Era casi media noche y la lluvia no cesaba, sin embargo a la luz de la luna y una pequeña vela se podía divisar la silueta de un hombre, el cuál parecía escribir algo.
Querida Ellaine-
Lamento que tenga que ser así amor mío, pero no creo posible hacer esto mientras me miras a los ojos; no puedo más con esta farsa y tal parece que todo nuestro al rededor se niega a permitirnos seguir; entiendo que el dejar esto significa que nuestro compromiso será cancelado pèro no queda más por hacer. Esta carta no es más que una despedida, quiero que sepas que te amé y te sigo amando, igual que la pasada noche de navidad en la que nos juramos estar juntos.
Siempre tuyo, Jacob
Mientras terminaba de escribir una voz sonó de repente.
-Ya es hora, deja eso en el escritorio.- fue lo único que dijo antes de que Jacob se levantara e hiciera lo posible por llegar a la puerta de la casa.
-No puedes obligarme a nada!, es víspera de navidad, ¿acaso no tienes sentimientos?- respondió agitado y tomando la carta antes de que otro hombre saliera de las sombras y lo aprisionara.
-Hago lo que me da la gana, y tú sabías que enamorarla no era parte del trato.-
-Simplemente pasó.- respondió Jacob sollozando pero el otro hombre no le dio importancia, solo lo tomó por el brazo, dejando la carta volar, y desaparecieron juntos en el bosque.
Quizá si él no hubiese tenido que escapar, la carta llegaría, pero ni Ellaine ni nadie nunca sabrá que fue de esa despedida de navidad, ni de Jacob tampoco.
Vielen Dank für das Lesen!
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