Las sirenas lloran al no poder hipnotizarme con sus voces, pues yo solo grito tu nombre.

Cuando dos personas pelean, los corazones se mantienen muy separados y necesitan gritar para escucharse, en cambio, cuando dos personas están enamoradas, no hace falta ni hablar para decir muchas cosas, basta con una mirada porque sus corazones están lo suficientemente cerca como para que no hagan falta las palabras…☺️

Eu grito todos os dias para não ser julgado Grito todos os dias para não ficar sem ar Grito a cada vez que fico em silêncio Meu ar sai e meu medo vem Mas meus gritos... São risos... E os risos... São lágrimas escorrendo em uma solidão profunda... Tento não chorar... Mas é impossível

Olhem através da janela, vejam os monstros que andam criando. O som alto dos gritos daqueles que pedem ajuda. As pessoas não dão a mínima por você, você é insignificante para eles. O som angustiante da sua voz traz um grito tortuoso em meus ouvidos. Gritavam liberdade, eles querem ser livres, não estão ouvindo o chamando de liberdade? Eles têm medo. Recorda-se do tempo, lembre-se daquilo que um dia foi notável para você.

Las facciones de la chica, tan brillantes, tan hermosas, tan alegres, tan perfectas, me gritan con dureza que su bello rostro sea plasmado antes de que la olviden en su tumba, metros bajo tierra, con dolor en el alma y sangre en la ropa, olvidada para siempre mientras le comían la vida....

Por favor, dejen de gritar ¿que quieren? ¿por que me hacen esto? basta por favor, solo quiero dormir.

Mis párpados se sienten pesados, Cada paso que doy es como un suplicio, como si Miles de calvos apuñalaran las plantas de mis pies. Poco a poco voy perdiendo el interés a la vida Poco a poco mi vida se torna de un gris y un negro intenso Grito, por qué quiero que todo acabe Grito, por qué siento que me estoy perdiendo Grito, por qué quiero que acabe mi sufrimiento.

—¡Todas ustedes están locas!— grité con todas mis fuerzas. —¿Seguro? ¿No será otro el loco?— ese comentario me irritó aún más, estaba harto de que todo el mundo me tildara de loco. —¿Jorge, estás bien? ¿A quién le gritabas?— dijo mi esposa entrando en el estudio. —Shhh...— dijeron las voces en mi cabeza. —¿Lo ves, Jorge?

Eh llegado a la conclusión de que creer en un Dios se ha vuelto como sujetarme a la esperanza de un salvavidas mientras estoy en medio de una tormenta marina, una en la cual trago y trago agua mientras me voy agotando de intentar mantenerme a flote, temo que cuando deje de creer en cualquier cosa sea el día en el que termine con todo, ahora es la única creencia que tengo, porque ya hasta dejé de creer en mi mismo. Llegará el día en el que el mar en el que estoy se quede quieto y pueda flotar?