luis-zj1621931018 Luys B. ZJ

Es una historia de prueba. Lance la primera parte de un capitulo, si los deja con intriga, vamos por buen camino, pero ya enserio, vaya, si notan algún error gramatical o de escritura, si encuentran cualquier error, les pido que me lo hagan saber, por mas insultante que sea su comentario, yo voy a corregir lo que esta mal, y se los agradeceré. actualmente no estudio, ni voy a la escuela, pero desde hace 2 años llevo queriendo escribir una novela ligera, sin embargo, y debido a mis problemas de depresión y falta de conocimiento no lo había hecho, pero ahora quiero volver a intentarlo, por mas difícil que sea quiero hacerlo, así que no duden en hacerme saber de mis errores, yo les agradeceré todo el apoyo que me brinden. Pd: Por si no les queda claro, soy un escritor novato y sin estudios, así que no esperen a qui la octava maravilla del mundo, ok. Atentamente: Luis B. ZJ


Fantasía Fantasía oscura Todo público. © Luys. ZJ©

#primeranovela #otromundo #32819 #poderes #227 #326 #371 #332 #341 #familia #245 #258
1
1.9mil VISITAS
En progreso
tiempo de lectura
AA Compartir

Cap.1.Pt.1-La escena en el comedor

La vida de los nobles no es, siempre, como todos la imaginan, si bien los más grandes nobles, junto con sus familias, viven una vida de lujo, una vida donde todo lo que ellos desean lo consiguen, la mayoría de nobles siempre piden cosas que sean imposibles de conseguir para la gente ordinaria, de cierto modo tiene sentido, querer tener algo único, algo que nadie más tenga en su propiedad para así sentirte especial y que los demás te tengan envidia.

Pero no es la misma historia cuando eres un noble de campo, tanto la vida de tus súbitos como la tuya están casi al mismo nivel, económicamente hablando. Normalmente, un noble de campo, si se esfuerza, puede cambiar la situación en unos pocos años y llegar a entrar en la guardia real o aún mejor, y más complicado, la corte real del rey, mejorando la calidad de vida de sus súbitos, como la de él, siendo este el más beneficiado.

Pero no es la misma historia si perteneces a una casa de nobles caídos.

“Mi señor, su madre lo llama para comer.”

Mientras me encontraba sentado, divagando, en el jardín, detrás de la cocina, escuche el dulce tono de voz de Jeanne, la sirvienta principal,salir de la puerta trasera de la cocina.

Poco después, asomo su cabeza por el borde de la puerta dejándome contemplar su hermoso rostro, si, no hace falta decir que hace bastante tiempo que estoy enamorado de ella, no hace falta decir que una de las razones de ello es su increíble belleza, pero, aunque al principio me parecía una sirvienta más de la casa, con la diferencia de que es ella quien está a cargo de todas las demás sirvientas, y la respetaba por eso, pero no había sentimientos fuera de eso, y no fue hasta después de ‘eso’ que empecé a sentir algo hacia ella.

¿Qué demonios?, estoy empezando a divagar de nuevo.

“Voy” Respondí, mientras lentamente me levantaba del suelo.

Mis padres no sabían que yo normalmente me encontraba aquí, ellos piensan que soy un recluido y me encierro en mi habitación todo el día, que únicamente salía para ir al baño y comer.

Y aunque me encontraran saliendo de la cocina, ellos no suelen prestar atención a mis acciones, por lo que no le darían importancia y simplemente me ignorarían.

Una vez fuera de la cocina, me dirigí al comedor,vi a mi familia sentada en la mesa comiendo sin preocupación.

“¿¡Jeanne, cuando va a bajar ese mocoso, dile que se apresure?!” Exclamo mi madre, molesta, mientras seguía comiendo.

Observe que Jeanne, molesta, se mordió el labio, iba a responderle, pero decidí interrumpirla, no quiero que Jeanne se meta en problemas por mi culpa.

“Lo siento, estaba ocupado, por eso tarde en bajar.” Dije.

“Uhm, deja de hablar y apresúrate a comer, rápido.” Dijo mi madre con desprecio.

En el tiempo en que yo y mi madre estuvimos hablando, observe como toda la familia me miraba igual que siempre, con desprecio. Dejando eso de lado me dirigí a mi asiento, como era de esperar estaba ubicado donde siempre, en el extremo inferior de la mesa, alejado de toda la familia, ese era mi lugar de siempre, a excepción de cuando vienen invitados,ahí si los malditos me ponen junto a ellos, fingiendo ser una familia perfecta.

“Ah, lo siento madre no tengo ganas de comer hoy.” Dijo Liz, mi quejumbrosa hermana mayor, mientras que con asco alejaba la comida de su zona.

“Y eso, que pasa hoy, amor.” Dijo mi padre, mientras decía eso lucia preocupado, en serio, como puede sentir preocupación, siempre hace eso, creo que hoy en día lo usa más como una excusa para poder ir encontrarse con su novio a escondidas de padre, uhmm, pobre, enserio piensa que su querida hija sigue siendo virgen, me hace querer llorar. Pensé para mí mismo, mientras no notaba que mis expresiones se estaban filtrando.

Ah, casi me descuido.

Y como era de esperar-

“¡Ahhh! ¡Ya no quiero comer!” Procedió a pararse de su asiento con ferocidad y 1,2,3-

“¡Todo esto es culpa tuya, Dante!” Procedió a echarme la culpa de esto a mí.

Enserio, mi “maldición” no entra en esto.

Lo único bueno de este drama familiar es poder ver la cara de culpa y preocupación de mi padre, aunque empieza a ser un poco aburrida, me pregunto ¿Qué cara pondrá si se entera que tiene novio? No, aun mejor ¿Qué cara pondrá si la ve en la cama con su novio? Ah, es una pena.

¡Tu!” Padre volteo a mirarme con enojo e ira, una escena típica, diría que este es lo malo de venir a las comidas familiares, pero creo que el ver a mi papa preocuparse por su hija zorra lo compensa. Un momento, me dirigí a él como ‘papa’, en mis pensamientos, pero aun así lo hice, supongo que una parte de mi extraña esos momentos... Es una pena, esos tiempos no volverán. Ahora los momentos cuando veo a mi padre lo veo con una sonrisa, pero no dirigida a mi, sino a mis hermanos, y en cuanto me ve siempre cambia su rostro, de gentil y risueño, a enojado y con la palabra ‘desprecio’ escrita en todo su rostro.

“¡Todo esto es tu culpa! ¡Lárgate! ¡No quiero volver a ver tu cara! ¡Lárgate!”

Uwa, ten cuidado, tus hijos menores te están viendo enojado, ¿seguro que quieres darles esa imagen tuya? Bueno, esa es tu verdadera cara, pero no querrás que ellos se den cuenta de ello, ¿verdad?

Bueno, seguramente si digiera eso me correría de la casa al instante o peor aún me desheredaría, jajajajaja, como si nuestra vida fuera diferente a la de los plebeyos.

Cierto no hay riego alguno.

“Uwa, ten cuidado tus hijos menores te están viendo enojado, ¿seguro que quieres darlesesa imagen tuya? Bueno, esa es tu verdadera cara, pero no querrás que ellos se den cuenta de ello, ¿verdad?”

Uy, su cara está cambiando, jajaja, será que desbloquee un nuevo rostro, ¿cuál será, ¿cuál será?

“¡Maldito, ven aquí desgraciado!”

Uwaaa, me lanzo un plato de cera directo al rostro, que obviamente esquive, dejando de lado eso,que decepción, no logro diferenciar su rostro en modo ‘te voy a matar, maldito mocoso” y de ‘te voy a matar, maldito monstruo’.

“¡Tú, maldito demonio! ¡Te voy a matar con mis propias manos!”Dijo padre enfadado mientras recargaba sus manos, fuertemente, sobre la mesa, lo que espanto a mis hermanos, sobre todo a los pequeños, en definitiva, los espanto, demonios, empezaron a llorar, pero parece que él no le da importancia. ¿En serio querrá matarme?A todo esto, no me di cuenta de que uso una nueva palabra para referirse a mí, ¿Cuál fue?... ¡Demonio! Si, era esa, jaja, interesante, quizás es la que mejor me queda.

Mientras me encontraba divagando sobre lo que mi padre había dicho, desperté, vi a mi padre siendo sujetado por los mayordomos de la casa, mientras el casi y estaba arriba de la mesa, al parecer toda la familia está uniéndose para calmarlo.

“¡Maldito monstruo, esto es tu culpa! ¡Lárgate!” Dijo Alan, el hijo de en medio. Rara vez me habla y siempre que lo hace siempre me dice este tipo de cosas, al parecer no sabe cómo hablar con su hermano mayor, que ternura que quiera llamar mi atención de esa manera.

Al parecer eso es todo por hoy, bueno, fue divertido, creo que mereció la pena venir a la comida.

“Uhhh. Me retiro, gracias por la comida y buen provecho a todos.” Sin más dilación procedí a levantarme de mi asiento y me salí del comedor.

“¡Cálmate, querido! ¡Los bebes están llorando, cálmate!”

Incluso desde el pasillo se oyen los esfuerzos desconsolados de mi madre, tratando de calmar a mi padre.

26 de Abril de 2022 a las 20:31 0 Reporte Insertar Seguir historia
1
Leer el siguiente capítulo Cap.1.Pt.2-La escena del dormitorio y la hermana

Comenta algo

Publica!
No hay comentarios aún. ¡Conviértete en el primero en decir algo!
~

¿Estás disfrutando la lectura?

¡Hey! Todavía hay 4 otros capítulos en esta historia.
Para seguir leyendo, por favor regístrate o inicia sesión. ¡Gratis!

Ingresa con Facebook Ingresa con Twitter

o usa la forma tradicional de iniciar sesión

Historias relacionadas