecer a tus órdenes por el tiempo indicado.

El castaño se inclinó hacia delante y rápidamente comenzó a devorar la boca del menor, controlando en todo momento la salvaje caricia... probó cada centímetro de la húmeda cavidad; palpando un fuerte sabor por el semen de todos sus hyungs combinado con la orina de Yoongi.

Jeongguk gimió cuando la lengua de Tae empezó a moverla de un lado a otro sobre su paladar, para luego jugar con su propia lengua y juntarlas entre si como si de una pelea se tratase... la garganta del castaño recibía todos los sonidos que el menor emitía mientras le violaba la boca sin descaro.

Los dos inhalaron una gran bocanada de aire cuando el beso terminó, Guk tuvo que agarrarse de los fornidos hombros contrarios para no trastabillar y caer al frío suelo... sonrió ansioso, sabiendo que aquello no era ni la primera cosa que Taehyung le haría en las horas otorgadas.

—Hyungs... —nombró al resto, viéndolos por un momento y llamando su atención, riendo por lo bajo cuando los notó absortos en él y Taehyung— Cuenten dos horas a partir de este momento por favor... —Jimin fue el que sacó su celular y les mostró la pantalla de este, iniciando una cuenta regresiva de dos horas.

Kim de manera apresurada cogió de la mano izquierda al menor e hizo que diera una media vuelta bruscamente, ahora con Jeongguk dándole la cara a sus demás mayores y Tae detrás de el... posicionó su mentón en el hombro derecho del pelinegro y ahí le ordenó por lo bajo, pero lo suficiente audible para que el resto oyera.

—Frota el semen de los hyungs que tienes en los muslos Jeongguk-ah... embarrálos por la parte interna de tu apetecible piel mi vida... —Tan pronto como terminó, las manos del mencionado se encontraron haciéndolo... sabiendo lo que harían con tan solo aquella acción.

—Ahora entrecruza las piernas y abraza tu abdomen con tus brazos... todos verán como tus carnosos y bonitos muslos le servirán a mi polla para satisfacerla... —Guk gimió al oírle, encantado de ser mandado a cada segundo— No recibirás placer hasta que yo lo decida así conejito, por el momento solo eres el instrumento que usaré para hacerme sentir bien. ¿De acuerdo?

Jeon asintió varias veces frunciendo el ceño, tratando de no gemir demasiado fuerte para evitar que el otro sepa cuánto lo estaba disfrutando.

Cosa que fue imposible cuando la palpitante carne del castaño comenzó a follarle las piernas, sintiendo la gruesa circunferencia abriéndose paso por la lechosa carne de sus muslos una y otra vez... también sentía, con la fuerza que Tae usaba en las embestidas, cómo las bolas de este último impactaban con fuerza por detrás de sus piernas; azotándolas una y otra vez creando un peculiar sonido.

El menudo cuerpo del pelinegro se movía de adelante hacia atrás en pequeños espasmos por la inercia que las empaladas de Taehyung le proporcionaba.

Por su parte, el mayor mantenía la mano derecha sobre el ahorcable cuello contrario, aplicando fuerza de vez en cuando para verle al otro toser por la falta de aire... y la otra mano, más específico el brazo izquierdo, envolviendo el torso del menor para controlar las arremetidas.

—¿Se siente bien Jeonggukie, se siente bien como te follo las piernas una y otra vez? ¿Ah? —preguntó demandando respuesta, y teniendo al menor balbuceando palabras sin poder articular cuando le hizo agachar la cabeza con brusquedad y luego le indicó al oído... —¿Te gusta la vista Guk-ah? Mira mi venosa verga disfrutando por estar en medio de tus muslos.

—Si si, me gusta... me gusta mucho, se siente tan tan bien —Cuando el azabache pudo pronunciar aquella oración, Taehyung lo recompensó con su falo, específicamente subiendo este de posición para que al momento de aplicar las certeras embestidas; su glande y tronco rocen la entrada de Jeongguk.

Lágrimas comenzaron a salir de los bonitos ojos de este, palpando como los cachetes de su trasero se abrían por el grosor de la extensión. —¡Dios! Taehyung-ah por favor... por favor fóllame, te lo ruego. Tu polla se siente tan bien y aún no la metes...

—Pri-primero... necesito... —respondió el castaño entre palabras, aumentando aún más la velocidad de sus arremetidas; y provocándose a sí mismo el tan ansiado primer orgasmo al cual quería llegar... no sin antes obligar al contrario a ponerse de rodillas y en frente a él, echando su cargado y cálido semen sobre todo el cuerpo de su pequeño— Primero necesitaba hacer esto... —Le dijo limpiando su glande, recogiendo el semen restante y echándoselo en la mejilla al pelinegro.

Tae recogió una silla del comedor, sin perder el tiempo y con una nueva erección apareciendo en su parte baja colocó la silla donde antes se hallaba parado y se sentó sobre ella con las piernas bastante abiertas, palmeando sobre sus velludos muslos e indicándole al menor que se le acerque. —Vamos Jeongguk-ah, con la mirada hacia los hyungs y enterrándote en mi verga una y otra vez...

El menor prácticamente dio un salto en su propio lugar y tomó posición justo como el castaño le había indicado, observó las duras pollas de los demás y se emocionó por provocarles aquella reacción junto a Taehyung... alineó la gorda punta sobre su estrecha entrada y comenzó a descender, sin preparación sin estimularse... sabía que así le gustaba a Tae y así lo haría, no se quejaría ni un poco.

Los dedos de sus pies parecían garras, recogiéndose en el aire ya que sentado encima del castaño no alcanzaba el piso con los pies, agarrándose con fuerza del abdomen contrario usando las manos. Lleno, esa era la palabra correcta para describir como se sentía cuando toda la polla del mayor logró entrar en su culo.

Tae gruñó por la cálida sensación, y tomando de la pequeña cintura de Guk, empezó a alzar su cuerpo unos centímetros para luego dejar que caiga entero nuevamente sobre su sexo.

Jeongguk gritaba de placer cada que las manos del contrario le soltaban en el aire para enterrarse nuevamente en el gordo falo... sus muslos internos chocaban con los de Tae en casa arremetida, y al estar embarrados de semen, cuando los dos cuerpos dejaban de estar en contacto los demás podían ver sus viscosos fluidos despegándose y formando estelas de esencia como si de goma se tratase.

Aquello lo acompañaba el sonido de sus pieles chocando, y cuando el castaño no pudo contenerse comenzando a alzar su pelvis cada que el pelinegro se empalaba en su verga, la cordura de los dos en ese instante se volvió nula.

Guk temblaba del éxtasis al palpar la anchura de Tae, abriéndose paso por su culo y separando sus entrañas con una rapidez inimaginable... maltratándole la próstata de manera constante sin darle descanso... estaba seguro de que podía sentir la sangre recorrer por las gruesas y prominentes venas de aquel maravilloso pene que le estaba follando sin piedad.

—Hyungs, saquen sus pollas y comiencen a tocarse, no pueden saborear a Jeonggukie pero al menos deleiten su vista y tóquense... deben estar con dolor ahí abajo... —Los mayores se sonrieron entre si y antes de tomar en cuenta las palabras de Tae, observaron el rostro del Jeon para pedir permiso.

—S-si, Taehyungie tiene razón... déjenme ver sus penes de nuevo y córranse las veces que quieran hyungs; disfruten de mi cuerpo... disfruten de verme siendo destrozado por la verga de Tae...

Este último se emocionó aún más ya que le secundó en la idea, aunque Guk no tenía ni cabeza para tomar algún tipo de decisión en ese momento más que pensar en su polla.

Kim empezó a mover el menudo cuerpo contrario en círculos, palpando así la circunferencia completa de las paredes del recto contrario... daba aún más fuertes las estocadas, casi jurando sentir un hueso cuando llegaba al final.

—¡Hyu.. hyung, Bendita sea tu p-polla! —Jeongguk comenzó a chillar, se encontraba alterado de tanto placer que ni siquiera logró darse cuenta en el momento que su propio falo eyaculó; una incontable cantidad de chorros de semen por todo el piso regados.

Con un último sonido fuerte, de los testículos de Tae azotando la cremosa piel del menor, este se corrió por segunda vez y muy muy dentro del contrario... quedando sus cuerpos unidos por varios segundos mientras los dos trataban de acostumbrarse y recuperar fuerzas.

Cuando el azabache sintió que la erección del castaño disminuía de tamaño, sus caderas empezaron a moverse de un lado a otro... contento de poder palpar la gorda polla de Kim volviendo a hincharse dentro suyo, expandiendo una vez más su culo.

—Mierda, si que eres insaciable conejito... —Taehyung masajeó la espalda baja contraria, para luego dar una sonora palmada en el glúteo izquierdo de Guk, haciéndole brincar por la acción siendo acompañada de un gemido agudo.

—No puedes parar Taetae, sigue usando tu pene y párteme en dos por favor... —Indicó mientras se movía de un lado a otro aún sentado encima del mayor y con su falo dentro, dejando escurrir un poco del caliente semen y sintiendo sus cachetes junto a la pelvis de Tae pegajosas entre si— Aún tienes que seguirme llenando de tu leche Taehyungie... —Colocó dos de sus dedos ahí abajo, embarrándolos de la ya mencionada esencia para luego llevarlas a su boca y saborearle.

Kim se levantó con el pelinegro aún empalado en su verga y caminó de esa forma hasta llegar a unos centímetros de los demás... agachándose con Jeongguk en el piso y dejándole en posición de perro.

Las manos del menor se agarraron de una mesa pequeña que se encontraba en el centro de la sala, y con los otros hyungs en frente comiéndoselo con la mirada; pudiendo casi tocarle si se inclinaban un poco...

Taehyung colocó una una mano en su cuello y mentón, aplicando un poco de fuerza hizo que la cabeza del menor se incline hacia arriba, pudiendo verle el rostro le metió dos dedos en la boca y le ordenó que la abra lo más que pueda; para luego escupir una gran cantidad de saliva que cayó dentro de la cavidad así como en sus mejillas y alrededor de estás también.

—Muéstrale tu boca llena a los hyungs mientras te cojo fuerte y rápido Jeongguk-ah...

Los siguientes minutos hasta completar una hora y media fueron los dos cogiendo por todos los lados de la casa mientras los mayores les veían y se corrían junto a ellos cada que llegaban al clímax en conjunto.

Las nalgas del pelinegro siendo golpeadas con fuerza mientras las embestidas del mayor se mantenían fuertes y con una potente intensidad que no parecía acabar... —Manten la boquita bien abierta Guk-ah, enseña como te encanta recibir mi polla una y otra vez... —indicó cuando tenía al menor en cuatro y los mayores a centímetros cerca de ellos.

—¿Escuchas eso Jeonggukie? Es el sonido de mi verga entrando una y otra vez en tu pequeño agujerito con la ayuda de mi propio semen... ¿Oyes que tan bien suena? —Preguntó con arrogancia mientras le follaba de pie, Jeon con una pierna en el aire para permitirles una mejor vision a los demás, dejando a la vista sus rojizos cachetes por el constante movimiento y golpeteo.

—Mira hacia abajo... Guk-ah, mira como mi pene desaparece dentro tuyo y se lo come tan fácil... —Ordenó cuando estaban cogiendo sobre el mesón de la cocina, el pelinegro dejando caer su cabeza sobre el pecho contrario y no conteniendo el grito que escapó de sus labios cuando vio aquello... la gorda y palpitante polla de Taehyung realmente desaparecía dentro de él; encantado de poder sentir la pelvis de este impactar contra sus testículos cuando llegaba al final— ¡Mierda mierda! Taetae tu verga me está haciendo ver e-estrellas, Tae...

El menudo cuerpo de Guk se abrazó del mayor, mientras este último salía de su entrada ya habiéndose venido una quinta vez, lentamente viendo su pene salir hasta que solo veía su corrida ser explusada a modo de creampie del culo contrario hasta caer al piso... se agarró del mesón con una mano mientras la otra la ocupaba dando masajes en la espalda contraria, tratando de regular su respiración y recuperando fuerzas para una última vez.

—Jimin, ¿Cuánto me queda? —Le consultó al otro, indicándole que solo faltaban diez minutos para completar las dos horas.

—Vamos Jeonggukie... una última vez, necesito que lo sientas realmente... —Cargó al contrario que parecía confuso con las palabras ya antes mencionadas, no sabiendo muy bien a qué se refería con ello. Se dirigieron al dormitorio del pelinegro, siendo seguidos por los otros mayores, igual de intrigados que Jeon.

Taehyung se sentó en la orilla de su colchón, palmeando sus muslos y recibiendo al menor nuevamente auto penetrándose mientras se sentaba encima suyo, cómo la primera posición que usó al momento de ganar.

—Todos, alrededor de MI galleta y empiecen a tocarse de nuevo —Todos obedecieron sin chistar y formaron un semi círculo alrededor de los dos, empezando a masturbarse cómo lo había pedido el castaño.

—Sentados de esta manera no se siente de la misma forma Guk-ah —Le dijo mientras mordía el lóbulo izquierdo de su oreja, acostándose en el mullido colchón y llevándose al menor consigo en aquel movimiento— Pero así... —Prosiguió hablando, alzando la pelvis para empalar su polla dentro de todo el culo, pudiendo notar el pequeño bulto que se formaba en el vientre de Jeongguk

Este último exhaló al palparle, la anchura del falo nunca había expandido tanto su ano hasta ese momento, gritando de placer cuando las embestidas regresaron y lo que la gruesa verga más jodía era su próstata y su vientre.

—¡Dios dios, más fuerte... Taetae más duro, más rápido te lo ruego... —Cuando agachó la mirada y divisó que su estómago se expandía cada que Taehyung lo metía todo, los siguientes minutos solo se pudieron oír los gemidos de los mayores, los gruñidos del castaño y los gritos de Jeongguk que pedía por más y mencionaba palabras de amor para Kim y su miembro.

—Tócalo, siente con tus manitos como expando tu abdomen con mi verga... Siente como se retuerce dentro tuyo por lo excelente que tú culo lo recibe Jeongguk-ah... —Agarró las manos del pelinegro y las colocó sobre su propia barriga, empezó a llorar y a botar saliva al ya no poder coordinar lo que hacía por el placer sentido... Taehyung lo estaba realmente llevando al cielo.

—Co-córranse para mí, Hyungs... demen de su leche una vez mas por favor... Tae-Taehyungie, llena mi barriga de su semen y déjalo ahí por mu-mucho tiempo. Déjame sentir tu caliente esencia dentro...

Los cinco más grandes empezaron a venirse uno tras otro con diferencia de segundos, bañando el menudo cuerpo del azabache por completo con sus corridas.

Taehyung dejó salir un sonoro gemido desde su garganta mientras usaba la fuerza que le quedaba para tratar de meter más y más su verga dentro de Jeon al eyacular dentro... El pelinegro temblaba mientras también se venía, encantado con poder sentir la polla del castaño moviéndose dentro suyo al soltar chorros y chorros de esperma sin mesura.

El celular de Jimin sonó justo después de aquello, sacándolos de aquella burbuja en la que todos se hallaban.

—Hoy realmente estuviste perfecto Jeonggukie... —habló Tae, acariciando la cintura del menor suavemente mientras repartía silenciosos besos sobre los hombros de este, viéndole encantado al otro por los mimos— No quiero salirme de ti todavía... —Le susurró en el oído mientras veían a los demás limpiarse y caminar hacia afuera para empezar a arreglar todo el desastre.

Jeon aseguró el agarre que el mayor tenía sobre él, girando el rostro para darle un largo beso en los labios... —No lo hagas, quedémonos el tiempo que quieras así, es más... ¿Ya viste que estoy cubierto de leche nuevamente? —indicó el pelinegro insinuándosele descaradamente al mayor— Deberías comerme nuevamente para una mejor experiencia Taehyungie Hyung...

Éste último asintió cómplice, volviendo a tomar los labios de Guk mientras sentía que su falo empezaba a crecer nuevamente...

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Perdón por hacerles esperar mucho tiempo, andaba muy ocupadito.

De regalo les doy a este mi nuevo hijo sucio jeje, gracias infinitas por los 10K es más ya casi son 11k.

Me ENCANTA leer sus comentarios y reseñas, por favor no se abstengan de comentar qué les pareció porfis <\3

Hasta la próxima (esta vez si no será tan larga la espera I promise) chau chau mis compotas ^^