PRÓLOGO
Verano. El verano cambia a todo el mundo. Hay fiestas, noches en la playa, risas con los amigos, y sobre todo amores de verano. Pero el último verano no se quedo solo en eso, en un simple amor de verano. Kena arrastró sus sentimientos mucho más tiempo, incluso hasta el siguiente verano. Guardándole un hueco en su corazón durante todos esos meses, sin dejar espacio a nadie más. ¡Qué lástima que él no apreciara dichos sentimientos! ¿Pero cómo hacerlo si no sabes de qué sentimientos te hablan? No se puede, esa es la respuesta.
No se conocían, no se habían visto antes de esa calurosa noche, que después de entrenar les reunieron sus amigos. Kena acompañó a su amiga fuera de la pista de baloncesto dónde habían estado entrenando dos horas, para tomar el aire y ver a unos amigos de su amiga. Como dice la canción, "los amigos de mis amigos son mis amigos". Ella le presentó a los chicos que no conocía, pero se pasó el tiempo que estuvieron allí hablando con uno de los chicos que si conocía. Era tímida y bastante vergonzosa al principio, pero sobre todo tenía miedo a no encajar del todo en ese grupo de amigos tan especial, y del que sin duda quiso formar parte desde el segundo 0. Estuvieron juntos durante unos 15 minutos, pero poco a poco los chicos se iban a las duchas, o a sus casas para ducharse allí. Kena, Adrien, Hugo y Natali se acabaron quedando solos en aquel pequeño rincón. Kena no intervino mucho en esa conversación, se limitaba a reírse de vez en cuando y a revisar alguna de sus redes sociales, aunque en ese momento lo que más la entretenía era observar tímidamente a Adrien. Apreciar su marcada mandíbula o sus delineadas piernas.
Ellos todavía no eran conscientes de todo lo que se avecinaba.
Al cabo de unos minutos se despidieron y cada uno entró a su baño correspondiente. Kena y Natali estaban solas en el vestuario de chicas, ya que todas sus compañeras de equipo habían terminado y se habían ido a casa.
- ¿Son guapos, no? - le preguntó Natali.
- Sí - se limitó a responder Kena. No sabía exactamente cómo debía sentirse, pero lo que sí sabía es que algo había cambiado dentro de ella. No era consciente de todo lo que acarrearía ese sentimiento que empezó a crecer en ambos esa noche.
- ¿Con cuál me quedo? - le volvió a preguntar su amiga, que estaba del todo indecisa por la elección de los dos chicos. ¿Debería quedarse con Adrien, o con Hugo?
Kena llevada por sus nuevas y profundas emociones le dijo que debería tener algo con Hugo porque pegaban más. ¿Pero era lo que realmente pensaba? Sin duda no estaban mal juntos, pero quizá... Le dio igual, se lo dijo y punto.
- Sí, Hugo tiene unos ojazos... -un suspiro proveniente de Natali lleno las duchas del lugar. Después de las palabras de Natali dejaron el tema por el momento y terminaron de ducharse entre risas y anécdotas de clase.
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¡HOLA maripositas!🦋 Os traigo una nueva historia. ¿Por qué otra nueva historia? Porque tenía que inventarme una para clase, y he decidido seguirla y subirla a Inkspired. Espero que os guste y la disfrutéis tanto como yo.
Dejadme sugerencias u opiniones en los comentarios. Os leo✨
Besos,
LB🧡
Gracias por leer!
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