Los Escritos Obscuros de Ávalon Seguir historia

Hace mucho tiempo en el castillo de Camelot se está decidiendo quien será el predecesor del Rey Uther Pendragon, El Rey antes mencionado pensó en la decisión junto a su esposa Igraine, llamo a sus dos hijos para decirles el próximo heredero al trono, convoco a la mitad del reino para así mostrarles su próximo heredero, los dos hijos Arturo Pendragon, y Morgause se vistieron de las ropas más finas y lujosas del Reino, cada uno era apto para el trono, pero solo uno podría ser el heredero.

Arturo era alguien decidido, fuerte, un az en el uso de la espada y un líder nato.

Mientras Morgause era tranquila, inteligente, una experta en hechicería y todo tipo de magia, pero no era muy capaz de liderar o siquiera trabajar en equipo.

Todos los presentes esperaban con ansias la elección del rey Uther, los dos hermanos siempre habían tenido un espíritu de competitividad, pero Morgause siempre ha querido darse a reconocer, ella estaba segura que la elegirían a ella como heredera.

Uther: Por Años este Reino ha sido un reino de prosperidad y paz, como sabemos necesitamos un líder que comande nuestras fuerzas ante adversidades y enemigos que quieran arruinar este reino, Por ende, hemos pensado en nuestra decisión.

Igraine: El siguiente heredero al trono y por ende protector del reino de Camelot es Sir Arturo Pendragon.

Todos los presentes saltaron de alegría y empezaron el festejo por el nuevo heredero, todos estaban festejando cuando de repente una llamarada ascendió, Morgause furiosa empezó a hacer un escándalo para luego gritarle a sus padres.

Morgause: ¡No es justo! Yo debería haber sido la heredera al trono, yo he trabajado duro y he tratado de trabajar en equipo para poder adaptarme, porque no me dan una oportunidad de demostrar que puedo ser una heredera digna.

Uther: ¡Silencio! En este reino no necesitamos a alguien que tiende a fallar, necesitamos un líder que se sobreponga contra adversidades como el ejército de Madoc, no podemos flaquear y esperar a que madures, no eres y probablemente nunca serás digna de... – De repente Uther dejo de hablar y cayo de su silla inconsciente. –

Igraine: ¡Uther, amor mío responde! –Gritaba preocupada. –

Arturo: ¡Padre, responde por favor!

Morgause: No fue mi intención, padre... – Su madre la interrumpe en ese momento. –

Igraine: ¡Todo esto es tu culpa desgraciada!, nunca serás merecedora del trono, ¡ahora vete de aquí antes de que ordene tu ejecución!

Morgause salió llorando de la sala del trono, ese día el caos se adueñó del reino, ese día que se supone debía ser de celebración por la coronación se transformó en un caos total, el reino estaba en pánico porque acababa de fallecer su rey.

Ese mismo día Arturo Pendragon tuvo que asumir su papel como nuevo rey de Camelot.

Esa misma noche Morgause no pudo dormir, ella salió a dar un paseo nocturno para pensar bien las cosas.

Morgause: Si tan solo me hubieran nombrado a mi como la heredera nada de esto estuviera pasando. –se decía a si misma molesta. –

De pronto escucho una voz desconocida...

Voz desconocida: Exacto, si tan solo tu hubieras sido la heredera.

Morgause: ¡¿Qui...Quien está ahí?!

Voz desconocida: Oh tranquila, no tienes por qué asustarte, solamente soy alguien que está de acuerdo contigo...

Morgause: De acuerdo ¿conmigo?

Voz desconocida: Exacto, si solo tu fueras la heredera nada hubiera pasado, pero no fue así, pero aún hay una manera de que puedas gobernar.

Morgause: ¿Cómo podría? Después de lo que hice... apenas tuve suerte de no ser ejecutada.

Voz desconocida: No te preocupes, yo te ayudare, déjame presentarme primero.

De las sombras salió una mujer con apariencia de bruja.

Voz desconocida: Mi nombre es Morgana Pendragon, y te ayudare a obtener el poder que tanto anhelas.

Morgause: ¿Pendragon? ¿Entonces eso significa que somos familia?

Morgana: Exacto, veras tu padre en uno de sus viajes tuvo una pequeña aventura que le trajo consecuencias.

Morgause: ¿Consecuencias?

Morgana: Si, un par de gemelos, Yo y Madoc ap Uthyr.

Morgause: ¡¿Qué?! ¿El líder del reino que nos ha atacado por años es de mi hermanastro?

Morgana: Veras cuando nuestra madre le informo a Uther que estaba embarazada de él, este negó su responsabilidad dejando a su suerte a mi madre.

Esta al tener a sus hijos gemelos estaba en una gran deuda económica, así que para pagarla tuvo que dar sus hijos que de alguna manera fueron a parar a la realeza del reino de Marnian, estos crecieron entre la realeza hasta que supieron de lo que sucedió en el pasado ya que el día que su madre estaba en lecho de muerte sus hijos fueron llamados, y entre las cosas que ella les conto supieron su pasado, las últimas palabras de su madre fueron... ¡Tomen lo que ese desgraciado les quito!

Desde ese día los dos hermanos buscan venganza, buscan tomar lo que nunca se les fue dado.

Madoc le gusta hacerlo de manera brusca enviando a su ejército contra el de Uther, pero a mí me gusta más trabajar estratégicamente.

Así que ahora que Uther está muerto solamente quiero justicia, y esa justicia la obtendré poniéndote en el poder.

Morgause: ¿Pero como podría yo llegar al poder?

Morgana: Primero bebe esta poción que te dará juventud eterna, así al reinar tu monarquía nunca acabará.

Morgause: ¿Porque debería confiar en ti en primer lugar?

Morgana: ¿Sera talvez porque tenemos en común un objetivo?

Morgause desconfiada bebió de la poción y luego arrojo el frasco.

Morgana: Bien hecho, ahora te explicare como obtener el poder, simplemente debes tener un hijo con Arturo Pendragon, este al ver que tiene un hijo tuyo no tendrá más opción que ponerte a reinar junto a él, con la poción que te acabo de dar nunca envejecerás, por lo tanto, no morirás, pero Arturo si lo hará, así que el al morir no tendrá más opción que darte a ti el reino de Camelot.

Morgause: ¡¿Cómo podría yo hacer eso?! Sería un total insulto a nuestro Reino.

Morgana: Es por el bien del reino, así obtendrás el poder que tanto anhelas y detendrás la guerra entre Marnian y Camelot.

Morgause confundida acepto.

Morgana: Solo tienes que embriagarlo para que no recuerde nada y así sea el crimen perfecto.

Morgana le entrega una botella con un licor poderoso que embriagaría fuertemente a Arturo Pendragon.

Morgause empezó a dirigirse a la habitación de Arturo cuando se encontró con Merlín que tenía en sus manos el frasco de lo que ella había bebido antes.

Merlín: Morgause, ¿podrías decirme que es esto que arrojaste?

Morgause: Aaa nada, simplemente una loción. –Decía nerviosa. –

Merlín: Pues supongo que es una loción de mala calidad ya que no huele a nada.

Morgause: Exacto, la compré en uno de los barrios ya que quise tratar de ser... ¿considerada? –Decía muy nerviosa. –

Merlín: mmm ya veo, de todas maneras, tratare de inspeccionar esta... “loción”

Morgause siguió avanzando hasta que llego a la habitación de Arturo.

Arturo: ¿Qué es lo que necesitas Morgause?

Morgause: Solo quería entregarte este vino, lo preparé yo misma como disculpa del disturbio que hice.

Arturo: ¿Enserio crees que con esto arreglaras todo? Este vino no traerá de vuelta a nuestro padre, ¿o sí? – Decía mientras le daba un gran trago. –

Morgause: la verdad no, pero quería aliviar un poco la tensión...

Arturo: Pues la verdad con un simple *hip* vino no podrás *hip* arreglar *hip* las cosas *hip*–decía ya fuertemente ebrio. –

Morgause: Tratare la manera de mejorar las cosas.

Arturo: ¡Pero que buen vino! *hip* no *hip* te preocup... *hip* tratare de calmar las cosas en el reino *hip* –El Rey estaba tan ebrio que no podía terminar una frase completa. –

Ahora déjame dormir *hip* mañana... *hip* hablaremos eso.

El rey se durmió en el momento, y esa misma noche Morgause se quedó en la morada del Rey.

A la mañana siguiente Arturo despertó sin saber que había pasado la noche anterior.