CUANDO LA MAGIA NO ES SUFICIENTE
En el centro vivía una chica cuyas dependencias estaban nada arregladas y todo se hallaba desperdigado. ¡Qué inmundicia! Vivía de hecho en el mismo lugar donde debía atender “el llamado de la naturaleza”, pero los olores no le incomodaban, parecía cosa de magia.
La habitación tenía una vista perfecta, sin paredes de ladrillo, todas ellas conformadas por un grueso vidrio, otra ventaja radicaba en el hecho de estar siempre calentita pese al más duro invierno, parecía cosa de magia.
Tan buena ubicación, llamó la atención de su compañera de parrandas.
―¡Mi novio es un infiel, ya no puedo vivir con él! ¡Permite que me quede aquí un par de días!
Sin dudarlo, aceptó. ¡Ah, la magia de la amistad!
El par de días al final se convirtió en un par de meses.
«No sé cómo decirle a esta aprovechada que se vaya», pensaba. «La magia de la amistad no es suficiente, todo tiene un límite»
Por fortuna un día llegó el dueño de la habitación.
―Hijo, tienes un gato en la pecera de la lagartija. ¡Largo de aquí!
La gata salió asustada de la pecera y la lagartija por fin pudo recuperar su habitación.
FIN
Thank you for reading!
We can keep Inkspired for free by displaying Ads to our visitors. Please, support us by whitelisting or deactivating the AdBlocker.
After doing it, please reload the website to continue using Inkspired normally.