Se retorció nuevamente en la cama. Sus ojos cansados e hinchados se negaban a permanecer abiertos para poder caer en los brazos del morfeo, pero, ¿Que podía hacer el? Nada era claro, esas granes bolsas debajo de los ojos eran una prueba suficiente de que no había dormido lo necesario.
Miro el techo minuciosamente viendo todo que tenia ahí en busca de algo en lo cual entretenerse admirando hasta un mosquito, sonrió amargo al recordar que en otro tiempo el hubieraaplastado al insecto por no dejarlo dormir en paz pero que irónicamente ahora era su única distracción.
tic...tac..tic...tac..tic...tac..tic...tac...
El reloj de la pared inundaba el cuarto con su rítmico sonido como una melodía aburrida y lenta,tenso su mandíbula mientras su estomago se revolvía haciendo que se doblara levemente.Ya era la cuarta noche sin poder dormir y ya sentía las consecuencias de eso, el cabello se le caía poco a poco, su aspecto antes juvenil ahora se veía opaco y enfermizo como de alguien al cual esta dando sus ultimas.
Paso saliva al recordar el por de su situación o mejor dicho el causante de el problema, desvió leve su mirada pero quedando en la misma posición para que no supiera que lo miraba. Un escalofrió lo recorrió de pies a cabeza y se le revolvió mas su estomago ¡AHÍ ESTABA EL! con esa macabra sonrisa y esos malditos ojos santones, desde su lugar podía ver su maldito cartel en sus huesudas manos si es que se podía llamar así... Miro de nuevo el techo sintiendo su corazón palpitar como loco y negó leve ¿Que era una noche mas sin dormir?.
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