mycozelle Myco Zelle

Las decisiones tienen consecuencias y para bien o para mal tras una mala decisión la vida sigue enfrentándonos los unos a los otros. ¿Mery estará encerrada por siempre?


Non-fiction Not for children under 13.

#carcel #presas #noficion #drama #nuevavida #malasdesiciones
0
4.6k VIEWS
In progress - New chapter Every Tuesday
reading time
AA Share

No importa

Hola, me llamo Mery y por si aun no lo sabes estoy en prisión, el motivo por el momento no es importante pero descuida los pecados tarde o temprano se pagan.


Tal vez crean que soy exagerada y vaya que tendrían toda la razón, para empezar aun no estoy en prisión. Acabo de salir del juzgado y tampoco pienso decirles mi condena quiero que sea uno mas de los misterios que me rodean pero algo que puedo decirles es que mi abogado es un idiota, entiendo que me odie en el fondo yo también me odio un poquito pero se supone que defenderme es su trabajo.


Se que esto ha sido mi culpa pero esa no es excusa para no hacer su trabajo, escasamente tras decir mi nombre dio un par de justificaciones muy poco creíbles, lo único que buscaba ese imbécil era salir lo mas pronto de mi para ir corriendo con su secretaria mientras su esposa se cuidaba su muy operado trasero.


Y justo tras la  esquina una sombra a franjas se acerca a mi, es hora de ir a mi nuevo hogar.


Cuando mi oficial me llevaba por el pasillo mas largo que he visto en mi corta vida no sentí nada, ni culpa, ni miedo, era como si mi cerebro estuviera en modo automático, entre a un cuarto en el que tras tomar mis huellas y mis fotos pasaría a ponerme mi nuevo atuendo favorito.


Pasando por las celdas varias de las mujeres me gritaban obscenidades, era como si vieran a un bocadillo pasar ante sus ojos, llego a una celda, la cama de abajo esta vacía y en la parte de arriba la figura de una mujer, parecía estar dormida, me acosté en mi cama, el ruido fuera de mi celda, sin darme cuenta mis parpados empezaron a cerrarse, había sido un muy muy largo día.


Sara estaba en la cocina preparando el desayuno, le gustaban los pancakes y la leche caliente con miel, tenia un hermoso vestido azul cielo, era como un hermoso pájaro, su piel canela absorbiendo los rayos de sol mientras sus habilidosas manos pasaban de un utensilio a otro. Jamas podre olvidar su sonrisa.


Me desperté con una mano en la boca, por un segundo me encontré desubicada pero de golpe los recuerdos volvieron a mi, la mano tenia un brazo y el brazo tenia un cuerpo con su respectivo rostro, aun en la poca iluminada celda algunas características de su rostro eran visibles para mi.


Era una cara muy bonita, clara y de ojos y cabello oscuro, su mano aun seguía en mi boca cuando me incorpore y poco a poco me la quito del rostro.


-Si haces un solo ruido te mato

Negué con la cabeza mientras salia de la cama, en el suelo habían varios libros edición de bolsillo, ninguno era mas grande que mi mano, la chica me indico que me agachara junto a ella mientras metía unas notas entre los libros, alargue mi mano para tomar uno pero un rápido movimiento de parte de mi compañera me lo impidió.


- No te desperté para que arruines todo esto

-¿Qué?

-Que vigiles, vaya niña idiota me han puesto de compañera 


Un poco molesta me acerque a la reja, a los lados del pasillo las bombillas iluminaban una puerta de metal custodiada por un guardia, el de la derecha parecía estar inclinado sobre una de las celdas, conque así eran las cosas aquí, muchas veces había visto en las películas y en las series como algunos reclusos se aseguraban el cuello enrollándose con los guardias pero verlo en vivo y en directo era un verdadero placer. El ratón tiene un pacto con el gato ¿eh?.


Cuando gire mi cara vi como el otro guardia se había levantado, pasaba de celda en celda con la linterna revisando cada rincón, le hice señales a la chica en el suelo rodeada de libros que rápidamente los apilo uno tras otro y de un salto nos empujo sobre mi cama, cuando el guardia paso por nuestra celda no vio nada mas que dos reclusas acurrucadas, los pasos del pasillo se fueron alejando mientras mi corazón latía a toda prisa.


En el fondo sabia que era estúpido asustarme por lo que me pudiera pasar, ya estoy en la cárcel ¿Qué mas me puede pasar?. El rostro de mi compañera estaba tan cerca al mio que nuestras frentes casi se rozaban, sus manos estaban apretadas al rededor de los libros como si fueran un tesoro que hay que proteger, el silencio se volvió a instaurar afuera cuando ambas nos acercamos a la reja.


-Necesito tu ayuda, desliza estos libros a las celdas que te indique

-De acuerdo

-Me alegra que no seas de las insufribles que solo saben negarse y preguntar por todo

-No creo tener muchas opciones, ademas si me niego probablemente intentes matarme mientras duermo

-Creo que ves demasiada televisión pero eso no esta muy lejos de lo que te puedo hacer si me haces enojar


Los libros se deslizaban sin problema por el pasillo, y al otro lado de las rejas un pequeño golpe confirmaba que habían recibido el libro, ya solo quedaban unos pocos y entre bostezos y pequeñas distracciones de los guardias hasta que uno se volvió a levantar para una nueva ronda.


-No te detengas, solo quedan tres libros


Asentí, mientras revisaba algunas celdas dos de los tres libros llegaron sin problemas a sus destinos, estaba a punto de lanzar el ultimo libro pero el guardia estaba tan cerca que por un momento me tembló la mano, me falto impulso por lo que el libro quedo a las puertas de la celda a la que debía llegar, gire y la pelinegra tenia los ojos como platos.


-Voy a matarte- me susurro- ok, tengo un plan, tu solo sígueme la corriente


Dijo y antes de que siquiera pudiera reaccionar su puño impacto mi mejilla, me agarro contra la reja haciendo que esta retumbara en mi espalda y siguió golpeándome hasta que el guardia llego a nuestra celda por el rabillo del ojo vi como un brazo se extendió bajo la reja y recogía el libro.


-Ustedes dos separen sen- dijo el guardia

-Si ya escuche. dijo ella 


Cada una volvió a su cama y tras la partida del guardia creí que ella me diría algo mas o que se disculparía por golpearme pero cuando no lo hizo supuse que eso era todo, por lo menos por esa noche. Ni siquiera sabia su nombre.


Dec. 19, 2018, 12:02 a.m. 0 Report Embed Follow story
0
Read next chapter Linda hija de...

Comment something

Post!
No comments yet. Be the first to say something!
~

Are you enjoying the reading?

Hey! There are still 1 chapters left on this story.
To continue reading, please sign up or log in. For free!

Related stories