Hoy debía ser un día memorable, ¡es mi cumpleaños! Y nada es mejor que despertar cuando es tu día especial, y eso lo sabia muy bien.
O creía saberlo, este día debía sentirse como un sueño, pero esta es la vida real. Y en víspera de mis 18 cumpleaños vino a recordarme porque llamaban vida y no sueños.
Tenía que despertar, abrazar la libertad que 18 años te pueden dar, sacar la licencia de conducir e ir a mi primer bar, quizás a mi primer tatuaje. tomar alcohol en grandes cantidades, guardar mi conciencia en un rincón y conocer mis limites.
Irme de casa, comenzar una nueva etapa. Llorar cuando mis padres me fueran a dejar a la universidad y decirles cuanto los extrañaría por verlos cada fin de mes y no todos los días, como ya era la costumbre.
Por eso al despertar en esa camilla de hospital, y saber que realmente no volvería a verlos, mi primer pensamiento fue que estaba en la universidad y nos veríamos al finalizar el mes. Por eso secaba mis lagrimas, tragaba mis gritos de dolor. Solo era un pequeño tiempo de separación, volvería a casa y ahí estarían, solo era un sueño.
Pero recuerden lo que dije al comenzar, esta es la vida, no un sueño.
Y si algo llegara a parecerse a ella, estoy seguro que serian las pesadillas.
en este universo veremos como nuestros protagonistas, pasaran por distintas historias y mundos, con problemas y encrucijadas mas difíciles de resolver, acompáñalos en este camino, que esta a punto de empezar. Erfahre mehr darüber La Trampa de los Suspiros.
Vielen Dank für das Lesen!
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