Si una sorpresa quieres hallar; Es mejor que sigas leyendo; Aunque no es mi mayor secreto; Seguro que lo querrás encontrar; Al refrigerador solo debes buscar; Lo que más desea tu corazón; Y darle fin a tu desesperación; Y a su sorpresiva ausencia; Ya que a tu adorada Camelia; La degollé sin ninguna compasión;

Abracé cruelmente sus besos, como si de una bailarina se tratase; Ámbar era su nombre y conocí el amor en su sonrisa de desconfianza. Compasión le sobraba, y corazón le faltaba, para devorar con sensible deleite a quien se atrevía a conocer su cólera inestable y anhelante de sangre.

El suspiro de mi alma por ver a la distancia, aquel hermoso lugar difícil de escalar. Seguí trepando lentamente colocando un pie enfrente, caí resbaladiza al llegar a tu cima.

De sangre tiñen el suelo, de plomo llenan el alma, con fuego matan la calma, y alas cortan en vuelo. Castigan con su flagelo, al que no se arrodilla, y en ellos se semilla, temor por ese nuevo dios. Mas bajo su sombra atroz, solo buscan metal que brilla.

Lánguido yace gozoso, alardeando petulante, hierba otoñal distante, amasando vigoroso. Maullido ambicioso, su suavidad me despeja, jugando con su madeja No puedo mentirte, felino. Patita más cola veloz, Sin querer tú te alejas

Las fechas de año nuevo no marcan los principios de tus cambios. Los principios de tus decisiones, los escoges tú.

É hora de seguir em frente. Esquecer o que algumas horas atrás era o presente e agora virou cinzas fantasmas que balançam minha mente. Não me preocupo com o tempo, porque sei que ele estará comigo, contando os segundos para o recomeço. O que passei, guardo no fundo do coração, mesmo que a cicatriz ainda arda. Voltei à estrada da vida de cabeça erguida. Minhas lágrimas secaram, meus temores estão morrendo. Volto a respirar o ar puro da liberdade, correndo ao sabor do vento da realidade.

Por qué hago todo lo que hago? Para cambiar el presente; para no ser sólo un ente que se oprime por un pago; para que un amargo trago no sea la existencia toda; para no estar a la moda en esta infame sociedad; para no ser comodidad, sino quien desacomoda.