「❀」Viviendo con los Yamada┇Hypmic + OC Follow einer Story

Nishi pensaba que lo había perdido todo. Después de quedarse sin sus padres cuando asaltaron su departamento en Zoshigaya, ella sentía que su vida no tenía rumbo. Ya ni le interesaba ingresar a las batallas de división o siquiera formar un grupo para hacerlo.

En sus recuerdos sólo vagaban las llamas del departamento quemado. Aún sentía las cenizas en sus zapatillas desatadas. Caminaba y vivía en la calle, sola, a donde el viento la llevase.

Y cada tanto se detenía a observar las pantallas televisivas de la calle, en donde se observaban a las divisiones de rap que se presentaban representando a distintas ciudades de Japón. Ikebukuro, Yokohama, Shibuya, Shinjuku, Nagoya, Osaka. En algún sueño lejano había querido ser como ellos.

Mientras se las ingeniaba para buscar algo de comer, se cruzó una noche con una joven de cabellos oscuros y ojos fulminantes, más alta que ella. La conocía de alguna parte...

- Nishi, no esperaba verte por aquí.

Nishi tragó saliva.

- ¿Me conoces?

- Como no conocerte con esa placa.

Nishi se volvió a ver la placa que tenía en su chaqueta, la placa que había diseñado para cuando fuera una rapera, con una luna y tres estrellas en ella. Recordó cuando ella y sus dos amigas con las que había pensado formar un equipo y entrar en las batallas de división. Se habían hecho un tanto populares entre las calles en ese entonces, quizás por eso Otome sabía de su existencia.

Aun así todo seguía siendo un sueño. Había perdido rastro de sus amigas, y también había perdido sus esperanzas.

- ¿Cómo me encontraste?

- Alguien me avisó que te encontrabas cerca.

Nishi sintió la presencia de alguien detrás de ella, y cuando se volvió se encontró frente a alguien que conocía de haber visto tantas veces en las pantallas televisivas.

Casi se cayó de espaldas al verlo.

- Probablemente ya lo conozcas. Nishi, él es Ichiro Yamada, líder de Buster Bros.

La chica observó al rapero de arriba abajo. Tenía sus manos en los bolsillos de su campera holgada roja, los cabellos oscuros un tanto despeinados y una media sonrisa saliendo de sus finos labios.

- N-No entiendo... ¿a qué va todo esto?

- Te he visto montones de veces caminando por las calles - respondió Ichiro con su cálida voz - Pensaba que eras una vagabunda más, pero mi hermano me ayudó a identificarte.

- ¿Tu hermano es hacker o que?

- De hecho si.

Nishi miró a Otome, quien le asintió con la cabeza simplemente.

- Nishi, en su momento serías líder de Night Hunters. Eso solía escuchar cuando pasaba por algunos callejones. La gente solía hablar mucho sobre el prometedor futuro que podían tener.

- No es necesario recordarlo. Ese futuro ya no existe.

Ichiro se acercó un poco más a ella.

- Quiero darte un futuro.

Nishi abrió los ojos como platos al escucharlo decir aquello.

- ¿Por qué estarías dispuesto a hacerlo con alguien como yo? No soy nadie importante, sólo una chica sin hogar.

- Porque desde el Partido de las Palabras no queremos que nadie se quede sin oportunidades - respondió Otome con su voz firme - Nishi, tenías la oportunidad de ser alguien grande, pero a pesar de que la perdiste por circunstancias que no pudiste controlar, no me parece justo que andes mendingando por las calles.

Nishi había caminado desde Zoshigaya hasta Ikebukuro, y sus pies ya estaban cansados de buscar un refugio. Al escuchar las palabras que Ichiro le dijo a continuación, sintió algo que no había sentido en mucho tiempo.

- Junto a Otome hemos decidido que te quedes en mi casa.

Esperanza. Eso era lo que no había sentido desde que lo había perdido todo. Tan sólo escuchar esas palabras, una chispa de esperanza se encendió en su interior.

- Así que... ¿qué dices, Nishi? ¿Te gustaría quedarte a vivir junto a mi y mis hermanos?

Nishi parecía estar viviendo en un sueño. Vivir junto a los Buster Bros era mucho más de lo que podía pedir. Después de mucho tiempo, una sonrisa se formó en sus labios.

- Si... me gustaría.

Esa misma noche Ichiro la llevó a su casa, que no se encontraba tan lejos de allí. Con el sentimiento de que al fin tendría un hogar, sus pies ahora le pesaban menos.

Cuando llegaron a la residencia, amplia y bastante moderna, se encontró con dos chicos más, esos que había visto por la televisión callejera tantas veces.

- ¡Ichiro! ¿Esa es la chica que ibas a buscar? - preguntó uno de los hermanos, el menor.

- Así es - Ichiro rodeó los hombros de la chica con su brazo - Jiro, Saburo, les presento a Nishi, nuestra nueva hermana. Nishi Yamada.

Nishi abrió los ojos sin poder dar crédito a sus oídos.

- ¡Siempre quise a una hermana! Ya me cansé de tener que soportar hombres - respondió Saburo.

- ¡Oye! Si que eres cruel - le replicó Jiro.

- ¡No más que tu!

- ¡Pero si tu eres el más cruel aquí!

Nishi no sabía si reírse sería malo, pero siendo sincera no pudo evitar soltar una carcajada. Reírse de esa forma después de mucho le hizo sentirse bien, además de que el ambiente allí parecía agradable.

- Te acostumbraras - le dijo Ichiro con una sonrisa.

Porque Nishi pensaba que lo había perdido todo, pero en realidad había ganado más de lo que podría haberse imaginado.

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