bennett Sebastian

En algún momento la noche se irá, y con ella mis memorias. En un último arrebato plasmaré mis sentimientos, e inmortalizaré tus vivencias.


Historias de vida Todo público.

#1
5
504 VISITAS
En progreso - Nuevo capítulo Cada 30 días
tiempo de lectura
AA Compartir

El hombre más feliz del mundo


Soy el hombre más feliz del mundo, cuando te recuerdo en medio del placer que me otorga la música al escribir tus vivencias. Soy el hombre más feliz del mundo, pues tu ausencia hace que mi cariño y sensibilidad crezcan y me cristalicen cual ser frágil que sucumbirá al mínimo soplo y caerá ante la fría baldosa partiéndose en pedazos.


Solo oigo tu voz cuando duermo, y observo tu fría y melancólica mirada desvanecerse mientras pasan los segundos.


Las horas se comen mis penurias y la luz se asoma atravesando mis corroídas cortinas color purpura, obligando a mi lecho soltarme con la promesa de volver como siempre. Prendo los altavoces y dejo que suene de fondo “All of me” de Louis Armstrong. Camino descalzo hasta el viejo escritorio de madera que era de mi padre, y sobre un cuaderno desgastado me expreso y te expreso en una profundidad de la que probablemente no tenías consciencia.


La voz gruesa del cantante ilumina mi bolígrafo y me provoca uno de los mejores placeres al estar inmerso en una fría sala con colores pastel. Suelto un par de suspiros mientras estiro las piernas y de nuevo retomo las riendas de tu vida que plasmo sobre el papel amarillento que el tiempo ha corrompido.

¿Debería concluir con tu silueta levitando sobre la sala? ¿O expresar de forma poética que una soga en tu cuello atada al ventilador se ha robado tu cuerpo cuando tu alma quiso salir corriendo por la puerta? No importa como lo escriba o como habrás querido que lo hiciera, pues la dualidad hace caso omiso hacia tu persona; será pues, que concluiré de forma certera y lamentar con letras la dolorosa realidad que tu ausencia representa en mi cuaderno.


Fuiste una insignificante persona, mujer cobarde que dejó todo por una senda de profunda tranquilidad. Fuiste y serás ante mayoría de ojos ajenos una desgracia con piernas que con mirada al piso soltaba lamentos silenciosos que buscaban consolarte solo a ti y a tu mísera existencia. Fuiste la clara prueba de lo que no se debe hacer como persona y sin embargo, tus virtudes superaban la media, aderezadas con una anormal delicadeza y amabilidad hacia todo ser viviente.


Escribir tu vida no ha sido más que una patada en las pelotas. Fracaso tras fracaso, golpe tras golpe. Fui el único que sabe tanto de ti y es responsabilidad mía inmortalizarte en mis memorias o las de cualquiera que lea lo que escribo.


Una persona como tú no pertenece a este mundo tajante, pero en los pocos años que observaste el universo atrapaste mi atención y ganaste mi corazón.


Escribir tu vida no ha sido más que una patada en las pelotas, pero comprender tus decadencias como errores te delató como la persona más maravillosa hacia mis ojos, y contemplar, plasmar y querer toda imperfección de tu ser, me han hecho el hombre más feliz del mundo.


"Alcanzaste la inmortalidad en docenas de textos, y tu alma volvió a encenderse con tintas de colores, y aunque sé que yo no podré trascender igual que tú, me gustaría pensar que en el más allá podré volver a verte. "


20 de Septiembre de 2021 a las 20:37 0 Reporte Insertar Seguir historia
5
Leer el siguiente capítulo Del odio a la falsa razón

Comenta algo

Publica!
No hay comentarios aún. ¡Conviértete en el primero en decir algo!
~

¿Estás disfrutando la lectura?

¡Hey! Todavía hay 1 otros capítulos en esta historia.
Para seguir leyendo, por favor regístrate o inicia sesión. ¡Gratis!

Ingresa con Facebook Ingresa con Twitter

o usa la forma tradicional de iniciar sesión