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El egoismo no es algo que esté en mi corazón, mi corazón es algo que carece de eso.


Fantasía Todo público.

#Corazón #Tenue.
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Mi Propio Deseo

                                                                     Un Corazón Tenue.

Sylvette nació con un tipo de discapacidad visual. Ella veía todo, sin ningún tipo de discriminación, negro. Pese a esto, ella no tenía ningún tipo de problemas para identificar las formas y lugares de los objetos.

En las lejanías del castillo donde ella vivía se hablaba acerca de una diosa misericordiosa que ayudaba a los necesitados. Muchos decían que esa no era una tarea digna de una diosa.

Los padres de Sylvette hacían todo lo posible para que su hija pudiera ver.

—Hija, te pondrás bien, Papa y Mama se están esforzando mucho para que eso ocurra —Dice el Padre.

Sylvette se encontraba acostada en la cama con vista hacia el techo: todo era negro.

—Muchas gracias, Papa, Mama. Yo… Yo me alegro de que hagan esto por mí pero por favor no se exijan mucho.

—No te preocupes, Papa y Mama son muy fuertes —Dice el Padre.

Una familia que pese a todo el dinero que poseían no había sido corrompida.

—Yo… Hay veces que quisiera que esto fuera solo un sueño. Un día quisiera despertar y poder ver claramente todo.

Sylvette estaba colapsando emocionalmente.

— ¿Por qué a una familia tan buena le tuvo que ocurrir tener una hija como yo? —Dice Sylvette.

Se dice que la noche intensifica las emociones: tristeza, miedo, ira.

Sylvette, luego de meditarlo toda la noche, se decidió ir al lugar donde se encontraba esa diosa: ¿su guía? Su gran oído.

Sylvette partió en la temprano en la mañana. Su viaje era difícil, pero seguramente ella lo lograría, debía lograrlo.

Estuvo gran parte de su viaje en una pequeña carreta. Ella sabía que podía confiar en su oído como guía.

El fin del camino había llegado: Sylvette salto de la carreta y al caer dio tres vueltas en el sucio suelo.

Todo estaba oscuro: la noche había llegado. No se podía ver absolutamente nada, solo se podía escuchar.

—Cof-cof. C-Creo que debería ser por aquí.

Gracias a su odio pudo evitar cualquier obstáculo: ramas, piedras, huecos, todo ese tipo de cosas.

De repente una luz cegó sus ojos. La figura de una mujer había aparecido frente a ella.

—¿Tú eres la diosa? Por favor, si es así quiero que me cures la vista —Dice Sylvette.

La diosa derramo una lágrima, la tomo sutilmente con su dedo índice y con ella cubrió los ojos de Sylvette.

Era como si nada hubiera pasado, era como si todo hubiera sido un sueño, pero mágicamente ella pudo ver.

Los padres lloraron, ella lloro, y todos fueron felices.

El bosque es el lugar donde se encuentra una diosa que cumple deseos.




1 de Septiembre de 2017 a las 05:55 0 Reporte Insertar Seguir historia
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