farolitacast Farolita Cast

Si el destino así lo dicta, la luna volverá a ser maldita. † Creación: 25.11.21 † Publicación: 01.12.21 † Historia y personajes originales de @FarolitaCast. † Portada realizada por @Azucar_y_Sal. † Prohibido todo intento de copia o reproducción. † Inspirado en el Omegacember 2021 de "Es De Fanfics", pero con otra clase de enfoque.


Fantasy Dark Fantasy For over 18 only.

#inkspiredstory #Lunadesangre #hombreslobo #mujeralfa #mujerloba #alphawoman
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I

La luna plateada se tiñó de carmín en aquella noche donde su fase era llena, alumbrando la oscuridad en compañía de las estrellas que junto con ella anunciaban el profanamiento de sangre inocente a manos de las bestias poseídas por el deseo carnal. Ningún lugar era seguro ya que por más que se intentaran esconder, aquellas criaturas terminaban encontrándolos con la intención de encajarles sus colmillos y desgarrarles la carne de sus cuerpos para alimentarse de ellos; aquella masacre estaba profetizada y su intención era acabar con la raza humana para saciar la hambruna de los invasores que buscaban expandirse por todo el territorio existente para imponer su ley de regresar a la naturaleza de su especie.


—¡Mamá! —Gritó una niña aterrorizada cuando una de las bestias la acorraló abriendo la boca para dejar ver sus grandes y filosos colmillos que estaban listos para devorarla.


—¹Custos iudicii. —Aquellas palabras que fueron pronunciadas por una voz femenina hicieron volar a la bestia como si lo hubiesen golpeado con fuerza. Cuando el monstruo se levantó del piso para contraatacar, unas nuevas palabras fueron pronunciadas—: ²dissection —un manto oscuro cubrió el rostro de la niña evitando que pudiera ver cómo la criatura era partida en dos mientras su sangre formaba un charco alrededor del mismo—. ³Sanitatem somno —fueron las últimas palabras que pronunció, haciendo dormir a la pequeña que había salvado; la cargó entre sus brazos y se envolvió con su manto para desaparecer de ahí, transportándose a la colina más cercana a aquel lugar donde sus compañeros la esperaban.


—¿Cuántos quedan? —Preguntó una voz masculina.


—Como un cuarto de la población, la mayoría son niños.


Aquella persona que había preguntado asintió y alzó su mano izquierda, preparando a los demás hechiceros para atacar. —⁴Fractum parietem —pronunció chasqueando los dedos y, cuando el sonido de un estruendo se escuchó, todos los hechiceros que se encontraban en aquella colina se lanzaron al ataque contra las bestias—. ⁵Iudicium de lupo.


Tras decir estas palabras, un fuerte aullido resonó en todo el lugar siendo seguido de otros aullidos no tan fuertes, pero igual de imponentes. Aquella profecía también hizo mención de un clan que lucharía hasta el final buscando terminar con la exterminación forzada a los humanos, un clan que lograría unir fuerzas con otros clanes gracias a su líder que no buscaba más que la paz entre todas las razas y gracias a que en ese momento el muro que impedía al clan de lobos justicieros atacar fue derribado por el hechicero de la colina, fue que ingresaron al bosque y al poblado vulnerado para defender, con ayuda de los brujos, a la raza humana y salvar a los que aún seguían con vida dentro de la masacre; los siete grandes clanes que existían pelearon como una sola manada contra aquellos lobos de forma humanoide que se habían revelado yendo en contra del juramento sagrado de no atacar a los humanos, sustituyendo los gritos desesperados de las personas por aullidos y gruñidos que señalaban el enfrentamiento entre los licántropos puros y los corrompidos por el deseo.


—Mis hermanos exiliados también están ahí —mencionó la hechicera quien yacía sentada en la colina con la pequeña humana durmiendo en su regazo—, hay que ayudarlos.


—Ellos ya no tienen salvación.


—Claro que sí y tú eres el único que puede hacerlo —dijo sin obtener respuesta alguna del mayor—. ¿Piensas dejar que mis hermanos se enfrenten entre ellos hasta la muerte?, ¿aquellos que exiliaron morirán igual a manos de la manada?


Tras su pregunta, se escucharon estruendos y varios rayos de luces empezaron a vislumbrarse en el campo de batalla, los licántropos bandidos habían reclutado a varios hechiceros que los ayudaron a someter a los humanos y en esa batalla se tuvieron que enfrentar a sus propios hermanos en un intercambio de encantamientos prohibidos. Mientras el enfrentamiento mágico se llevaba a cabo en el aire, en tierra firme los licántropos justicieros seguían luchando por su propia causa trabajando en conjunto con un grupo de hechiceros de asistencia que se encargaban de llevar a la colina a todos los humanos que aún permanecían con vida.


—No creí que estos bastardos fueran demasiados —bramó un lobo de pelaje color crema tras haber matado a un licántropo humanoide.


—La mayoría son jóvenes —comentó la loba de pelaje color avellana que había luchado a su lado—, les habrán lavado el cerebro con falsas ideas —fijó su vista en el cuerpo sin vida del monstruo que tenía enfrente—. No debían acabar así.


—Eligieron el camino equivocado —intervino acercándose un lobo de pelaje gris y un poco más alto que ellos—, no hay forma de salvarlos, ni con el poder del gran hechicero ni el de la sacerdotisa —las pisadas de tres bestias que empezaban a rodearlo a él y a los dos omegas interrumpieron su discurso—. Tan solo sigamos el plan.


Quien lideraba a los siete clanes era el alfa de la manada ⁶Misty Hill, Francisco Cano, un lobo adulto de pelaje rojizo que con solo un mordisco lograba acabar con las bestias que se le ponían enfrente. Tras unir a las siete manadas, el gran hechicero y él explicaron el plan que habían ideado para salvar a los humanos, el cual requería atacar con el objetivo de matar a todas las bestias que fuesen posibles hasta que lograran dar con el líder de los rebeldes: Gabriel, el alfa que hasta antes de la guerra fue el mejor amigo de Francisco.


«¿En dónde está?» Pensó sintiendo rabia y frustración al no encontrar al traidor por ningún lado. —¿Alguien lo ve? —Preguntó a todos los lobos haciendo uso de la conexión global que le fue otorgada por el gran hechicero tras volverse líder de la inmensa manada, pero la respuesta fue negativa, ningún canino podía encontrar a Gabriel.


—⁷Dux —llamó el hechicero que permanecía en la colina, utilizando la conexión especial que entre él y el alfa tenían—, percibo algo.


—¿Es Gabriel?


—Es probable, pero hay otras energías que no le pertenecen, por eso no puedo asegurar que sea él.


—Lo deben estar protegiendo y tú sabes perfectamente quién —recalcó ocasionando que el hechicero empuñara las manos—. ¿Hacia dónde?


—La colina contraria.


Francisco aulló y un grupo de cinco lobos se acercó de inmediato a él para correr en dirección al alcor que le habían indicado. En su camino fueron escoltados por tres hechiceros que los fueron protegiendo de los encantamientos que los exiliados les iban arrojando, al mismo tiempo los cinco lobos protegían a Francisco de los humanoides que se les atravesaban; pese a que el alfa era mucho más fuerte que su escolta, en ese momento toda su atención estaba dirigida en llegar al lugar indicado y no en pelear, por lo que sus compañeros se encargaban de las bestias mientras él procuraba encontrar a Gabriel.


Faltando un par de kilómetros para llegar, el alfa percibió dos olores que no tardó en reconocer, aumentó la velocidad de su carrera dejando atrás a sus dos escoltas que se encontraban luchando con los rebeldes y, estando a pocos metros de la colina, gruñó al ver las dos siluetas que yacían de pie en el alcor. —¡Veneficus! —Llamó al hechicero de la colina quien de inmediato apareció volando a su lado.


Una de las personas que estaba en el alcor saltó de este transformándose en un lobo adulto de pelaje negro mientras que la otra persona se elevó en el aire dejando caer a la tierra su capucha. Pupilo contra maestro, hermano contra hermano, así era como podía describirse el enfrentamiento que estas cuatro personas estaban por iniciar.


¡⁸Venenum acus!


—¡⁹Flammeum scutum!


Gracias al escudo que Veneficus conjuró pudo evitar que una de las agujas de su pupilo se encajara en Francisco, debido a ello, el hechicero conjuró otro encantamiento que le permitió alejar al más joven de ahí para que pudieran pelear a cierta distancia de los lobos con la intención de que el brujo exiliado no le hiciera daño al líder. Mientras los dos hechiceros combatían en el aire, los dos licántropos batallaban intercambiando rasguños profundos que los hacían sangrar, así como fuertes gruñidos en dónde dejaban ver sus enormes colmillos, dignos de los grandes alfas que eran.


Es bien sabido que para matar a un lobo basta con perforarle el corazón, pero hay otra forma del que no todas las razas tienen conocimiento y esos dos alfas lo sabían a la perfección ya que en una batalla de lobo contra lobo, esa era la única manera en la que podían terminar con el otro y era justo lo que buscaban hacer.


—Quién diría que el gran Francisco Cano estaría dispuesto a matar a su mejor amigo —se burló Gabriel al separarse del contrario.


—Dejaste de ser mi amigo en el momento que profanaste la sangre bendita y a los humanos.


—Solo volví al estado natural de nuestra raza, ¿o acaso olvidas de qué se alimentaba Licaón?


El lobo rojizo se abalanzó sobre él y aquella pelea comenzó a dejarlos con heridas severas, pero no mortales gracias a que el daño no fue provocado en un punto vital. La batalla entre lobos, humanoides y hechiceros aún continuaba dentro del pueblo y el bosque, el derramamiento de sangre no paraba y con ello la luna seguía manteniendo su coloración rojiza pidiendo a gritos que la masacre terminara cuando todo quedaba en manos de los dos líderes de ambos bandos que peleaban con todas sus fuerzas intentado derrotar al otro en un enfrentamiento uno a uno que no se prolongaría por mucho.


¡Dux!


El grito de Veneficus resonó por todo el lugar hasta llegar a la colina del otro extremo dónde la hechicera guardiana permanecía de pie ahí palideciendo al escuchar a su mentor. Sin embargo, ese llamado no sería nada comparado con lo que vendría después.


¡No!


Una gran voz, profunda e imponente, se escuchó en el pueblo, en el bosque y en las colinas de las afueras, alertando a lobos, humanoides y hechiceros quienes no pudieron evitar sentir un escalofrío al escuchar aquella voz.


¡¡No!!


Se escuchó nuevamente, pero con mayor fuerza, consiguiendo que los licántropos profanados dieran un paso hacia atrás y los hechiceros de ambos bandos comenzaran a temblar.


¡¡¡No!!!


Por tercera vez se escuchó esa voz y en ese instante todo cambió. Era la voz de un alfa, pero de uno tan autoritario que de inmediato hizo arrodillar a los licántropos humanoides, hizo que los lobos puros bajaran la mirada y que los hechiceros bajaran a la tierra para hacer una reverencia; esa voz había acelerado los latidos de todos por el indescriptible terror que les había provocado, convirtiéndolos en unos sumisos ante lo amenazante que era. Los únicos que permanecieron de pie fueron la hechicera de la colina y los seis alfas líderes de sus clanes quienes de inmediato pasaron a su transformación humana, compartiendo todos una expresión de terror, temiendo lo peor.


No tardó en que un grito desgarrador resonara alertando a todos por la inmensa fuerza con la que fue emitida. Un segundo grito vino y con ello los licántropos bandidos comenzaron a llorar por el miedo que esa voz les provocaba; al escucharse un tercer grito, con la misma intensidad que los dos anteriores, los siete clanes comenzaron a aullarle a la luna de sangre como nunca antes lo habían hecho, más que aullidos eran lamentos acompañados de un inmenso temor. Tanto el ulular de los lobos como los gritos desgarradores de aquella voz imponente lograron escucharse hasta la guarida del clan Misty Hill que se encontraba a muchos kilómetros de distancia del campo de batalla, asustando a los omegas y niños que ahí se encontraban resguardados en espera de que los lobos guerreros volvieran de la masacre, siendo una niña en particular quien fijó su vista en la luna de sangre al sentir que un nudo se le formaba en la garganta cada vez que escuchaba el grito desgarrador.


—Papá…

────────────────────────────
¹Guardián del juicio.
²Disección.
³Sueño curativo.
Pared fracturada/rota.
Juicio del lobo.
Colina brumosa.
Guía.
Agujas venenosas.
Escudo flameante/llameante.

Dec. 2, 2021, 6:12 a.m. 0 Report Embed Follow story
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